Maria
Me desperte sobresaltada y envuelta en sudor. Al abrir los ojos me di cuenta de donde me encontraba, en mi propia casa. Levante mi mano derecha y la movi de un lado a otro, y lo mismo con mi pierna izquierda. Podia moverme perfectamente, y mi cuerpo respondia a mis ordenes. Entonces... ¿Habia sido todo un mal sueño? ¿Una pesadilla? Pero... ¿hasta donde llego la pesadilla? Ya no se distinguir lo que paso realmente de lo que soñe. Quizas deberia llamar a Abdiel y preguntarle por lo ocurrido.
Me levante de la cama algo mareada y baje las escaleras con cuidado. Al llegar al salon escuche a mi madre hablar con alguien.
-Esta hija mia... menos mal que estabas cerca -Dijo mi madre-
-Bueno, no es nada, de verdad -Contesto alguien, por la voz diria que Abdiel-
-Muchisimas gracias, Abdiel -¡Acerte!- De verdad que no se que haria mi hija sin ti -Bueno creo que sera mejor que entre ya, antes de que mi madre diga algo que Abdiel no quiera oir-
-Buenos dias... -Dije finjiendo que no habia visto a Abdiel- Hola -Sonrei y me acerque a darle un abrazo a Abdiel-
Al oir la tos finjida de mi madre rei y me acerque a su lado depositando un sonoro beso en su mejilla. A lo que esta se quedo con los ojos abiertos de par en par, supongo que sorprendida por mi anterior accion.
-Bueno me voy a duchar -Me despedi de ambos- Luego nos vemos Abdiel
Y con eso volvi a subir escaleras arriba hasta mi habitacion. Alli, cogi del armario unos pantalones cortos de mezclilla, una camiseta de color azul oscuro con un dibujo de un precioso lobo blanco y mis vans negras.
Por ultimo me meti al baño. Llene la bañera hasta arriba y me sumergi dentro. Hacia tanto tiempo que no hacia esto...
Me encabone el cuerpo, de forma algo torpe -Es dificil hacerlo cuando estas sentada en la bañera y rodeada hasta el cuello de agua, pero es que el levantarme no me llamaba mucho...- y cuando termine de asearme sali del baño envuelta en una toalla. Como no, de nuevo me habia dejado la ropa en mi cuarto, tendida sonbre la cama.
Me vesti rapido, me hize una coleta alta y me maquille -poco-
Poco despues sali a dar un paseo y de pronto le vi.
Tyler estaba sentado en uno de los bancos de su jardin delantero, esperando pacientemente a alguien o algo. Decidi quedarme alli a esperar tambien.
Diez minutos despues, una limusina negra aparecio frente a su casa. Un hombre, algo mayor salio de la parte delantera del coche y abrio la puerta de atras. Abri los ojos como platos al observar la persona que salia del coche.
Era una chica rubia, alta y delgada, con curvas, de piel blanca, ojos claros y adorables pequitas en las mejillas. Vestia con una camiseta algo -bastante- ajustada y unos shorts algo -bastante- cortos, unos zapatos con unos tacones de, por lo menos diez centimetros.
La nueva barbie del barrio -Mola el apodo eh...- corrio a... ¿abrazar a Tyler?
Este la abrazo al igual que ella y luego se metieron juntos a su casa. No pude ver la cara de Tyler pero estoy segura de que estaba sonriendo pervertidamente.
Puto.
Puto.
Puto.
Pero... ¿¡Por que me molesta tanto que el haya traido una chica a casa?! ¡El no me gusta asi que no deberia importarme! Porque... no me gusta... ¿no?
Madre mia... que perdida estas....
¡Hombre! ¡Por fin te dignas a aparecer!
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Caperucita Negra
RomanceErase una vez una niña de cabellos dorados y una hermosa capa roja. Ella vivia con su madre en un pequeño pueblo en el bosque, y un dia fue a llevarle comida a su anciana abuelita y... Bueno, adelantemos, mi nombre es María, aunque nadie me llama as...