Demasiado.

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NamJoon deja salir el aire de sus pulmones, se siente sofocado y tener a Jin delante de él esperando a que empiece a hablar no ayuda. Se había estado preparando demasiado para cuando el momento llegara pero ahora, con la fría mirada de Jin sobre él, solo siente que fue buena idea sentarse en la orilla del escritorio sino definitivamente estaría en el suelo debido al temblor de sus piernas. 

SooYu se encargó de informarle todo acerca de su encuentro con Jin después de que huyera de él y, por alguna razón, una culpa aplastante se abrió paso en su pecho, incluso aunque llevara años sintiéndose de esa manera, esta vez lo siente más real, pesado y doloroso. Sabe que ya no hay nada que pueda hacer al respecto, lo puede ver en los ojos de Jin y la manera en la que le mira. Tan vacío pero a la vez lleno de tristeza y resentimiento. Y lo entiende. Y lo acepta.    

Después de tantos años no le queda más que aceptar lo que Jin esté dispuesto a darle y si eso es un rotundo no, entonces está dispuesto a aceptar el rechazo aunque le rompa el corazón y le vacié el alma por completo. Si su premonición es acertada no puede ver más que un final lleno de sufrimiento no solo para él y eso es lo que más le aterra. No quiere que Jin sufra otra vez por su culpa.

—Yo...—empieza NamJoon pero siente que la garganta se le cierra, impidiéndole seguir hablando, aun así se obliga a continuar—. Sabes que no soy bueno con las palabras así que desde ahora te ofrezco la primera disculpa por lo estúpido que voy a sonar seguramente.

Jin simplemente aprieta sus labios transformándolos en una línea fina que acompaña su expresión seria. Por primera vez siente que no quiere dejarse doblegar por sus estúpidos sentimientos hacia Nam y ser irracional.

—Lo siento —dice NamJoon simplemente pero con tanto sentimiento envolviendo sus palabras que Jin siente que le acaban de dar un golpe en el corazón—. Lo siento por haberme empezado a sentir atraído hacia ti desde los catorce años e ignorar mis sentimientos por miedo a perder nuestra amistad, lo siento por haber tomado la decisión de empezar algo falso con SooYu de manera tan egoísta, lo siento por no haberte dicho antes que al resto que iba a casarme, lo siento por haberme casado incluso sabiendo que tú estabas llorando en una habitación por mi culpa, lo siento por no ser sincero al decirte mis razones lastimándote más, lo siento por hacer que mi estupidez y egoísmo te apartaran de mi volviendo todo demasiado insoportable para ambos, lo siento por esforzarme demasiado en hacerte pensar que estaba enamorado de mi mejor amiga, lo siento por no poder decirte que siempre he estado enamorado de ti y lo siento por no terminar con todo esto antes. Nadie más que yo ha tenido la culpa de que ahora te encuentres de esta manera y lo siento tanto, Jin. Lo lamento demasiado.

NamJoon se lleva una mano al rostro tratando de impedir que una lágrima se deslice por su mejilla haciéndole lucir peor de lo que ya se ve. Jin está de pie en el mismo lugar y lo único que NamJoon puede pensar es que si la tristeza tuviera rostro definitivamente luciría como el de Jin en ese instante y eso le hace sentir terriblemente mal porque es su culpa.

—Sé que estás cansado de todo esto, y hasta cierto punto te comprendo, y también sé que mis palabras a estas alturas no pueden cambiar nada pero por favor ¿podrías perdonarme?

Jin levanta la vista del suelo, apenas se ha dado cuenta que sus lágrimas están mojando la alfombra bajo sus pies, traga duro tratando de quitar esa sensación de resequedad de su garganta y separa sus labios casi de manera dolorosa pero cuando trata de hablar, cuando trata de dar una respuesta o al menos decir algo, lo único que sale es un sollozo que atraviesa el silencio de la habitación.

Y lo odia. Odia volverse tan frágil, tan débil, tan endeble. Se siente como un verdadero tonto. Un tonto débil que siempre termina sufriendo a causa de los demás y está cansado de eso, está cansado de todo. Está cansado de ese amor y resentimiento hacia NamJoon porque nunca supo qué hacer con su amor al no sentirse correspondido, y el resentimiento fue el resultado de ese rechazo que realmente nunca llego. Y, por primera vez, realmente siente que ya no quiere más nada de él ni de nadie.

Aprieta sus puños con fuerza y vuelve a levantar la vista, esta vez las lágrimas han dejado de salir de sus ojos y sus mejillas húmedas empiezan a secarse. Humedece sus labios que le saben a sal, trata de aclararse la garganta y aunque la siente áspera, completamente indispuesta, la obliga a funcionar y habla:

—Seria completamente injusto dejar que te culpes solo a ti mismo sobre todo esto —dice casi sorprendiéndose a sí mismo de lo firme que suena su voz, como si hace un momento no le hubiera resultado imposible hablar. —Yo también tengo la culpa por tenerme tan poco amor propio y no tratar de hacerme sufrir menos. Todo este tiempo simplemente trate de conformarme viéndote ser feliz con alguien que no era yo aunque lo deseaba con todas mis fuerzas. Fui un verdadero cobarde al dejar que mis sentimientos poco a poco dieran paso a un rencor hacia todos solo porque no era capaz de hacer algo por mí mismo. Como si estuviera esperando a que alguien más lo hiciera y claramente eso nunca iba a suceder. Si todo esto hubiera sido verdad, si tú te hubieras casado realmente por amor con SooYu y no estuvieran divorciándose, entonces ¿yo debería seguir de la misma manera? ¿Sufriendo por un amor no correspondido de una manera tan insana? Que estupidez. Yo no debí aprender a sobrellevar el dolor y sufrimiento casi asumiendo que me lo merecía. Nunca debí dejarme sufrir de esta manera ni por ti ni por nadie.

Jin camina acercándose hacia donde se encuentra NamJoon con pasos decididos, la luz le deja ver sus pestañas húmedas alrededor de sus ojos ligeramente enrojecidos, mirándole completamente derrotado, por primera vez, dejándose ver débil frente a él de una manera casi insoportable. Jin avanza y cuando está lo suficientemente cerca se inclina hacia el lado contrario del escritorio donde se encuentra NamJoon. Toma el bolígrafo que reposa sobre la madera y firma la hoja sobre la superficie con su típica caligrafía algo descuidada pero delicada. NamJoon a su lado solo baja la cabeza dejando salir un par de lágrimas más.

Jin ha tomado una decisión y ni siquiera NamJoon puede hacer que cambie de parecer por eso ha firmado su carta de renuncia sin titubear un solo momento.

—Tienes razón, a estas alturas tus palabras ya no pueden cambiar nada, pero ¿de qué me sirve tratar de quedarme con todo esto dentro de mi si de todas maneras ya lo sabes? —Pregunta Jin sonriendo ligeramente mientras da un par de pasos hacia Nam—. Me gustas, siempre me gustaste. Tenía muchas ganas de decírtelo pero creo que los dos somos unos cobardes.

Y NamJoon lo abraza, lo hace con tanta firmeza y delicadeza al mismo tiempo que Jin siente que podría fundirse entre sus brazos. —También me gustas, me gustas demasiado.

—No debes sentirte culpable nunca más NamJoon, acepto tus disculpas —dice Jin en un susurro. —Lo único que me pregunto ahora es ¿podemos siquiera terminar con algo que nunca comenzó?

—Lo dudo —dice NamJoon aunque en realidad así se siente. Como si estuvieran terminando con algo que nunca comenzó. Y NamJoon sabe que la respuesta a la pregunta que no ha hecho es un rotundo no pero algo dentro de él se siente en calma porque Jin no parece dispuesto a sufrir por eso.

Y eso significa que él estará bien. Y eso significaque todo está bien.    




En caso de que se me haya ido algún error tratare de corregirlo pronto.

250618 | YoyisEJ ♥

Motel | NamJinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora