VII

568 51 10
                                    

Hinata se encontraba a dolorida por los golpes recibidos ese día, su frente le dolía puesto que había roto la nariz de Deidara con ella. Ella sonrió al recordar eso ya que no ella misma se lo creía. Se encargó de ponerse un poco de maquillaje en esa parte de su cara para ocultar el moretón y así evitar alguna sospecha del preguntón de su nueva pareja. La cita que había propuesto Toneri era una cena en el mejor restaurante de Londres; "Que creativo" pensó Hinata rodando los ojos con un poco de nostalgia ya que Kiba siempre se encargaba de planear las citas más divertidas y creativas del mundo, nunca te aburrías con el.

Hinata se puso el vestido azul que esa misma mañana le había dicho a Sasuke que "supuestamente" Naruto había ido a recoger, esto con el motivo de hacer más creíble la excusa.

Mientras ella terminaba de registrar la cantidad de dinero ganado esa semana por el comercio de la mercancía, Naruto tocó la puerta de su habitación haciendo que ella en un acto de reflejo tirara la pluma con la que estaba llenando los registros y haciendo las anotaciones matemáticas. Escondió bajo un montón de ropa sucia la carpeta y abrió la puerta.

-Ahora que quieres Naruto- ella hablo rodando los ojos.

-Si, estoy bien Gracias por preguntar- dijo Naruto en un tono falso- nada más venía a infórmale que recibí una carta de "ya sabe quien"- Naruto extendió la carta.

-¿De quien? ¿de Voldemort?- Ironizó Hinata tomando la carta.

-Muy graciosa- Naruto dio una risita falsa.

-¡De Kiba! Ya lo extrañaba- ella abrazó la carta

Naruto carraspeó ya que él se sentía completamente fuerte de lugar, el vio a través de la puerta el montón de ropa sucia y para interrumpir ese incómodo momento usó esa excusa.

-Veo que tiene mucha ropa sucia, permítame llevármela- Naruto entro u estaba dispuesto a tomar la ropa, pero Hinata se interpuso haciendo que Naruto alzara una ceja- ¿Sucede algo?

-N-No, para nada, solo que esta ropa, tiene que ir a la tintorería- ella sonrió falsamente.

-Entonces déjeme la llevo

-¡No!- Hinata grito y luego callo- Esto, es que me volveré a poner- ella jugo con sus dedos y desvío la mirada de sus ojos azules.

Algo raro en realidad, ella nunca, nunca, pero nunca, desviaba la mirada, el mismo Deidara lo había dicho, era algo que Hiashi admiraba de ella, pero que le ocurría con esos dos ojos azules. La atrapaban.

-¿Ok?- Dijo Naruto confundido.

-Si ya terminaste tu trabajo entonces fuera- ella señaló en dirección a la puerta y lo empujó- avísame cuando venga Toneri- fueron sus últimas palabras.

Naruto extrañado solo se encogió de hombros y siguió su camino hacia la cocina. Abrió un cajón en el cual estando más de un mes ahí había descubierto que nadie lo abría, de hecho él empezaba a dudar si alguien sabía que existía. Ahí dentro el tenia parte de sus "cachibaches", el tomó un pequeño micrófono y un auricular que grababa todo lo que escuchaba el micrófono y al mismo tiempo permitía que Naruto lo escuchara. Naruto se puso el pequeño auricular en el oído derecho y luego cerró el cajón, asegurándose de que nadie lo haya visto.

Escuchó el sonido de un carro, no, una camioneta. Solo podía significar una cosa; Toneri. Era la oportunidad de Naruto.

Unos momentos después escucho el sonido del timbre y para evitar de que uno de sus compañeros abriera la puerta, el grito "yo voy". Naruto abrió la puerta y el peliblanco se estaba acomodando la corbata y recibió a Naruto con una sonrisa.

Mi espía ideal (Naruhina)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora