La había dejado encerrada, a base de candados y barras
de seguridad que solo un experto de la CIA podría descifrar
y claro... EL. Después de retirar el dinero de Dulce lo había
colocado en un botín que guardaría bajo siete llaves en
alguna parte del pequeño departamento. Sin embargo, había
dejado el dinero suficiente para la comida que necesitaba,
sin mencionar alguna ropa de segunda que le compraría a
Dulce, tanteando, pues no se sabía su talla.
Y después de algunas horas... había vuelto a casa.
Ucker: Mi.erda -se dijo a sí mismo al abrir la cerradura.
Cerró la puerta y observó a Dulce con una sonrisa radiante
sobre el diván, con una lata de cerveza en la mano-
Dulce: Vaya, llegas y ya insultando...
Ucker: No te lo dije a ti, es que... ¿estás borracha?
Dulce: ¿Yo? -preguntó ella sorprendida, al mismo tiempo
que soltaba una carcajada. La lata de cerveza revotó,
cayendo al suelo-
Ucker negó con la cabeza, tiró el botín sobre la pequeña
mesa y con la otra mano tendió la pizza que había traído.
Ucker: Te dejo apenas una hora y haces esto. -la reprendió-
te he traído ropa y comida. -dejó la bolsa de ropa sobre el
divan- no puede ser... eres peor que una niña pequeña, te
has tomado mi colección de Heineken... y ni siquiera... -cuando
se detuvo, se percató de que hablaba solo-
La vio tendida, tenía los ojos levemente cerrados en un
descanso profundo. Bonita. Muy bonita. Quizá había sido
por algo que había terminado eligiéndola a ella de entre
esas cinco mujeres. Quizá alguien intentaba decirle algo.
Pero no quería ponerse a pensar en eso, al contrario,
después lo notaría. La cargó entre sus brazos, intentando
no despertarla. Los borrachos eran más duros que una
piedra, pero aun así tuvo cuidado. Sus manos se aferraron
a los muslos de ella, teniéndola con firmeza. Caminó hasta
la habitación, abriéndola con una mano, sus músculos se
tensaron cuando tuvo que acostarla sobre las sábanas en
el suelo. 'Toda mi colección de Heineken'.... pensó. Y una
leve sonrisa se expandió entre sus labios.
Dulce: Lo lamento... - le dijo, Abriendo los ojos suavemente-
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Secuestrada (Vondy) I
Teen FictionCuando a Christoper Uckermann, uno de los criminales más buscados en todo Estados Unidos,le convocan para el secuestro de cinco chicas millonarias en Las Vegas, no duda ni un segundo en aceptar la oferta.Lo que nunca pensó...fue enamorarse de una de...