Nuestra historia *17 x 18*

02: El ataque del águila.

N17: Estábamos caminando hacia mi casa, había un incómodo silencio ya que no sabía que decirle a mi hermana, tengo algo de miedo, puede que se enoje conmigo por no regresar por ella cuando reviví, por Dios, ella es realmente hermosa y linda, pero a la vez muy reencorosa; aunque ahora no ah dicho nada puede que lo tenga guardado dentro, aunque descifrarla siempre a sido complicado.

- Oye, 17, ¿Te puedo preguntar algo?.- me dice sutilmente sacándome de mis pensamientos de inmediato, dándole toda mi atención.

- ¿Qué pasa?.

- ¿Tú sabes que fue lo que pasó con número 16?.

- ¿16...?.- susurré diciendo su nombre, haciendo memoria.

Flashback.~

- ¿Qué fue lo que pasó con n°16?.- cuestionaba 17 a su misterioso acompañante, quien estaba más bien por obligación que por gusto a lado de él, dándole información.

- ¿16?.- Repitió tocando la punta de su barbilla, haciendo memoria de todo lo que habia observado en el campo de batalla. - Rayos. - murmuró de primera mirando fijamente a esos ojos azules amenazantes de destrozarlo, pues se veía que su paciencia estaba llegando a su límite. - 16 murió... Cell lo eliminó frente a todos, lo lamento.

- Es una pena, con razón no lo eh visto por aquí. - soltó el androide con cierta indiferencia, aunque eso solo fue por guardar las apariencias, ya que el peli-rojo había llegado a ganarse su cariño.- no pudo revivir por ser un robot, eso es injusto.- murmuró por lo bajo, cerrando su puño con impotencia. - una cosa más, ¿Has visto a mi hermana?, ¿Tienes información sobre número 18?.

- ¿¡18!?.- Preguntó ligeramente exaltado.- Ella se fue muy enojada después de escucharme... ella se fue, salió volando en esa dirección, no sé más.

- Maldición. - musitó con ganas de golpearlo, recordando el favor que le había pedido, creyendo que ese enano podía hacer algo de buena manera, aunque ahora se había decepcionado, él no servía para nada y nuevamente tenía que adjudicarse la tarea de encontrarla y (sobre todo) protegerla.

Fin del flashback.~

- ¿17, todo bien?.- escuché finalmente la voz de mi hermana, desesperada por obtener una respuesta y lograr tener mi atención de nuevo, ni siquiera pude notar cuando me perdí en mis recuerdos.- 17, responde por favor.

- Lo siento, 18, número 16 está muerto, Cell lo mató, eso es lo único que sé. - le dije de forma neutra, aunque mi corazón se estrujo al ver sus orbes entristecerse.

- No... eso no puede ser. - susurró con ese tono de voz triste, haciendo que me acercara a ella y le diera un abrazo, pues él también era parte de nuestra "familia".- 17, eso es horrible.

- Lo sé, linda, lo sé, pero ahora él está en algún lugar mejor, descuida.- agregué yo con intención de calmarla, y parece que funcionó.

- Tienes razón.- me dijo desviando la mirada.- gracias amor, jajaja.

- ¿Mi amor?.- pregunté separandola muy rápido con mis manos sobre sus hombros, creo que mi sonrojo fue evidente, ya que la observé reír fuertemente al volver sus ojos a mi, como me ponen nervioso estás bromas suyas.

- Claro, es que tú me llamaste "linda".- me dijo sonriendo de lado a lado para después pasar una de sus manos a mi cintura.

- 18, ¿Qué estás haciendo?.- susurré, pues mi voz se escondía tras la vergüenza que estaba pasando, sin saber como actuar ante tal situación.

N:
El ambiente se iba tensando más, pero eso debía esperar, ya que un extraño ruido que venía de los árboles llamó la atención de ambos androides, haciendo que se separaran y colocaran en guardia.

17 se colocó por delante y decidió acercarse con cautela esperando ver que era aquello, más al retirar una rama del camino, un enorme águila salió disparada en su dirección, asustando a 18.

Ella gritó por tan repentino acto, pero después se reincorporó y afiló su mirada en el enloquecido animal.- Es una estúpida águila. - le dijo con su clásico tono sombrío mientras levantaba su palma derecha y la ponía en la mira.- me encargaré de ella.

Pero antes de que pudiera actuar, número 17 se abalanzó sobre ella, tomando su muñeca velozmente y desviandola de su victima.

- Espera. - le dijo firme.- no puedes hacer eso, debí de haberte explicado, soy el guardabosques de este lugar, si le haces daño a algo tendrás que abandonar la zona de inmediato.

Sus orbes se encontraban desafiantes, aunque al final los de ella cedieron y solo se cruzó de brazos dándole la victoria.

- De acuerdo, haz algo entonces.

N:
17 intentó de todo por calmar al animal, pero la meta en uno de sus intentos, este rasgo la pierna de 18, derribandola y haciéndola enojar; después la respuesta fue clara para él, ya que decidió ocupar uno de sus calmantes y obligarla a descansar en su brazo.

- ¿Pequeña, estás bien?.- le preguntó acariciando su pequeña cabeza.

- Si, yo también estoy bien eh, gracias por preguntar.- reprochó la chica desde el suelo, viendo su pequeña cortadura sangrar.

- Lo siento.- sonrió por lo bajó alzando su antebrazo dispuesto a alejar al águila de ahí antes de que la paciencia de la rubia se fuera.- vete pequeña, y no vuelvas a causar problemas.- por fin sus ojos se centraban ahora en ella, mirando fijamente la herida, no era muy grande, pero la cantidad de sangre que emanaba de ahí le preocupaba un poco.- vivirás, tenlo por seguro.- se burló revelando una ligera sonrisa ladina.

- No creo poder caminar.- respondió ella con un ademán indicando el ligero drama que se avecinaba  a hacer.- creo que al menos merezco que me cargues.

- ¿Quieres que te cargue?.- preguntó cruzado de brazos.

- Si, por favor.- suplicó como pequeña niña, así que no se pudo negar y en un abrir y cerrar de ojos ya la llevaba en brazos listo para continuar con su recorrido.

Continuará....