Jun Myeon estaba feliz de haber vuelto a su ciudad natal, todo iba totalmente tranquilo y recorría los pasillos de aquella grande casa con una amplia sonrisa, nada podía ponerlo más feliz que haber logrado todo lo que hasta el momento había obtenido con esfuerzo. Lo que más le gustó fue el hecho de saber que no tenía que desvelarse como lo hacia en Londres.
Todo fue de la mejor manera la primera parte de aquel día, hasta que extrañamente sonó el timbre de aquella casa una hora antes de que el pedido de los muebles para las recamaras tuviera que estar en casa. Jun Myeon rápidamente se dirigió a la entrada sin saber que hacer al mirar aquella silueta tan conocida, que su cabeza nunca había dejado de pensar entre sueños y segundos después iba a cerrar la puerta, pero esta fue detenida por la persona al otro lado de la misma.
—¿No quieres verme? -Dijo el chico desde el otro de la puerta aún deteniendo esta-.
Pasaron un par de minutos y no se escucho ningún solo ruido del otro lado de la puerta, casi como si hubiera sido un fantasma silencioso el que atendió.
—¿No me extrañaste? -Comentó nuevamente el chico más alto adentrando su mano sintiendo ese suave cabello que siempre había tenido el ajeno-.
—No Sehun, vete. -Suho se dio rápidamente la vuelta quedando de frente con la puerta empujando la misma con todas sus fuerzas-.
—¡Espera Junnie mi dedo! -Gritó Sehun sintiendo un intenso dolor en el dedo índice de su mano derecha al estar ya cerrada la puerta-.
Suho abrió rápidamente la puerta y quitó la mano de Sehun de la puerta para cerrar esta rápidamente.
—¡Vete y no regreses no te quiero ya! -Gritó Jun Myeon desde el interior de aquella casa comenzado a llorar en silencio-.
Sehun no dijo nada después de haber escuchado aquellas palabras y gruñendo mientras sobaba su dedo se fue de aquel lugar; mientras que Jun Myeon al escuchar unos pasos alejarse poco a poco, miró por la ventana discretamente, y aun con los ojos llorosos logro mirar aquel chico aún más alto y mas lindo de lo que el lo recordaba, sintiendo un fuerte dolor en el pecho de esos que ya se habían vuelto seguidos desde que se había separado de aquel chico al que tanto quería.
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D.O no podía estar más feliz su mejor amigo había vuelto, y vivirían juntos de nuevo. Había superado con éxito la humillación que recibió frente aquel desconocido y su novio. Y aunque aun no sabía si seguiría con sus estudios, pero una de las cosas que más quería, la mejor parte de todo era que su amigo estaba ahí para el de nuevo y sabía que nunca lo dejaría solo.
La prueba de eso fue cuando se conocieron en la escuela secundaria en el último año y a pesar de no conocerse Jun Myeon le brindó su ayuda dejándolo vivir en el pequeño departamento que ambos compartían con la señora Kim. Al principio no se hablaban pero después el chico con labios en forma de corazón, no pudo aguantar más las ganas de contarle a alguien la situación que había en su casa en aquel momento. De esta misma forma la mamá de su mejor amigo también se convirtió en una segunda madre para Kyungsoo, la cual a pesar de no tener mucho dinero hacia todo lo posible para cuidar a sus dos pequeños.
La madre de su mejor amigo siempre fue demasiado dulce, nisiquiera se enojaba, a pesar de todas las que le hacían esos "niños". Kyungsoo la recuerda así, la dulce señora Kim, que se tomo también el gran honor de apodarle "Bebé Mojojojo", cosa que cada vez que la mencionaba, era cuando D.O lloraba porque extrañaba a su verdadera familia y era una de las pocas cosas que lo podían hacer reír en aquellos momentos de "depresión" y no solo lo hacían reír a él sino también a Jun Myeon que era casi su hermano más que su amigo. Asi que ¿Cómo no extrañar a ese idiota?
-Rió D.O mientras que al estar empacando todo miraba aquellas fotos-. Gracias por volver idiota. -Guardó la fotografía que la madre de Jun Myeon les había tomado a él y a su mejor amigo terminando de empacar definitivamente todo lo poco que tenía-.
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COMA
FanfictionTodo ocurre a partir de aquel día en el que aquel chico cayó en coma... Nada está escrito pero pronto habrá historias hechas libros...