365 días

Capitulo 7

Jamas imaginé que irian a preguntar tal cosa, mucho menos que lo haria un chico a quien apenas conozco y no es mas que el nuevo niñero ¡Mierda! ¡Calmate Alelí! Calmate y respira.
Terminamos de limpiar aquel enchastre y guardé la jarra de jugo en el refrigerador y cuando quise salir de la cocina me detuvo sujetandome del brazo suavemente... ¡Por favor! No hagas mas dificil esto... no puedo mas, necesito contarlo, necesito decirselo a alguien de confianza. No puedo decirselo a Marco, apenas ayer lo hemos conocido ¿Que pensaria? ¿Por que se lo diria si ni siquiera lo conozco lo suficiente como para decirle algo de mi intimidad, eh? ¡Ya! Respiré profundo y me voltee viendolo.

-Lula...- solté un ligero suspiro -en realidad es mi hija-

Puedo jurar que sus ojos se vieron aun mas grandes que los platos para sopa y su boca tartamudeaba al intentar hablar, pero no conseguia soltar una sola palabra... rendida decidi contarle toda la verdad desde el comienzo, y claro, haciendo que prometiera guardar el secreto al menos hasta que yo misma pueda contarlo.

Flashback:

Tenia 15 años cuando fui a una fiesta con mis amigas, era en la casa del chico por el cual moria de amor en ese entonces, y todo marchaba mas que bien: habia musica, baile, bebidas... y ese fue el error... beber. No me habia dado cuenta de que en la bebida, que aquel chico me habia ofrecido, tenia una pastilla; y pues, ya imaginas lo que pudo haber sucedido luego. En fin. Yo no habia sentido ningun sintoma y el estomago no se me habia hinchado como dicen que suele suceder en las pocas semanas de los embarazos... fue a los 4 meses que senti movimientos extraños, entonces le pedi a mi madre ir al hospital, ya que el dolor no cesaba y ¡Sorpresa! Estaba embarazada, de una niña, el medico lo decia tan naturalmente y tranquilo -como si ya para él fuera algo normal ver aquella situacion- claro que mi madre no sabia lo que habia sucedido en aquella fiesta, y al salir del hospital se lo conté todo llorando... no queria abortar y matar al bebe, asique decidi seguir con el embarazo, pero no estaba lista para ser madre. Aunque, a medida que la bebita crecia dentro de mí y veia las ecografias lograba enamorarme cada vez más, por lo que mi madre -cuando estaba casi por entrar a la sala de partos en el noveno mes- me hizo aquella propuesta "la hacemos pasar por tu hermana menor querida, o la darás en adopcion, tú decides"

Fin del flashback.

-y... bueno... ya ves mi decision- bajé la mirada

-lo que has echo es de una chica valiente- hizo que lo mirara -si esa pequeña supiera esto... de seguro estaria muy orgullosa de su verdadera madre- añadio y no pude evitar sonreirle