Rebel ; 채수.

09

JiSoo paso el paño húmedo nuevamente por la frente de Rosé, antes de quitársela y meterla en el cuenco de agua fría entre sus manos.

La noche era fría, había tapado con mantas de más hasta la barbilla a Rose mientras sentada a un lado procuraba cambiar el paño cada 5 minutos, o cuando lo creía necesario.

Rosé tenia una repentina fiebre alta, su pulso estaba a mil, y su cuerpo ardía. Aun así, JiSoo no podía dejarla a disposición del clima frío destapandola, no correría ese riesgo.

Caminó con un poco de dificultad hasta el baño, cerró la puerta luego de entrar y se miro al espejo.

-Oh... -miró sus pupilas, estas estaban muy dilatadas, cubriendose casi por completo de negro. Tenia el cabello revuelto, los labios rojos por habérselos mordido por tanto tiempo y una mueca en sus labios.

Su libido era muy alto, podía sentir un líquido caer, casi escasamente, por sus piernas.

Sentía la garganta seca, salio del baño y fue en busca de un vaso a la cocina y se sirvió un poco de agua del refrigerador. Gracias a su oido escuchó a la omega balbucear. De vez en cuando la oía decir frases incoherentes, y aunque trataba de entender y prestar atención a cada palabra, no lograba descifrar lo que decía la menor.

Aunque esta vez en ves de solo balbucear, comenzó a hablar normalmente.

-Papá, no me abandones por favor.

Se acercó a ella dejando el vaso de agua sobre la mesa de la cocina.

-Papá... Papá... ¡Papá reacciona por favor! ¡Papá! ¡Hermana ayudame! ¡Alice! -comenzo a gritar desesperada.

JiSoo se alerto, se lanzó sobre ella y sacudiendo un poco a la omega comenzó a llamarla, tratando de despertarla.

-Rosé... ¡ROSÉ!

La rubia reaccionó aturdida. Su pecho subía y bajaba por su rápida respiración. Soltaba jadeos, luchando por abrir sus ojos.

-¿Pro-profesora Kim? -la llamó confundida, su mirada estaba borrosa, no lograba ver bien. Carraspeo, sintiendo su boca seca, pero más sentía un peso sobre ella, Kim estaba encima suyo, abrazándola con fuerza, casi asfixiándola. -Lo siento... ¿Puede... Quit-tarse de encima? -

JiSoo reaccionó corriéndose a un lado, sin apartarse del todo, solo lo suficiente.

-¿Qué paso? -pregunto con dificultad la menor.

JiSoo tocó su frente, agarró el paño húmedo y la obligó a permanecer quieta.

-Aun tienes fiebre, permanece acostada un tiempo más -dijo poniendo el paño sobre su frente.

-¿Es-esta bien usted? -Rosé estaba al tanto de que el celo de la alfa no se había dispersado del todo, aun podía sentirlo, embriagandola aun en su condición.

JiSoo asintió -Estoy bien, ahora lo importante eres tú, tienes fiebre muy alta -

Rosé no contestó, aun sentia su respiración entrecortada, le costaba respirar, pero tampoco quito sus ojos de encima de la alfa, obsevandola fijamente mientras esta agarraba el cuenco junto a unos cuantos paños de más entre sus manos e iba hacia la cocina a cambiar el agua

...

-¿Estas mejor? -Rosé asintió, tomando tranquilamente el chocolate caliente que le pidió a la mayor.

El aire era tenso, más por el hecho de que Rosé era una omega sin reclamar y JiSoo una alfa en su celo.

Aun así, ambas disimulaban su incomodidad y molestia tomando sus respectivos desayunos a las 5 de la mañana, hora en que la fiebre de Rosé bajo, para alivio de JiSoo.