4. Lazos

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Me encerré en mí habitación esperando a que Nic saliera del baño. No quería ser molesto, pero tenía la sensación de que le había pasado algo. Decidí esperar un rato más, y al ver que no volvía me acerqué a tocarle la puerta. Nic esperó un poco y abrió con los ojos llorosos. No le pregunté que le pasaba, simplemente la abracé y la guíe hasta mí habitación.

-Cuando necesites hablarlo, aquí estoy -Le dije-. Siempre vas a poder contar conmigo.

Nicole se sentó en mí cama y quedó con la vista al piso. Veía como lágrimas caían por sus mejillas y a mí se me estrujaba el corazón. No me gustaba verla mal.

-Es que... -No podía ni hablar. Estaba llorando prácticamente desconsolada- Mí mamá... Me acaba de enviar un mensaje. Esta hospitalizada, en estado grave.

Me quedé petrificado. Karina, la mamá de Nicole, por mucho tiempo, había sido como mí segunda mamá.

-Pero ¿Por qué? -Dije- ¿Que le pasó?

-Parece que tuvo un accidente en auto, está gravísima -Me acerqué y la abracé-. Yo no sé qué voy a hacer si le pasa algo Fede, pero no puedo volver.

-¿Por qué no? -Le dije.

-Es que no tengo plata, no hay forma de que logre ir y volver. Solo me queda confiar que mí familia la va a cuidar bien... -Se acurrucó en la cama y yo me puse al lado de ella.

-Todo va a estar bien. Ya vamos a encontrar la manera, ¿Si? -Dije mientras la abrazaba.

-Gracias -Me correspondió el abrazo-. Por todo lo que estás haciendo. Te escuché hablar con Mathi. Si ocasiono algún problema quiero que me lo digas, ¿Si?

Claro que no ocasionaba ningún problema. Mathi la iba a adorar.

-No te preocupes. Si yo confío en vos, el resto también -La miré-. Y créeme que confío.

Así nos quedamos abrazados hasta que caímos rendidos.

Narra Nic

Me desperté en los brazos de Fede. Nos habíamos quedado dormidos mientras hablábamos. Cuando levanté la vista ví que había una mano sosteniendo una cámara grabando desde la puerta de la habitación. Casí pego un grito.

-¿Quien eres? -Dije- ¿Que haces?

La mano se fue y se escuchó a alguien corriendo por las escaleras.

-Fede... -Intenté levantarlo- Fede, había alguien grabandonos.

Ni se inmutó. Salí de su abrazo y agarré mí celular. Salí de la habitación y fui abajo. Estaba Mathi con la cámara mostrándole algo a Agus, Sebas y Sarah.

-Marica, borra ese video -Le dije. No sabía si reirme o enojarme-. Fede te va a matar.

Mathi me miró y me hizo un gesto con los hombros como restándole importancia.

-Nic, ¿Son algo con Fede? -Preguntó Sarah.

-Emmm... Amigos -Dije apenada. Creo que me estaba sintiendo atraída por el. Pero no era el momento.

Sarah me sonrió y se fue a la cocina. Mathi me ofreció un licuado que habían preparado y que sobró.

-Gracias -Le dije tomando un vaso y sirviéndome un poco-. ¿De que es?

-Frutilla y naranja -Dijo Agus-. ¿Te gusta?

Lo probé. Estaba riquísimo. Me hizo acordar a uno que tomábamos Fede y yo en el hotel de Disney. Agarré otro caso y serví un poco.

-Ahora vuelvo -Dije, y me dirigí a la habitación de Fede.

Abrí la puerta y el estaba acostado con el celular en la mano. Cerré detrás de mí y me acerqué para darle el vaso que le había servido.

-Pruebalo -Le ofrecí.

Me miró dudando.

-No tendrá nada raro, ¿No? -Dijo desconfiando.

-No niño, pruébalo. Lo hizo Agus -Le sonreí-. Me hizo acordar al que tomábamos en el hotel.

Me sonrió y agarró el vaso. Probó y puso cara de fascinación.

-Wow, es idéntico -Dijo sorprendido-. Frutilla y naranja. Mí favorito.

Le sonreí. Me acordé de que quería ir a visitar el centro de México.

-Fede, quiero ir a pasear por México, ¿Podrías darme indicaciones? -Le pregunté- Lugares a los que podría ir, cosas que podría probar, etc.

Me sonrió.

-No te voy a dar indicaciones. Mejor te llevo yo.

Lo abracé.

-No tienes que molestarte. -Le dije.

-Nunca es una molestia cuando se trata de vos.

Nos sonreímos. Fuí abajo y me acordé que no tenía ropa. Hoy mismo me iba a comprar. (Aclaración: Nicole no tenía plata como para comprar dos pasajes de avión, pero si tenía plata. Tampoco tenía valija, había ido con las manos vacías confiando que en que su amiga le iba a prestar algo. Más adelante nos enfocaremos en porqué no fue donde ella) Le iba a pedir mientras tanto algo a Agus.

Bajé y me encontré con Mathi grabando y Sebas y Agus hablando mientras desayunaban.

-Agus, ¿Puedo hablar contigo un momento? -Le dije.

-Claro, vayamos a mí habitación. -Dijo sonriendo.

La seguí a dónde parecía que estaba su habitación.

-Me apena mucho pedirte esto pero, ¿Podrías prestarme algo de ropa? Hoy mismo pienso comprarme algo, es que vine sin valija ni nada, y anoche dormí con esto y hoy quería ir a recorrer la ciudad.

Me sonrió.

-No te preocupes. Vení, ¿Que te gustaría? -Dijo mostrándome su placard.

Agarré un top bordó de tirantes ajustado, con unos jeans negros de tiró alto rotos en las rodillas y unas zapatillas blancas.

Agarré un top bordó de tirantes ajustado, con unos jeans negros de tiró alto rotos en las rodillas y unas zapatillas blancas

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Me cambié y fuí a la habitación de Fede. El también ya estaba listo para salir con su mochila. Agarré mí celular que había dejado cargando abajo, nos despedimos y Fede llamó a un Uber. Se veía tan lindo.
Tenía puestos unos jeans azules oscuros, una remera rosa y una chamarra de jean.

Tenía puestos unos jeans azules oscuros, una remera rosa y una chamarra de jean

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Tenía la esperanza de que hoy pudiéramos re-conectarnos. Extrañaba tanto su compañía.

Mi Más Esperada Casualidad ~Fedecole~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora