Capítulo 44

133K 5.3K 2K
                                    

- No -murmuré, era la quinta vez que me tenía que despertar en la noche porque Alice no dejaba de llorar.

Antes de que Harry se despertara apagué la cosa que sonaba y caminé hasta la habitación de mi bebé. Lloraba como sí hoy fuera el último día que pudiera hacerlo y lágrimas caían de sus mejillas.

- ¡A ver, a ver! -la tomé en brazos y le acaricié la espalda- ¿Qué es lo que pasa, princesa? -hoy era la quinta noche que pasábamos en casa y Alice no parecía cómoda- ¿Tienes hambre? -comenzó a llorar aún más, iba a despertar a los gemelos y eso no estaría bien- ¡Oh, ya entiendo! Tienes un problemita allí abajo -parecía imbécil hablando con ella pero era entretenido hacerlo- veamos pequeña -susurré- Alguien está enferma del estómago -besé sus mejillas y terminé de sacar su pequeño pijama para poder cambiar el pañal. Cuando lo saqué, Alice dejo de llorar y metió sus deditos a su boca- Woah Ali, que asco -me di vuelta para poder pasar el olor que había invadido la habitación- mierda, estás muy fuerte -traté de no respirar y boté su pañal lo más rápido que pude, la limpié y luego volví a poner uno nuevo, puse su pijama y la tomé en brazos, eran las 7am y no estaba dispuesta a volver a levantarme, nuestra cama era bastante grande como para dormir con Alice- Amor -susurré moviendo a Harry- Harry mueve tu trasero y deja que Ali duerma con nosotros hoy.

- ¿Ah?

- Córrete -Harry se movió casi inconsciente y sonreí agradecida- Es hora de dormir, princesa, y papá no estará feliz con que su pequeña maní lo despierte así que sólo duerme ¿Vale? -la pequeña se aferró a mis brazos y se durmió.

- ¡Joder! ¿Cómo mierda llegó aquí? -gritó Harry. ¡No! Abrí mis ojos y ganas de matar a Harry no me faltaron cuando vi a la pequeña hacer pucheros.

- Cállate -gruñí. Alice comenzó a llorar y Harry me miró arrepentido. Toqué mi cabeza tratando de darme fuerzas y luego tomé a la pequeña y la acomodé en mi pecho para que pudiera tranquilizarse.

- Es que no avisas que dormirá con nosotros -Harry se acercó a mi y besó mis labios, sin ánimos de responderle sólo acomodé a Ali para qué pudiera alimentarse- amor, lo siento es que la vi aquí y me asusté -susurró Harry acariciando el brazo de la pequeña.

- Está bien -sonreí. Alice gruñó y volví a guardar mi pecho.

Que gruñona era mi pequeña.

- Amor, ¿No quieres que tu madre venga por unos días? Digo, lo haces excelente pero con los gemelos tenías la ayuda de ella y...

- No, estoy bien -sonreí.

- ¿Y mi mamá? También puede venir ella.

- Que no -dejé a la pequeña en la cama y me puse al lado de ella para poder abrazarla. Harry suspiró y trató de abrazarnos dejando a la pequeña en medio de nosotros.

- Te amo, no lo olvides ¿Vale?

- Yo también te amo -besé sus labios y cuando estaba dispuesta para dormir los gemelos se subieron en la cama y comenzaron a saltar. Alice hizo una mueca pero no lloró y la abracé aún más fuerte por no hacerlo.

Esto no era tan fácil.

HARRY.

Amaba a mi pequeña pero su llanto en las noches era algo que odiaba, ______ se volvía irritante por el día cuando Ali la despertaba más de tres veces. La cosa comenzó a sonar indicándonos que la pequeña estaba llorando y antes de que _____ se despertara la apagué y me levanté.

Papá y su princesa iban a tener una seria conversación hoy.

Pero yo tenía tanto sueño...

-Ali -no tenía idea que hacer pero la tomé en brazos- ¿Qué pasa, princesa? -comenzó a suspirar y a buscar mi pecho- no, no encontrarás nada allí -hizo un puchero y acomodó su cabeza en mi pecho sin dejar de llorar despacio- Mamá está muy cansada ¿Sabes? Y tú no la ayudas en nada -la regañé dando suaves golpes en su espalda- ¿Por qué te despiertas tantas veces? Tu habitación es linda y tu cama cómoda -Ali levantó su pequeña cabecita y metió un dedo en mi boca- ¡No, no! -la regañé otra vez- no puedes poner el dedo en la boca de todos -volvió a poner su rostro en mi cuello, su mejilla pegada a mi pecho- Vamos... Tienes que dormir -susurré moviéndome delicadamente para que le diera sueño.

Papá por accidente (h.s)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora