Kō no lo pudo creer, aquello que vivía debía ser solo producto de una horrible pesadilla. Y así fue que ella se dio cuenta de que no tenía sentido alguno, ya que las fechas no cuadraban. ¡Tan solo había pasado un año y tantos! No cinco años como dijo Hazuki.
Apretó entonces su pecho y golpeo con su mano libre su frente, una y otra vez, una y otra vez, hasta que por fin... le apareció un chichón pero no sentía dolor, lo cual, confirmaba la teoría del sueño. Entonces comenzó a repetir en su mente varias veces que tenía que despertar y convencerse de lo que veía no era real.
Estaba algo desorientada pero rápidamente logró guiarse entre el bullicio distorsionado, ya luego las letras que pasaban por una pantalla le recordó donde exactamente estaba. La televisión estaba encendida y su brillo le ayudó para buscar y encontrar su celular, rápida lo ojeo y aliviada ella respiró. ¿Cuándo fue que se quedó dormida? Casi no lo recuerda, fue increíble imaginar que pasó directamente a un estado profundo de sueño tan pronto su cuerpo toco la cama.
"fue un sueño" Kō quería convencerse y picó, literal, un ojo con su dedo "auch, eso fue estúpido"
Las 22:30 de la noche marcaba la hora, ya había dormido como quería aunque parecía que su cuerpo estaba más cansado que antes. Tal vez un baño le arregle los huesos, pensó, tratante de incorporarse para luego tambaleándose salir de su habitación. Como pudo terminó metida de cabeza en la bañera, mientras el agua caliente poco a poco subía hasta que sin aire se quedó y despertó completamente.
"¡Yagami!" la voz de Catherine le sacudió "¡debes darte prisa o perderás el vuelo!"
Catherine podría ser a veces de ayuda para Yagami, aunque otras veces solo le gustaba molestarla y avergonzarla. Pero volviendo a lo anterior, fue un alivio que alguien le recordara su vuelo aunque a ella no se le olvidaba. Además que bueno saber que existía gente que la rodeaba justo después de despertar de una rara pesadilla.
Como el tiempo no deseaba detenerse para darle más descanso a la rubia, no le quedaba más que apurar sus movimientos para en media hora estar lista y preparada. Como rayo, figurado, Yagami Kō entraba en el carro de Catherine para que fuera ella quien le diera ese aventón.
"¿no se te queda nada?" le preguntó abordando el vehículo y acomodándose de inmediato, a ella no le importaba así que lo dijo así nomas
"No que yo sepa" respondió la rubia pensando en alguna posibilidad, pero no era para tanto así que le restó importancia "además no es como si me fuera para siempre"
"más te vale que así sea" Catherine arrancó el motor y tan pronto estaba en el camino se echó a correr, con el coche claro "será un poco aburrido por aquí estas semanas de tu ausencia"
"crees eso porque ya no hay quien te haga mandados" Yagami siguió la conversación pero ella estaba pensando en otra cosa
"..."
Se despidió de Catherine y justo en ese momento se anunciaba ya su vuelo, así que agitando su mano derecha y arrastrando su maleta hiso su abordaje. Ya en su lugar cómoda ella se sintió, pero solo fue su cuerpo porque su mente estaba echa líos.
"será un largo viaje" dijo pensativa viviendo en su cabeza la supuesta boda de su amiga "Rin..."
Yagami era terca y bastante despistada, pero al menos su corazón sabía lo que necesitaba. Catherine estaba en lo cierto y razones habían muchas, mas Kō era testaruda creyendo que lo que sentía no le llegaría a su chica.
En tantos esos ratos de tratar de acomodarse su teléfono le vibra avisándole constante. La rubia lo mira recordando que algo tenía que hacer, ahí es media noche pero en Japón seguro y ya pasó el amanecer.
Deslizó en su agenda varios números hasta que dio con el correcto, Una llamadita antes de partir pues pronto ya no se le permitirá mantener encendido su celular.
"Kō-chan..." siente alivio recorrer todo su cuerpo escuchando la angelical voz de Rin
"buenos días rin" Kō se mordió el labio, parece que sonó algo emocionada "¿Cómo estás?"
"bien" dice ella pero Kō se queda en blanco unos segundos, pues en ese exacto aquel sueño le atormente duramente
"este... rin..." a veces no sirve prepararse adecuadamente, Kō quería preguntar, algo en ella necesitaba saber que al volver rin estará ahí esperándola "recuerdas aquella vez... que me dijiste..." pero simplemente no sabía cómo hacer la pregunta
"Kō-chan..." cada silencio, cada pausa incomoda no hacía más que preocupar a rin
"jeje lo siento, esto es difícil para mí" dijo pero si dio cuenta de que estaba llevando la conversación hacia el mismo punto
"¿difícil? ¿Tiene que ver con el trabajo?" Kō suspiro para sus adentros, rin no ha cambiado
"bueno no..." ella dudó pero si quería saber tenía que seguir "recuerdas lo que me dijiste cuando terminamos FS3..."
"no sé"
"querías... ser la primera en saber cuándo yo..." Kō creyó que si buscaba un hueco por esa conversación anterior podría saber si rin estaba interesada en casarse algún día "... me fuera a casar..."
"..." Kō escuchó un golpe sordo que le molestó y en el acto pensó situaciones posibles para lo ocurrido al otro lado de la línea
"¿Rin?" Rin no contestaba, pero distinguía un murmullo ahogado en la distancia "Rin... ¡Rin!"
"perdone señorita" le dijo una azafata que pasaba por ahí "estamos a punto de despegar y al parecer no estaba prestando atención, ¿podría por favor abrocharse el cinturón y apagar su celular?"
Kō obedeció dudando de hacerlo porque en su mente las posibilidades se volvieron inciertas y desagradables. A menos deseaba llegar tan rápido como fuera posible, algo no andaba bien y ella lo sentía así.
"Rin"
...
Alguien gritaba su nombre, alguien la necesitaba
Era egoísta pensar que así fuera, Rin deseaba que así fuera. Mas ya no hay en su alma esa esperanza que un día soñó verla hecha realidad, ya no existe su momento de cuentos del beso esperado
"¡Rin!"
Era curioso como de pronto todo se derrumba ante sus ojos, era curioso creer que el amor es el sentimiento más hermoso pero al que de un momento a otro no soportaría sentirlo y desearía jamás haberlo tenido. Es mentira lo que dicen...
"¡Rin!"
"Kō-chan..."
Ese amor la engaña, la hace creer en fantasías y la envuelve en falsas ilusiones que terminaran lastimándola. Esa rubia que la abraza y llora sobre su pecho no puede ser real, pero Rin no deja perder aquella oportunidad.
"Kō-chan..."
"Rin, estas bien"
Rin se aferra a su cuerpo sintiéndose ligera en ese momento, esa Kō imaginaria se ha vuelto fuerte, piensa ella mientras intenta no apartar su mirada. Rin cae suavemente sobre la cama, y junto a ella su fantasía le acompaña.
"te amo Kō-chan"
"yo también te amo Rin"
Rin creyó saber todos los efectos del alcohol en su cuerpo, pero las sensaciones eran nuevas incluso más reales que cualquier otra cosa. Los besos, las caricias, las palabras dulces y aquellos ojos hermosos que la miran. Kō Yagami era tan real.
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Lo Que No Se Puede Evitar
Hayran KurguUn pequeño cuento de mi pareja favorita de todo el universo NewGame! Kou xRin