Fallo en el sistema

11- El engaño

Fuera del local una discreta furgoneta de fontanería se estacionaba en el parking de tierra que comunicaba la discoteca con una fábrica de herramientas. La escusa perfecta. Dentro los agentes preparaban a Reed y a Connor para entrar, el androide ya tenía instalados en su sistema el dispositivo de grabación y de audio, solo debía conectarse a Bluetooh. A Reed le instalaron un micrófono en uno de los botones y le pusieron unas lentillas que grababan al momento(*). Milagros de la tecnología les decía Hank. A Reed, mientras le preparaban, observaba a Connor con descaro, bonita ropa, le quedaba bien ceñida, marcaba cada musculo de su abdomen ¿sería de tacto suave el androide?. Dieron a Reed una bebida en una petaca que podía ocultar bajo el pantalón, del mismo aspecto que la que encontrarían en la discoteca, él tendría que cambiar la copa de Connor, para que pudiera imitar beber. Este invento de la unidad científica de la brigada también se evaporaba en el interior del androide para no levantar sospechas.

 Les dieron la señal de salida y se dirigieron a la disco.

- Deberías ir más relajado, Connor- Dijo Hank por el micro de la furgo, Connor asintió y intentó andar más relajado y sonriente. 

- No lo intentes, a mi me sigues pareciendo una basura, ya veremos como son tus compañeros divergentes de dentro. Espero que sean fáciles.. ya me entiendes- Río Gavin, Connor no lo había entendido.

- No estoy seguro de a que te refieres, pero si vamos a ser compañeros ahora lo mejor es que dejes de meterte conmigo y te metas en tu papel.

Se pararon junto a la puerta y el portero les observó con interés, buscaba alguna cosa sospechosa, pues era una disco a la que solían frecuentar divergentes, sitió de reunión, un refugió en el fondo, donde esconderse, donde si llegaba la policía el dueño diría que eran suyos los androides y que estaban programados para estar de fiesta, solo como señuelo para atrapar clientes. Era una norma no escrita, pero susurrada entre los muros de cemento gris. 

De Connor ni dudaron, fue el primero en pasar, y en observar el interior de la colosal discoteca tres pisos divididos en dos salas por piso. Cada sala del edificio contenía un DJ, que tocaba un estilo diferente, una temática distinta, distinta decoración, distinto color de bebida ¿sería esa de la que hablaba Hank? Él sabia a que sala acudir, la que tenía decoración de ciencia ficción, una impresionante sala de paredes plateadas, que para acceder tenían que bajar escaleras con luces led de neón, decorada con maniquís y carcasas dañadas de androides con modificaciones luminosas y extravagantes, la luz del ambiente era penumbra a excepción de las irritantes luces parpadeantes que parecían moverse al compás de la música. Se acercó a la barra y pidió una bebida, le guiñó un ojo al camarero por petición de Hank. Y recuerda no beberla, había añadido.

Reed llegó un poco molesto, pero se posicionó a su lado en la barra. - Vaya.. todos estos serán como tu?.. Connor, mira a ese..-Señaló a un chico al fondo, todos los agentes prestaban atención a los monitores, si en efecto, el joven señalado coincidía con las características. - Aquí tienes, recuerda que esta no tiene efectos, así que has tu mejor actuación.- Le paso la copa.

Connor cambió su diseño, tal como había hecho con Hank y se acercó sonriente a la zona en la que se encontraba el joven, bebió cuando ya estaba prácticamente al lado del otro, para no levantar sospechas, realmente se parecía la misma bebida, ese sabor, la misma sensación. Le serviría para recrear la misma situación que con el teniente. El cual decidió aconsejarle. - Connor, recuerda que estas borracho, acércate a él y imita tropezarte. Cuando te mire observarle de pies a cabeza. Eso hará que piense que tienes interés con él.- Asintió telematicamente con un mensaje. Se tropezó casualmente con el objetivo, y le observo detenidamente ante la mirada expectante del contrario.

- Oh vaya.. lo siento... perdona.. mi sistema ya está muy alterado.. - Connor cambió su diseño para que sus mejillas se sonrojarán más, tal y como funcionaba el programa que se distorsionaba al contacto con la bebida.