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Sus fines de semana desde que se mudó eran iguales, solo se quedaba en casa jugando con su teléfono o viendo películas. Una tarde sus padres se fueron de compras, lo invitaron a ir pero la chica no tenía ánimos. Estuvo en su cuarto, completamente aburrida y por alguna razón recordó el vídeo de aquella vez. Ella entendía perfectamente que a su edad sus hormonas no le darían tarea fácil.

—¿Que estoy haciendo, maldición? —susurró para si misma mientras se sentaba en su escritorio, la página que había buscado ya estaba cargando, se estaba arrepintiendo. Miró hacia la puerta de su habitación, ya había puesto el seguro, pero cuando estuvo a punto de apagar su computadora, varias imágenes de chicas con muy poca ropa aparecieron en la pantalla. Mordió sus labios, "Es normal" pensaba al seleccionar cada imagen.

—Es normal, esto... Sí, es muy normal en una adolescente como yo. Debo tener más conocimiento. —trato de sonar convincente, pero no pudo. Su corazón latía con fuerza y su respiración iba haciéndose cada vez más pesada. Su mano bajó lentamente y se adentró bajo su ropa interior, solo acariciaba, estaba jadeante. No despego los ojos de la pantalla y al pasar los minutos sintió que estaba cerca de correrse, no quiso soltar algún ruido así que mordió sus labios, pero en ese momento ocurrió algo que no se esperaba, la mirada de la chica desconocida apareció en su mente, su voz... Y justo en ese momento, llego a su punto máximo. Se tomó unos segundos para recuperarse y al caer en cuenta de lo que había echo, sintió la mayor vergüenza.

—Acaso... ¿Me corrí pensando en ella? ¡Soy una...!

—¡Tierra llamando a Chaeyoung! —grito su amigo cerca de su oído, la chica reaccionó de inmediato.

—¿Qué pasa?

—Te estoy hablando.

—Lo siento, no te oí.

—Oh, no me digas. —dijo con sarcasmo, la más bajo sonrió.

—¿Que decías?

—No, ya nada.

—Idiota, volvamos a clases.

Chaeyoung no podía ver el rostro de su profesora, cada vez que lo hacia recordaba lo que había hecho mientras pensaba en su hija. Trato de evitar sus preguntas durante toda la clase, ya no participaba como antes. Estaba más que avergonzada.

—Vayamos al parque, Sana y Tzuyu también irán, ¿Quieres?

—Claro, suena bien.

La chica salió primero del salón, ella terminaba de recoger sus cosas y una voz llamo su atención.

—Son. —llamo su profesora.

—¿S-si?

—Acércate, por favor. Debo preguntarte algo.

Estaba nerviosa y sus manos comenzaron a sudar, se acerco a un paso muy lento, sin levantar la mirada. Pero sabía que era de mala educación no mirarla, así que lo hizo.

—Bien, quería saber si estabas dispuesta a anotarte con las labores sociales del instituto. Verás, me falta una persona de esta sección, Kim fue la primera en hacerlo.

—¿Q-que debo hacer exactamente?

—Falta un ayudante en la biblioteca, he notado que eres la única de este salón que se atreve a entrar. Deberás empezar a las 5:00pm, tu labor terminaría a las 6:00pm. Solo será una hora.

La chica lo pensó, estaba dispuesta a negarse pero sentía que se lo debía por lo que anteriormente había pasado. Bajó saliva lentamente y aceptó.

Precious Girl; MiChaengDonde viven las historias. Descúbrelo ahora