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Rose odiaba su suerte.

O eso creía, en parte si, en parte no. No creía tan malo que JiSoo apareciese sin sus estúpidas gafas y ropa formal. Ni tampoco que fuese menos sería de lo normal. Ni mucho menos que estuviera riéndose de vez en vez cuando Lalisa y JungKook comenzaban sus idioteces.

Oh, que mierda, no queria mentir pero tampoco admitir que no le desagradaba para nada que Kim estuviese ahí.

- Rose, ¿Tu papá hasta que hora te dio permiso de estar fuera de casita? - preguntó Lisa burlona, señalando su muñeca.

- Hasta que dices algo coherente Li, mereces un aplauso - Rose viro los ojos y revisó su celular - aun me queda media hora, lo aprovecharé para aplanarte el culo a patadas, ¿Quieres proceder a entregar las nalgas o qué?

- Sh, amor y paz chicas, estamos en presencia de una profesora - exclamó JungKook, adelantándose a que Lalisa respondiera.

Ji Soo negó restandole importancia. Miro de reojo a la rubia mayor de el trio y mordiendose el labio inferior dudosa preguntó:

- ¿Quieres que te acompañe, Park?

Oh, definitivamente Rose odiaba su suerte en estos momentos. Quitando el hecho de que JungKook casi imita la acción de una lechuza, girando la cabeza lentamente hasta mirarle con sus ojos abiertos y expectantes, casi gritándole en la cara que le diga que si. Y que Lisa se haya atorado con quién-sabe-qué sin parar de toser como una idiota por los próximos 20, ambos yéndose con la excusa de ir al hospital. Si, Rose odiaba su suerte.

Pero más odiaba que esos dos se pusieran de acuerdo a sus espaldas era una falta muy grave, una terrible traición, una aberración de la humanidad, lo peor que podría haberle sucedido. Si, debia matarlos cuanto antes. Debia ser cuidadosa, idear el plan perfecto cuanto antes. Oh, como disfrutaría hacerles sufrir.

- Park, ¿doblamos aquí? - Rose parpadeo, confundida.

- Ah, si - respondió sin apenas entender. Pronto se dio cuenta, ya que no estaba metida en sus pensamientos, podía darse cuenta de lo incómodo que era el silencio junto a Kim. No solo porque no existía palabra que pudiese omitir a solas junto a la alfa, ya que en si no se le ocurría ninguna, sino porque la duda y los nervios volvían un manojo de emociones su interior.

Siguieron caminando, una viendo a su alrededor; alerta a los sonidos y aromas, y otra totalmente inmersa ideando una conversación con posibles respuestas.

- ¿Debemos seguir derecho o doblamos otra vez? - volvió a preguntar la alfa, Rose miro alarmada a su alrededor y negó.

- Este... no es el camino - murmuró molesta consigo misma por no saber controlar sus idas a marte. - Espera, le preguntaré a alguien para identificar donde estamos - le avisó, Kim JiSoo asintió y espero sin quitarle la vista de encima.

Siendo un lugar que no conocía y que la omega todavia no habia podido ubicar debia tener sus sentidos listos para cualquier cosa que pudiese suceder.

- Listo, solo sigamos derecho por esta ruta y ya al doblar estaremos a una manzana de llegar - comentó Rose apurada despues de agradecerle a un grupo de niños que volvían de jugar a la pelota. JiSoo asintió ante lo dicho por Rose y el silencio volvió.

- ¿Pudiste con tus tareas? - preguntó Kim llamando la atención de la menor, que se dedicó a mirar todo menos a su acompañante.

- Si, o al menos con la mayoría.

- Entonces estas bien. - Rose asintió - En clases andas muy tranquila, es raro no tener que enviarte con mi padre porque te duermes o molestas a los demás junto a Manoban y Jeon.

- Ah, el viejo Kim, juju - río maliciosa - ¿Tu nuevo papi te cae bien?

- Mmm, ¿Hablas de Seiji? - preguntó recordando a la pareja de su padre - él es agradable, aunque es bastante joven a comparación de mi padre...

- El viejo tiene esos gustos, eh. A mi me sorprendió el cacharlos en su aventurita en dirección, par de lujuriosos - Ji Soo le miró interrogante, Rose solo siguió riendo haciendo gestos con su mano quitándole importancia. - A que el viejo no te lo dijo; una vez lo descubrí a medio coito, no habían cerrado correctamente la puerta, fue una de esas veces en que traté de escabullirme de tus clases, traté de sobornarlo - admitió como si nada.

Rose sentía el aire ser menos pesado, se sintió libre de comentarle pequeños sucesos que ocurrieron a partir de ese día, desde cuando el viejo Kim le habia obligado a escribir una carta de disculpas y compensación al conserje por utilizar sin permiso los utensilios de limpieza (con los cuales arruinó los cambios de ropa del equipo de fútbol masculino) hasta hacerle leer y memorizar las leyes nacionales sobre comportamiento cambia formas.

Hablo y hablo casi sin darse cuenta de la sonrisa tranquila y la mirada suave que le dirigía Ji Soo, quien le reprochaba algunos comportamientos y reía de otros.

- Park - llamó sin quitar la vista del frente, atenta a su alrededor. Rosé volteó estando a unos pasos más adelante de ella, esperando a lo que le fuese a decir - Creo que deberíamos... hablar sobre ciertos temas - Rose la miro confundida, Kim se mordió los labios inquieta, sin dirigirle la mirada siguió hablando - Ambas lo sabemos, nuestros aromas nos atraen y nos... sentimos de cierta forma cuando estamos juntas, creo que deberíamos hablar sobre eso.

Rose suspiró y detectando a lo lejos las paredes características de su casa se detuvo. Bajo automáticamente los ojos a sus pies ante la mirada de la alfa y espero segundos antes de responder. - Creo que es un poco pronto para hablar de eso, ¿No crees? - Ji Soo la imitó, deteniendo su paso y parandose de frente a ella - yo... quiero decir que no estoy preparada para que formalicemos. Si, somos alfa y omega, nos reconocemos mutuamente como pareja, pero no, yo... no estoy lista. No quiero esto, no aún.

Ji Soo mordió sus labios una vez más  - ¿Y si... solo lo intentamos?

- No, lo sien- Ji Soo le interrumpió, negando de golpe, moviendo de un lado a otro las manos.

- Nono, creo que me adelanté, disculpame, estoy presionando las cosas que deberían ser a su tiempo. Mira, entiendo que no te sientas lista pero al menos dejame saber si me darías una... oportunidad, solo eso. - se acercó y levanto su rostro llevando su mano a su mentón. Rose se dejó hacer por unos segundos, los cuales Kim aprovechó deslizando suavemente su mano por su mejilla.

Y asintió.

Ji Soo sonrió. - Bien.




















Oookei gente, ¿como andan?

Siendo sincera estos capítulos los tenia escritos así nomas, y como soy una irresponsable con las promesas que hago acá, los publicaré antes de volver a tener problemas para aparecerme por aquí, ksfjsk.

¿No me odien, si? MUCHÍSIMAS GRACIAS a las que a pesar de que sea en partes relleno aburrido y apurado sigan leyendo esta historia junto a las demás.

¡Besos a todas, saludos!

Rebel ; 채수.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora