Capítulo III: Una Visita Muy Esperada

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     Sentado en su trono, Lucifer apoyaba su rostro sobre su mano izquierda, mientras con la derecha hacía sonar el trono con golpeteos rítmicos de sus dedos. Se encontraba ansioso, pues ya era el primero de enero, la fecha en que Rio siempre llegaba.

     La ansiedad de Lucifer aumentó al sentir la presencia espiritual de Rio al entrar al infierno, algo imposible de confundir a estas alturas, luego de tantos encuentros.

     Pero el señor de este infierno se preguntaba por qué Rio estaba tardando más de lo usual en recorrer el infierno. Lucifer dudaba mucho que los demonios menores le estuvieran brindando un gran entretenimiento a Rio y era imposible que representaran algún obstáculo: esta pregunta rondaba por la mente de este señor infernal y sólo le producía más ansiedad. De cualquier forma, ya era hora de hacer los preparativos para el combate.

    —Alexander, Platón ¡vengan aquí de inmediato! —Cambió su pose apoyando ambos brazos sobre los apoyos del trono. Su rostro se mostraba con extrema seriedad.

     —¿Qué se le ofrece, mi señor Lucifer? —dijeron ambos al unísono, al mismo tiempo que se inclinaban.

     —Imbéciles, ¿no es obvio? Los he llamado porque Rio está dirigiéndose a aquí—. El rostro de Lucifer expresaba la ira que hasta ahora había estado reprimiendo—. Platón, registra todo con pluma y pergamino, sin importar cuál sea el resultado, esta batalla es histórica, además, espero poder ganarla y tú, Alexander, haz un buen trabajo preparando este lugar para que sea un campo de batalla digno.

     Fue entonces que el infierno tembló ante una poderosa explosión, no había mucho tiempo para prepararse: Rio estaba cerca. Lucifer sentía el deseo de venganza en la profundidad de su ser mientras pensaba que su orgullo estaba en juego.

Guerrero Inmortal Del Bajo Mundo 1 - Rio e Iris un amor incomprendidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora