Es muy difícil trabajar y estudiar al mismo tiempo, ya no tengo a mi madre y esta casa es muy grande para mi sola, he pensado en venderla y comprar un apartamento pero para eso necesito un fin de semana en el que este descansando de trabajar y así poder mudarme, será mucho mejor para mí.
Taehyung me ha estado llevando y trayendo de la escuela, ha sido muy beneficioso ya que me ahorra dinero y además dice que está cuidándome de Jungkook y sus amigos, no he cansado de agradecerle.
-Paso por ti a la salida-
-Lo sé- ruedo los ojos y le entrego el casco.
Me despido y camino hacia mi salón, el ambiente en la escuela se ha vuelto más denso, es igual que antes con la diferencia de que ya no sufro críticas, ni bromas, ni golpes, justamente cuando estoy pensando en eso pasan Jin y Jungkook a mi lado, miro la nariz partida que tiene Jungkook, a pesar que ya se la he visto días anteriores aun me sigue causando risa por la mirada de miedo que me lanza.
Entro al salón y tomo mi asiento de costumbre, hoy nos han informado la entrega de boletines es el lunes y lo primero que se me viene a la mente es mi madre, debido a su trabajo nunca buscaba mis resultados, siempre era Annie, la vecina.
-______, ¿Puedes quedarte un momento?- me llama la seño.
Asiento y espero a que todos salgan.
-Dígame-
-Se lo que le sucedió a tu madre, como lo siento-
-Gracias-
-Si quieres puedo darte el informe ahora-
Abro los ojos -¿Enserio?-
-Si claro-
-Me ayudaría muchísimo, gracias-
Saca un papel de su portafolios.
-A pesar que faltaste a las pruebas finales, tus notas fueron excelentes, te felicito-
Tomo el papel –Se lo agradezco- hago una reverencia.
-Que tengas un buen día-
-Usted también-
Tomo mi bolso y salgo del salón, respiro hondo y miro mis notas, ¡He aprobado en todas! Y he ocupado el primer puesto, cuanta falta me hace mi madre, estoy segura que correría ahora mismo hacia donde ella a mostrárselo y ver su cara de alegría, jamás había estado tan emocionada por obtener buenas notas, a lo largo de los años siempre he tenido las mejores y nunca le di tanta importancia como ahora.
Camino con rapidez hacia la salida y allí noto la cabellera rubia de Taehyung y corro hacia él, el nota mi presencia a lo lejos y me recibe con los brazos abiertos, me he abalanzado hacia el pero él no se ha movido ni un centímetro, lo abraso fuerte rodeando su cuello con mis brazos, estoy feliz.
-¿Tanto me extrañaste?-
Me rio y me separo de él.
-Me han entregado las notas- le muestro el papel.
Lo mira por un segundo.
-¡El primer lugar!- exclama.
Me abraza y me levanta dándome vueltas en el mismo lugar, me aferro a el mientras rio de emoción.
-Esto hay que celebrarlo-
-Oh, hoy no puedo- me mira –Recuerda que tengo que trabajar-
-¿Y qué? Paso por ti cuando salgas-
-¿A dónde me llevaras?- me regresa el papel.
-Mmm, a una discoteca-
Me rio –Soy menor de edad y lo sabes-
-Si- se acerca –Pero cumplirás dieciocho el otro mes-
-Bien dicho el otro mes, no este- guardo el papel en mi bolso.
-¡Assh! Te metemos por la puerta trasera y listo-
-Si claro- digo con sarcasmo.
-Lo vez,¡ pan comido!-
-No reconoces el sarcasmo ¿verdad?-
-A la discoteca y no de hable más- sube a la moto- además…- mira a todos lados y pide que me acerque –Te voy a corromper…- susurra.
-Aish- Golpeo su hombro –Ya quisieras tu-
-Un poquito de alcohol no se hace daño a nadie-
-A mí- me quejo subiendo a la moto y sujetándome de el –No se hable más-
-A la discoteca y punto- se ríe.
-¡Tae!-
-¿Qué?-
Ese día llegamos a la conclusión de ir mejor al cine en vez de una discoteca, luego de horas y horas de insistencia mientras hacia mi trabajo quedo ver una película que está en estreno.
*-*-*-*-*-*-*-*-*
Nada, nada, nada, ¡Nada!.
Como es que no encuentre algo decente para ponerme, hoy tengo mi cita con el abogado y debo estar en una hora en su oficina para leer el testamento de mi madre y toda mi ropa es una colección de jeans negros y gastados, blusas y buzos negros o blancos, chaquetas y tennis cómodos.
Según Google, debo usar combinaciones de colores pasteles que están de moda pero no sé nada sobre eso, no tengo otra salida. Camino hacia la habitación de mi madre que no he tocado desde la última vez que entre por algo de ropa para llevársela al hospital.
Busco algo de mi talla y encuentro un vestido azul holgado, lo tomo y voy a medírmelo.
Tengo tan mala suerte que no me quedo, decido seguir buscando y encuentro una muda de ropa viejísima que recuerdo que se colocó hace años cuando estaba delgada, es un short negro y una blusa de blanca de encajes sin manga, voy a probármelo y me queda perfecto.
Voy a terminar de arreglarme y media hora después tocan el timbre, tomo mi bolso y voy abrir.
-Ese short está muy corto- lo mira.
-No encontré más- salgo y aseguro la puerta.
-¿Tienes la dirección?-
-En mi celular-
Namjoon nos ha hecho el favor de llevarnos, el viaje duro menos de diez minutos. Taehyung me acompaña y subimos al ascensor justo en el piso donde me incido y justo en la oficina donde dijo que estaría.
-Señorita______ la estaba esperando-
-Sr.Callahan- estrecho su mano.
-Siéntense por favor-
Así lo hago y Taehyung se sienta a mi lado.
-¿Y este joven?-
-Es…-
-Soy su mejor amigo, la estoy acompañando- se adelanta Taehyung.
-Está bien- sonríe sin mostrar los dientes -Tu madre y yo fuimos grandes amigos, como puedes ver me confió esto a mí- saca un sobre de su escritorio. –Si me permites, lo leeré-
-Seguro- Taehyung toma mi mano y me sonríe, hago lo mismo.
-Esta es mi última voluntad, si cuento con suerte, mi hija no estuviera leyendo esto si no en cambio estaríamos juntas reviviendo todos los años en que no pudimos estar juntas, lamento no haber podido estar contigo siempre que me necesitaste, Siempre creí que eras un error y te culpe por mis fracasos pero siempre fuiste una bendición para mí, solo que no me di cuenta a tiempo, quiero que tengas una vida plena y feliz, que cumplas tus sueños y no te quedes encerrada sufriendo y llorando por mí, por eso te dejo todo lo que tengo incluyendo todo el dinero que he ahorrado toda mi vida, si no estoy mal son más de un billón de dólares, la verdad perdí la cuenta, mi abogado se encargara que toda esta cantidad sea depositada en tu cuenta de banco cuando cumplas la mayoría de edad y lo uses siempre que lo necesites, sé que lo usaras mejor que yo, con todo mi amor, mama-
-¿Mi madre me dejo todo a mí?-
-Eres su única familia, si no estoy mal y según mis cálculos, si no malgastas el dinero si no que en cambio lo sepas usar te puede durar para media vida o incluso más-
Estoy paralizada, sé que mi madre ha tenido y ha ahorrado dinero desde antes que yo naciera siempre tenía algo guardado pero lo que no sabía que tuviera toda esta cantidad.
-¿______?- vuelvo en sí.
-Dígame-
-Sé que cumplirás los dieciocho el otro mes, por lo tanto si necesitas dinero llámame o ven a verme, te daré lo que quieras-
Sonrió –Se lo agradezco-
-Tienes mi número, llámame-
-Lo hare- me levanto y Taehyung me sigue –Que tenga un buen día-
-Tú también-
Salimos de la oficina y tengo que apoyarme en la pared, todavía no me lo creo, sonrió porque a pesar de todo y quiero creer que mi madre siempre se preocupó por mí.
-Woww, eso cambiara las cosas-
-Lo cambiara todo- sonrió.
