4. Contradicción por amor

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No se muy bien a que hora llegue a la casa de Santiago, había caminado sin rumbo alguno por un largo tiempo hasta que el sueño me venció. Él ya estaba durmiendo así que sin hacer ruido fui al que ahora es mi nuevo cuarto y me acosté tratando de no pensar en ella aunque cada vez que lo intentaba más difícil se me hacia. 

Agarre un cuaderno que había sobre la mesa y empece a anotar palabras sueltas para una nueva canción que quería componer pero como no encontraba la forma de relacionarlas unas con las otras deje el cuaderno en su lugar y me dormí. 

Simona

Lucre me despertó bastante temprano y no daba más del sueño, ayer después de que se fue Dante no pude dormir mucho que digamos. Mire el piano que se encontraba a pocos metros míos y pensé en lo mucho que me gustaría cantar con mi amigo una canción pero él ya no vivía acá y no podía seguir dándome ese privilegio, volví a mis tareas de limpieza y me puse a cantar cada vez con más entusiasmo. 

Unos pasos se escucharon que provenían de la escalera que bajaba al playroom, me gire para ver quien era y estaba Ailin con sos rulos atados en un rodete y una sonrisa algo exagerada en su rostro 

-¿Ganaste la lotería? - le pregunte una vez que llego al lado mío 

-Eh no, ¿por que? - me miro con confusión y yo solamente negué señalando su rostro

-¿A que se debe tanta felicidad? - la mire mientras dejaba el plumero que tenia en la mano sobre la mesada 

-Ah es que hoy vos, las chicas y yo vamos a salir al bar de Dante a tomar unos tragos - dijo entusiasmada 

-¿Y por eso tanta emoción? Vamos siempre al bar de Dante - Esta chica era rara sin duda alguna

-Si, pero de solo pensar que voy a ver a Blas me emociono - su sonrisa me dolió, se o bueno sospecho que Junior tiene algo con Blas y no quiero que mi amiga sufra 

-Nunca te vi tan emocionada por alguien, creí que vos no eras de enamorarte - le dije tratando de buscar la forma de decirle que él no era para ella 

-No, igual con Blas no tenemos ningún tipo de ataduras pero igual no te preocupes que enamorada no estoy - me sonrió y se giro para irse - no te olvides que hoy vamos al bar 

-Si, me lo acabas de decir hace cinco segundos - ella río y después se perdió por las escaleras, mire de nuevo los artículos y sonreí al pensar que probablemente me lo cruce a Dante ahí, ya lo estaba extrañando por acá. 

Termine de limpiar todo el playroom, y una vez que estaba listo me fui a la cocina a servirme un vaso de agua, Muzo estaba ahí controlando la lista de compras y Oscar estaba a su lado esperando a que le de la indicación de ir a comprar las cosas. 

Me senté en la mesa tomando un poco de agua y los observe en silencio. Me acorde que Lucre me había comentado algo de Oscar que tenía que ver con una china así que le dedique mi mejor cara de "con Lucre no te metas"

-¿Pasa algo Simona? - Muzo pregunto levantando la vista del papel que tenia en sus manos 

-No se, eso habría que preguntárselo a Oscar - No despegue la mirada ni un segundo de él 

-¿Yo que? Yo no hice nada - se puso a la defensiva y yo le sonreí 

-¿Que paso con Lucre? - le pregunte directamente y el miro para otro lado

-Nada, yo la amo y ella no me deja amarla - dijo él levantando sus hombros

-No se haga hombre, bien que le esta dando a la china del chino que esta acá a la vuelta - Lucre salio de algún lugar, no se muy bien de donde pero nos sorprendió a todos 

Amor CiegoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora