Amor Ciego

49. "Confio en vos"

Dante

Entre a la casa de mi tío, estaban todos desayunando así que los salude y después fui a la cocina donde se encontraban Simona y Lucre, esta última estaba lavando los platos mientras Simona hablaba y comía medialunas, como ninguna me había visto me acerque por atrás a ella y puse mis manos en su cintura haciendo que pegue un grito tan alto que su amiga se giro asustada a ver que pasaba. No pude aguantar la risa mientras ella me pegaba en el pecho.

-Estas loco Dante ¿Como me vas a asustar así? Casi me agarra un paro cardíaco - dijo ella exagerando mientras movía sus manos de un lado a otro

-Que exagerada - dije aun riendo

-No estoy exagerando - dijo seria cruzándose de brazos y yo tire mi cabeza hacia atrás para después abrazarla 

-¿Estas lista? - pregunte cambiando de tema y ella me miro confundida

-¿Lista para que? - puso sus manos sobre mis hombros y me miro a los ojos sin entender de que le hablaba 

-Para ir a ver departamentos - dije sonriendo y ella abrió sus ojos de par en par

-Me olvide, tengo que pedirle permiso a Javi - dijo mientras se paraba de la silla 

-Otro día que trabajo sola, lo sumo al millón - comento Lucre irónicamente y Simona rodó los ojos

-Espérame acá - dejo un beso en mis labios para después salir de la cocina en busca de Javi 

Mientras esperaba a que volviera, me senté y agarre el plato con medialunas, comiendo una por una de un mordisco bajo la mirada fulminante de Lucre 

Simona

Fui al living y todas las miradas llegaron a mi con una sonrisa mire a Javiera haciéndole una seña para que hablemos, ella asintió y se acerco a mi.

-¿Que pasa Simona? - pregunto ella mirándome fijamente esperando a que hable

-Necesitaría tomarme el... - iba a seguir hablando pero ella empezó a negar con su cabeza - es que Javi es importante - mentí y ella suspiro

-No Simona - dijo firme y yo puse mis manos en forma de ruego con uno de mis mejores pucheros, note como el patrón se levantaba y se acerco a nosotras - Simona se quiere tomar el día - explico Javi 

-Que se lo tome, no hay problema - Diego me miro con una sonrisa y yo le agradecí esquivando la mirada seria de Muzo

Cuando volví a la cocina note que Dante se había comido todas las medialunas y me cruce de brazos mirándolo mal

-¿Que tengo? - pregunto él confundido 

-Te comiste todas viejo, no te puedo dejar solo ni un segundo, eran para mi esas - dije quejándome y el me sonrió 

-No te preocupes después te compro otras - dijo él levantándose y agarrando mi mano 

-Más te vale - dije en tono de amenaza y salimos de la casa por la puerta de servicio 

Caminamos de la mano sin decir mucho, él guiaba el paso mientras yo lo seguía. Cada tanto apoyaba mi cabeza sobre su hombro haciendo que me abrace y estar más cerca de él. Cada momento a su lado era único.

-¿Averiguaste por departamentos, No? - Le pregunté levantando mi mirada para verlo ya que estábamos caminando hace bastante y todavía no llegábamos a ningún lado

- Si mire algunos hoy a la mañana, si no me equivoco acá a dos cuadras tiene que estar uno - Dijo él pensativo

-¿Si no me equivoco? Decime que sabes donde estamos - dije frenando y cruzandome de brazos