Mi cerdito, mi lindo y tierno cerdito...

Capítulo 7: ¿Metedura de pata? Espero que no...

El lugar ya estaba completamente listo para que la gente que había ahí, pudiese bailar y tomar todo lo que quisiese en la barra.

—Hey, Koichi, ven, toma un poco.— Incitó Aryu caminando hacia él.

—Eh... no gracias...—

—Anda... por favor..., sólo un poco, pruébalo...— Insistió.

—Ya dije que no..., no me apetece...—

—Bueno... ¿Qué te pasa? Estás serio...—

—¿A mi? Nada. ¿Por qué lo dices?—

—¿Dónde está el Koichi divertido? El alma de las fiestas...—

—Tsk...— Koichi, sin a penas responder y haciendo una pequeña mueca de desagrado, tomó la copa que el rubio tenía en su mano y bebió de ésta con rapidéz.

—¡Hola chicos...! ¿Qué hacéis que no estáis bailando? Venid...— Yo-Ka, acercándose a ellos, extendió sus brazos y con éstos rodeó el cuello de ambos chicos.

—Pff... Hahaha... Ahora vamos... Le estaba ofreciendo un poco de vino al Bambi...— Comentó Aryu alejándose un poco de Yo-Ka y Koichi.

—Ah... si... Hehe... Aryu... Tráeme otra copa.— Fue tan seria la expresión del pelirrosado al pedírselo, que el rubio, fue sin rechistar.

—Koichi, ¿a dónde se fue Tsuzuku? La última vez que le vi, fue hace año y medio...— Dijo
Yo-Ka elevando su voz por la música.

El pelirrosado, Koichi, se quedó sorprendido pues no sabía cómo decirle que estaba muerto. Tsuzuku era su mejor amigo y decirle eso el día de su boda..., le afectaría mucho...

—Eh... Acompáñame a fuera por favor...—

Tomó a Yo-Ka con rapidez de la mano y lo llevó fuera del local, tras un coche que estaba aparcado y muy cerca de la entrada.

Koichi con el corazón encogido, intentó explicarle sin dar muchos rodeos...

*Flashback*

"Meto está viendo qué hace Koichi. Meto no puede apartar la mirada ni un segun..."

—¡Eh! ¡Se van...!— Exclamó el pequeño de Meto con una voz aguda, pues interpretaba a su osito mientras iba tras ellos sin pensarlo.

—¡Tú! ¡Quédate aquí!— Dijo el guitarrista MiA, que iba detrás de él.

Los dos, fueron a escondidas tras el pelirrosado y el rubio con mechas negras, es decir, Yo-Ka.
Primero se escondieron tras un muro y cuando salieron, se volvieron a esconder en unos arbustos.

*********

—Yo-Ka... A ver... cómo te explico...—

—Con calma. ¿Le sucedió algo?— Esa pregunta sonó muy alarmante...

—Tsuzuku se...—

Repentinamente, saltó MiA de los arbustos entrometiéndose en la conversación y quitándole la palabra a Koichi.

—Tsuzuku se fue a... a Dubai. Sí, de vacaciones. Se quiso tomar un descanso y alejar de todo el mundo... Por eso no hay forma de por ahora contactarle...—

La verdad no sonó muy convincente aquello pero... Yo-Ka se lo tragó, como cuando un niño pequeño pedía dinero para golosinas y sus padres decían que no tenían.

—¿Y por qué no me avisó?— Soltó Yo-Ka pensativo.

—Porque... porque no quería que se enteraran más personas. Escepto nosotros, su madre y sus hermanos.— Volvió a decir MiA.

Meto, que aún seguía detrás de los arbustos abrazando a Ruana y escuchando la conversación, salió y se escondió detrás del guitarrista.

Koichi, suspiró de una manera muy pesada y, miró a MiA y a Meto después de tanto tiempo.
Con sólo ver su cara, se podía apreciar que le habían quitado un peso de encima.

—¿Me habéis dejado solo?... Qué malos...— Salió Aryu con dos copas de vino en la mano y se paró de sopetón tras ver a los otros dos miembros de Mejibray. —Vaya... la familia casi completa...— Bromeó.

Yo-Ka, se acercó a Aryu y segundos después de disculparse, miró a Koichi ofreciéndole la copa que tenía el contrario en la mano.
El pelirrosado, miró a Aryu y con señas, le indicó que se fuesen, porque seguramente tenían que hablar los miembros de la banda.

—Cuánto... Cuánto tiempo...— Susurró Koichi.

—Así es... ¿Por qué decidiste "salir"? ¿Por Tsuzuku? ¿El Bambi no aguantaba estar sin el cerdito? Hmm... Pobre... De todas formas, tanto tu contrato como el de él serán anulados este 31 de Diciembre...— MiA, en un tono burlón y sintiéndose un poco superior que Koichi, le miró entrecerrando sus ojos.

—Shh... Meto piensa que no deben discutir... que no lo hagan, en memoria de Tsuzuku... Por favor...— Rogó Ruana.

El tono de llamada del móvil del pelirrosado, sonó de repente interrumpiendo la discusión.

"Número desconocido"

...

"Llamada perdida"

Koichi pasó completamente de responder.

—Seguro es de una compañía de esas... que llaman para joderte el día comiéndote la cabeza con el seguro de vida, la instalación de placas solares o similar.— Rechistó.

Tanto Meto como MiA quedaron en silencio, mirándose el uno al otro. Segundos más tarde, murmuraron algo entre ellos que el pelirrosado no logró escuchar.

—Vayamos a dentro... está refrescando un poco...— Contestó Meto haciendo la voz de Ruana.

No tuvieron más remedio e hicieron eso mismo...