Happy Family [Corrigiendo]

Capitulo 14

Namjoon ayudaba a su pareja en lo que podía, ya sea en algunos deberes del hogar o sino atendiendo a su pequeño hijo, ya que conforme pasaban los meses el nuevo miembro de la familia se hacía notar. En base a ello, ambos estaban constatemente discutiendo el hecho de llevar a su pequeño al jardín de niños.
- Apá. ¿Cuándo sale bebé? - preguntaba mientras Seokjin fregaba los trastes
- Dentro de muy poco hijo. - respondió sonriente sin siquiera mirarlo
- ¿Puedo jugar con él? - seguía preguntando el pequeño curioso
- Por supuesto que sí. - respondió el moreno
- Cuando cresca un poco, sí. - Seokjin se agachó un poco para abrazar al menor
- No lo cargues, recuerda que tienes otro bebé dentro amor. - se acercó el moreno tomando al pequeño niño - Ve a descansar, no sabemos cuando el bebé nos de la sorpresa de querer nacer.
- Esto no una enfermedad, sé que tienes miedo por como fueron las cosas con Suga, pero no estamos en esa misma situación, estamos los tres tranquilos llevando una vida pacífica lejos de todos los problemas. - reclamó
- Iré a jugar con Suga afuera.
- Platícale que comenzará el jardín de niños pronto.

Padre e hijo quisieron jugar a patear el balón, tipo futbol solo que dos personas. Suga intentaba jugar sonriente, pateaba como podía el balón causando ternura a su padre, quien solo miraba e intervenía enseñándole.
- Me cansé. - dijo sentándose en al cesped
- No sé porque no me sorprende. - rio sentándose junto al niño
- No puedo jugar. - se cruzó de brazos haciend puchero
- No reniegues pequeño. - lo abrazó - En el jardín de niños te van a enseñar eso y también varias cosas nuevas.
- ¿Eh? - confundido - No, quiero quiero jardín niños. - hizo un pequeño berrinche
- Tienes que ir, irán varios niños que pueden ser tus amigos. - habló el moreno intentando calmarlo
- No quiero. - volvió a gruñir
- Eres un pequeño gruñón. - comenzó a hacerle cosquillas - Hoy debo ir a inscribirte
- Que no quiero, quier casa. - habló señalando su hogar vindo como Seokjin se acercaba
- Justo vienes, Suga no quier ir a la escuela y se hace tarde para inscribirlo. - miró a su pareja quien se sentó junto a ellos
- Descuida, yo hablo con él. - sonrió

El moreno se despidió de su familia dejándolos solos mientras iba al jardín de niños a inscribir a su pequeño. Seokjin no se quizo quedar fuera, tomó al niño de la mano y regresaron a casa, él tenía un plan divertido para su pequeño.
- Buenas tardes señor. ¿Se le ofrece algo? - preguntó un hombre de saco y corbata
- Sí, buenas tardes. Vine a inscribir a un niño de casi tres años. - sonrió
- Está bien señor, le daré unos documentos para que puedan ser llenados por usted. - buscó en su cajó - Por cierto. ¿La madre del menor? - preguntó curioso
- No pudo acompañarme, se quedó con el niño ya que a la vez tenemos otro en camino.
- Comprendo, llene este formulario. - entregó lls papeles - Debe pagar una cuota el día de mañana. Las clases comenzaran el lunes del próximo mes temprano por la mañana. - dijo mientras el moreno los llenaba
- Está bien, yo mismo lo traeré.
- Eso sería todo señor, puede retirarse.

Mientras Namjoon hacía todo el papeleo en el jardín de niños, Seokjin estaba divirtiéndose con el menor, se le había ocurrido preparar galletas.
- Tenemos que verter harina. - dijo mirando al menor
- ¿Uh? - preguntó confundido - ¡Yo quiero! ¡Yo quiero! - dijo al ver el polvo blanco
- Está bien, pero con mucho cuidado. - sonrió entregándole el vol

Suga con ayuda de Seokjin vertió la harina, pero un mal movimiento hizo que ambos quedasen ensuciados con harina, rieron al verse completamente blancos para luego proseguir su preparación de manera calmada y divertida. Cuando ya las galletas fueron colocadas en el horno, Namjoon había hecho su aparición en casa viéndolos completamente empolvados a lo que rio a carcajas sin poder pasar.
- Se volvieron blancos sin avisar, hubiera llegado más temprano. - figió renegar
- ¡Apá! Yo galletas. - dijo el pequeño corriendo hacía su padre
- Tú eres el azúcar. - lo miró cargándolo
- Amor, yo te amo moreno color canela. - lo besó
- No azúcar. - gruñó el niño
- Creo que las galletas están listas. - dijo Seokjin para luego ir hacía el horno

Namjoon y Suga fueron a lavarse las manos mientras Seokjin sacaba las galletas del horno, luego los tres se sentaron a comer. Bebieron una bebida caliente mientras conversaban y reían. Esa noche Namjoon se ofreció a lavar los trastes mientras Seokjin hacía dormir a Suga, para finalmente reencontrarse ambos en la cama.
- Hoy ha sido un largo día. - comentó Namjoon
- Dímelo a mí, ha sido un día agotador, a la vez que el bebé no ha dejado de moverse. - reprochó echandose a su lado
- ¿En serio? - lo besó acariciando el vientre de su pareja - Hola bebé, soy apá. - habló de manera tierna - Me dicen que haz estado inquieto todo el día de hoy. - rio
- No ha dejado de moverse, al menos no ha pateado mucho el día de hoy. - rio un poco
- ¿Qué tanto haces ahí dentro? - volvió a preguntar el moreno

El bebé se movía y pateaba causando gracia ambos padres, quienes le hablaban y se divertían con el nuevo miembro de la familia.
- ¡Apá! ¡Apá! - una voz se escuchó entre las risas
- ¿No estabas durmiendo? - preguntó Seokjin mientras el pequeño subía a la cama
- ¿Qué hacen? - preguntó el pequeño curioso
- Estamos jugando con tu hermanito. ¿Quieres unirte? - propuso Namjoon
- ¡Sí! - celebró y con ayuda de su padre se acercó al vientre de Seokjin - Hola hermanito, te quiero mucho... - intentó hablar el pequeño de manera tierna
- ¿Viste que se elevó un poco? Ha pateado, te escuchó y parece que también te quiere. - Suga abrió los ojos como platos quedando algo asustado
- ¿Suga estás bien? - preguntó Seokjin
- Creo que se asustó cuando su hermano pateó, se ha quedado inmovil. - respondió el moreno riendo
- Quiero dormir aquí. - se echó entre ambos cubriéndose con las sábanas
- Esta noche amerita un cuento. - dijo Namjoon apagando la lámpara

Seokjin y Suga se acomodaron mientras Namjoon comenzaba a narrar una historia divertida, la cual captó la atención de ambos un buen rato, ya que debido al cansancio se quedaron profundamente dormidos. El moreno al percatarse, besó en la frente a ambos, dio media vuelta para cerrar los ojos y dormir.