Capitulo 13: Sin ella, no.

371 48 8
                                    

Sophie

Siento un empujón tan brusco que caigo con violencia de bruces contra el suelo.
Alex no para de gritar e insultarme. Sus manos agarran mi camiseta y tira con fuerza.
Noto como la tela hace presión con mi cuello cuando lo hace.
El me zarandea y me coloca enfrente de el , gotas de saliva y sudor caen por su rostro, haciendo que yo me asuste, se que esta perdiendo el control.

Podría jurar que no era así cuando empezamos, realmente no se cuando empezó a comportarse así, fue poco a poco, primero levantaba la voz, luego algún empujón, y así hasta llegar a este punto, donde no se aprecia una salida de escapatoria.
Se, que ha perdido la cordura, mas desde que sabe sobre el embarazo, y también se que me hará daño, si intento huir de el, como ya hice anteriormente.

El motivo de su enfado hoy, ha sido que sentí una arcada mientras me estaba hablando, el no entiende que su olor a alcohol me afecta, tengo el sentido del olfato mas desarrollado desde que se sobre mi estado, y aveces siento arcadas, y nauseas.
Pero cuando se descontrola, no hay nada que yo pueda hacer.

-Alex sueltame, me estas haciendo daño, y tengo que ir a hacer unas compras, estas borracho, y necesito que te alejes de mi unas horas.- dije con un tono de derrota.

-Eres una zorra, a saber si estas embarazada de mi. De la otra zorra no creo.- grita riendose.

-Solo me he acostado con ella, y lo volvería a hacer todas las veces del mundo, contigo solo me he acostado dos veces, y la segunda fue obligada. He aqui la prueba de nuestro amor- digo sarcástica mientras apunto hacia mi vientre.

Llega el siguiente bofeton. Siento el sabor tan familiar de la sangre en mi boca.
Cruzo los brazos sobre mi cara para intentar que no me haga mas daño, pero esta vez un imprevisto puñetazo golpea mis costillas. El dolor es tan intenso que hace que expulse todo el aire de mis pulmones.
Tengo la sensacion de que no podre llenarlos nunca mas, Pheobe era mi aire.
Mi cuerpo cae al suelo sin poder soportar mas golpes, siento como mis piernas se convierten en gelatina, al mismo tiempo que recibo mas patadas.
Pero ya no hay dolor, ya no siento sus golpes.

Escucho de fondo personas hablar, papeles rasgandose, plasticos, telas, líquidos.
Mi sentido auditivo me permite adivinar donde me encuentro.
Una suave pero firme voz llena mis oídos, me duele tanto el cuerpo y la cabeza, que instintivamente llevo mis manos adormecidas a mi cara.

-Sophie,estate tranquila. Puedes abrir los ojos?- es la voz femenina de antes.

-Si, me parece que si- comento con voz ronca, pero cuando voy a preguntar donde estamos exactamente, llega la pregunta que hiela mi sangre.

- Recuerdas que ha pasado?- vagos recuerdos divagan por mi mente, Alex dándome golpes por el suelo, y la imagen de mi pequeña Pheobe en mi mente.

-Estoy confusa, creo que me cai en el baño.- digo sin mirarle a los ojos.

-Tu pareja nos ha contado que caiste por las escaleras de tu portal, quedaste inconsciente y llamo a emergencias.- dice sin creerse sus propias palabras.

-Oiga, estoy embarazada, o al menos lo estaba hasta hace unas horas, podríamos ver si todo va bien?-susurro con un sabor amargo.

Los ojos de la enfermera se abren de sobremanera, permitiéndome saber que no tenia ni idea sobre mi estado, y que tampoco Alex se lo comento.
Me llevan a otra habitación, donde hay un monitor, y varios aparatos con los cuales supongo que me hara la ecografia.
Siento el frio liquido sobre mi vientre ligeramente hinchado, practicamente no se nota, es muy temprano.
Una sonrisa se forma en la cara de la enfermera que acaricia mi cara mientras pasa ese aparato sobre mi tripa.

-Aqui esta, efectivamente estas embarazada, y por lo que logro ver, todo va sobre ruedas, no hay ningun problema.- dice con felicidad.

La felicidad que me falta a mi, siento cariño al pensar que hay un pequeño invasor dentro de mi, pero que sea de Alex, solo pone mis pelos de punta, si este niño, o esta niña, nace y crece alado de su padre, vivirá en un constante infierno, viviremos con el demonio, y yo ahí no veo la felicidad.
Yo veo la felicidad con Pheobe, no importa que venga, pero todo con ella, con sus besos, con su risa de loca, con sus miedos incomprensibles, con sus locuras de psiquiátrico, con sus mordidas que dejan toda mi piel marcada, pero así no me da la gana. Sin ella, no.

-Hola cariño, todo bien con el bebe?- veo un Alex preocupado entrar por la puerta, y no doy crédito a lo que ven mis ojos.

-Supongo.- digo sin poder creer lo que esta pasando, como actúa impasible.

-Por favor, caballero, podría salir fuera? Debo hacerle unas pruebas mas a su novia, en cuanto acabe os podréis ir- le sonríe amablemente al monstruo que hay de pie en la puerta.

El al fin se va, y ahí cojo una bocanada de aire, sintiendo tranquilidad.
Su ausencia me da paz.

- Sophie, ya hemos acabado, todo esta bien, pero quería decirte algo- comenta, y puedo ver dolor en su mirada. -He visto mas casos asi, no soy idiota, aunque se me da muy bien hacérmelo. Si ese hombre te esta maltratando, no debes aguantarlo, dejalo, he visto tus golpes, no son de una caída, y podían haber matado a tu bebe. No diré nada, pero prometeme que vas a irte de ahi.- agarra mis manos fuertemente.

-Te prometo que me ire, estoy esperando que el amor de mi vida despierte de un coma, y todo habrá acabado, ella vendrá a por mi.- digo queriendo creermelo, y la enfermera me mira confusa.

Volví a casa con Alex, en el camino pude comprobar que si, es muy bipolar, extremadamente.
Esta para llevarlo a un manicomio y no soltarlo ni para comer.
Respecto al bebe que tengo dentro, el pequeño invasor, estoy aterrada, tengo tanto miedo, miedo de tenerlo, miedo de no tenerlo, de saber que no tendra una familia normal, que no tendra un padre que abrace a su madre mientras hacen la cena, que no podre contarle como su padre y yo decidimos tenerlo.
No podre porque el cabron de su padre, me violo. Y eso no es una historia para contar.

Flashback

-Te amo, te amo, te amo, amo amarte, amo nuestro amor, amo que me ames, ámame tanto como lo hago yo. Ámame sin medidas, ámame para siempre.- decía contra mi boca Pheobe.

- Pequeña patosa, yo te ame, cuando todavía no sabia lo que era el amor, te amo ahora que solo tengo claro lo que es , cuando es hacia ti, y te amare, porque sabré que ese amor, solo es amor cuando es por ti- la bese sin parar.

Fui hacia a casa, mi madre me esta esperando para hacer la cena juntas, fui pensando en que la regla me debiese haber bajado hace bastantes días, pero con Pheobe el tiempo se va volando, y no me di cuenta.
Aunque era improbable, no era imposible, recordaba con asco el dia que Alex quiso hacerlo, pero yo no tenia ganas, no usamos proteccion, y se los peligros.
Decidi entrar a una farmacia y comprar un test, no perdia nada, aunque eran caros, al menos resolveria dudas.

-Ahi tienes guapa, buena suerte- me decia la farmaceutica guiñandome un ojo.

Llegue a casa, saque el test del envoltorio, y con las manos temblorosas, lo metí bajo el chorrito de orina unos segundos.
No me atrevía a mirar, aunque algo me decía que yo no podía estar embarazada.

- Lo sabia, era casi imposible - dije sonriendo al test, dispuesta a tirarlo a la basura.

Pero justo cuando fui a soltarlo, vi aparecer una segunda ralla rosita, de un color muy tenue, vi aparecer un positivo.

-No me jodas- susurré.

Fin del flashback

Para otra vida ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora