Capitulo 20

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Anne habia escogido un vestido muy bonito para mí -lo debo admitir- asique me lo puse viendome al espejo, solté un ligero y pronfundo suspiro, y luego la vi a ella parandos por detrás mientras jugaba con mi cabello intentando saber que peinado hacerme... mis ganas de quedarme encerrada y llorar en mi cama, aumentan cada vez más... solo veo a Anne a traves del espejo como me peina y sonrie intentando que yo haga igual, pero no da resultado, solo aumentan mis ganas de llorar sin parar <ya querida, solo debes tener paciencia> es la frase que ella me repetia una y otra vez con la esperanza de asi calmarme al menos un poco ¿Como me podria calmar sin Talulah? Solo podré volver a sonreir y ser feliz cuando la tenga a mi pequeña aqui conmigo ¿Acaso es mucho pedir eso? No es nada del otro mundo, solo quiero a mi niña ¿Que pasaría si yo en realidad fuera su hermana? De seguro no tendria una minima oportunidad siquiera... justo ahora tengo un arma debajo de la manga, y es la verdadera identidad de Lula, su verdadera historia...

-están bellisimas- dijo Lidia cuando llegamos a su casa

-gracias mamá- sonrió Anne, pero yo solo veia a un lado en pleno silencio mientras que ambas me miraban intentando animarme

Toda la noche habia estado de aquel modo, no hablé con nadie -ni siquiera con Marco- no habia probado un solo bocado siquiera en la cena. Despues de la medianoche habian subido el volumen de la musica haciendo cualquier tonteria con tal de verme una minima sonrisa en el rostro e incluso Marco se habia puesto su corbata en la cabeza y habia puesto su camisa mal abrochada haciendo tonterias como los payasos con tal de alegrarme un poco al menos... y no es que no apresie todo lo que hacen, de hecho les agradezco inmensamente, pero sin Talulah no siento ganas de nada, no tengo animos de nada y además... ¡Ahh!

365 díasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora