Caperucita Negra

Lo siento

Maria

Abri los ojos lentamente, hoy tampoco queria levantarme de la cama, sinceramente no tenia ninguna gana.

Entonces sono el timbre, haciendo que apartase la almohada de mi rostro.

-Ya se iran... -Susurre volviendo a colocar la almohada en su sitio-

De nuevo vuelve a sonar el timbre.

-Alfinal se cansara y se marchara... -Susurre dandome la vuelta-

Con tal mala suerte de que al girarme cai de la cama.

-Puta cam... -Otra vez llaman al timbre- Me caguen su puta madre...

Me levante del suelo y comence a bajar las escaleras. Sono otra vez el puto timbre.

-¡Que ya voy, coño! -Grite mientras iba a la puerta-

-¿¡Se puede saber quien coño me despierta a las...?! -Cerre la boca al abrir la puerta y ver quien estaba tras esta- ¿Abdiel?

-Eh... ¿te he despertado? -Este me miro con los ojos abiertos de par en par mientras me examinaba de arriba a abajo. Pude ver como sus mejillas se tornaban de un color rosado-

Sin enteder a que venia su extraño comportamiento mire hacia abajo, examinando detenidamente mi ropa. Mi cara se puso roja de verguenza al descubrir a que se debia la cara de Abdiel. Olvide por completo que ayer, con el calor que hacia y mi horrible pereza decidi acostarme con tan solo la ropa interior.

-¡Mierda! -Mire a Abdiel furiosa, quien no apartaba la vista de mi desnudo cuerpo- ¿¡Y tu que miras pedazo de pervertido!? -Le pegue una fuerte cachetada en la mejilla izquierda-

-¡Auch! -Grito sobandose la mejilla-

-Enseguida me arrepenti, pues en su mejilla se habia quedado marcada la forma de mi mano- Esto... perdon... -Le mire apenada- ¡Esperame aqui! -Subi corriendo a mi habitacion y empece a buscar por toda la habitacion mi pijama-

-¡¡Aqui!! -Agarre el pijama, que estaba tirado debajo de la cama, y al sacarlo una tela de color blanco salio con el- ¿Que demonios...? -Susurre cogiendo aquella prenda-

Mis ojos se abrieron de par en par al ver que lo que habia debajo de la cama no era un trozo de tela viejo, o una camiseta dehace años que se habia caido por accidente alli, sino que era una camiseta de hombre, concretando mas de Tyler. ¡¡Seguro que la olvido aqui el dia que paso la noche en casa!! Pero... no recuerdo haberlo visto dormir sin camiseta... Oh... ya, si que lo recuerdo.

Y ahora... que hago con esta camiseta...

-¿Maria? ¿Te falta mucho? 

Tengo que darme prisa, Abdiel me espera. Sin saber por que me puse la camiseta de Tyler, que me llegaba por debajo de los muslos, quizas algo provocativa para salir delante de un chico que hace unos dias se declaro ante ti pero... ahora no es momento para esas bobadas.

-Ya estoy -Note como la mirada de Abdiel bajaba por mis piernas y luego subia hasta la gran camisa que llevaba puesta- ¿Ocurre algo? -Me sente a su lado ignorando su mirada de odio al ver la camiseta-

-¿Esa camiseta es de Tyler? -Pregunto de una forma bastante arisca-

-¿Que importa eso ahora? ¿A que as venido? -Su pregunta, y de la forma en que la hizo me mosqueo-

-Yo he preguntado primero, quiero saber la respuesta -Respondio serio-

-Si, es de Tyler, ¿que quieres? -Pude ver como su mandibula se tenso al igual que sus manos se hicieron puños-