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Ashton Feraud era el hombre más divertido, hablador, y carismático que había conocido en su vida. Había estado tan nerviosa cuando llegaron. La galería estaba cerrada ese día porque estaban cambiando algunos cuadros grandes y para evitar accidentes Ashton había decidido cerrar por ese día. En cuanto entraron la recepcionista los envió amablemente a la oficina del pelirrojo, Roger entró sin tocar- siendo reprendido por Blue- y la escena allí dentro era bastante rara

Ashton estaba "bailando" de una forma extraña, moviendo la cabeza de adelante hacia atrás como un rockero, uno de sus brazos extendidos hacia arriba y el otro girando como las aletas de un ventilador, las rodillas flexionadas e iba agachándose cada vez más, se suponía que llegaría al piso pero alguien interrumpió su baile. Cuando se giró a encontró con su buen amigo gruñón riéndose de él con satisfacción, como si finalmente hubiera conseguido algo que de verdad quería. No le dio importancia porque eso era lo que normalmente sucedía, Roger se burlaba y él seguía haciendo sus pendejadas sin importarle nada, pero entonces notó una cabecita asomarse detrás del moreno. Una cabecita rubia, luego una cara preciosa, una verdadera muñeca, un milagro de ella naturaleza. Esos ojos, esa nariz, esa boca llena, esa inocencia sonrojando sus mejillas

- ¡Ah!- gritó asustándola, de inmediato intentó arreglarlo- no, no, no, no te asustes dulzura. Ve aquí- Roger le gruñó- cállate- regañó sin mirarlo- vamos ven aquí- sonrió como si estuviera hablando con una niña pequeña

Blue se acercó lentamente hasta quedar a unos dos metros, entonces él se acercó y tomó sus mejillas en un acto sorpresivo para ella que otra vez se asustó. Sabía que estaba frente a Ashton Feraud pero no sabía que era tan raro

- ¿Tu eres Blue Damon?- preguntó entusiasmado, ella asintió. Roger rodeó los ojos fastidiado por la rareza del pelirrojo- inteligente, creativa y una belleza. Yo sí que tengo suerte ¿Cuándo puedes comenzar a trabajar dulce?- ella abrió los ojos sorprendida. Ashton Feraud estaba allí frente a ella, ofreciéndole trabajo en su galería, diciéndole que era una belleza creativa e inteligente y ella no podía formar palabra. Asintió como una tonta y él rió- eres toda una dulzura- dijo sonriéndole

- Oye ya basta, aléjate de ella- gruñó Roger

- No entiendo que haces tú aquí, mi cita era con ella no contigo- volvió a mirarla- y bien ¿Cuando?- Blue se obligó a salir de su ensoñación y responder

- Mañana mismo, ahora, cuando quiera señor...- él le puso un dedo sobre los labios acallándola, Roger estaba de brazos cruzados en una esquina enfurruñado

- Ashton dulzura, y tutéame que no estoy tan viejo como él- señaló a Roger con la cabeza y ella rió asintiendo- entonces te espero mañana a las nueve de la mañana obviamente- murmuró para sí la última palabra mientras caminaba a su escritorio, regañándose por hacer una aclaración tan tonta- mañana hablaremos de lo que tienes que hacer y me gustaría tomarte algunas fotos si estás de acuerdo, eres muy hermosa y realmente quiero enmarcarte- ella dudó algo confundida

- Es una rara costumbre suya, tiene fotografías de animales y cosas extrañas en su casa pero nunca había fotografiado a una mujer y a mí realmente me molesta que quieras fotografiarla a ella- terminó hablándole a su amigo pelirrojo

- Roger por Dios madura- dijo sin importancia- además no pondré su fotografía en mi casa- susurró pensando en algo brillante

- ¿En dónde entonces?- preguntó enfadado

- Solo quiero guardarla con mis mejores trabajos- se encogió de hombros mintiendo deliberadamente, sabía con exactitud donde iría esa hermosa cara. Se sentía un niño travieso- además no es tu decisión

- Es verdad- murmuró ella, Roger la miró con el rostro fruncido por completo y ella copió el gesto del pelirrojo encogiéndose de hombros- mañana a las nueve, y me encantaría posar para us... para tí- Ashton sonrió feliz

RogerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora