ix. Visita

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Después de ese (incómodo) viaje en auto, los chicos llegaron a la casa. Blas decidió que era mejor despejarse un poco de todo así que le avisó a Junior que iría al supermercado a comprar un par de cosas que faltaban y de paso pensar en todo lo que había pasado desde que se levantó, empezando por el sueño que tuvo. 

Después de unas horas, volvió cargado de bolsas y se encontró a Junior con Luna, dándole una mamadera. Tenía muchas ganas de hablarle, de joder con él, de estar con él, pero sentía mucha vergüenza. Vergüenza por el planteo que le había hecho hace apenas unas horas atrás, y que no pudo evitar. La parte irracional de él fue más grande y no se pudo quedar callado, haciéndole esa escenita de novio celoso a alguien con quien seguramente nunca iba a tener una relación en su vida. 

"-¿Vas a estar mucho tiempo más evitándome?"-Escuchó la voz de su amigo mientras éste sentaba a su sobrina en la silla especial que tenían en la cocina.

"-No te estoy evitando"

"-De verdad no entiendo por qué te pusiste así por una boludes, Blas. No sabía que el chabón me iba a explicar las cosas a mí, ¿Que querés que haga?. Estas dándole vueltas a esto al pedo"

"-¿No entendés que ese no es el problema?"-El menor se quedó mirándolo, como esperando una explicación a ese comentario-"Junior, perdón. En serio, no me debería haber puesto así. ¿Me perdonas?"-Se fue acercando al menor, hasta que quedaron frente a frente.-"Dale, ¿Por favor?" 

Junior no podía dejar de mirarle los labios, era algo inconsciente

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Junior no podía dejar de mirarle los labios, era algo inconsciente. Blas se acercaba y sus ojos se iban inmediatamente hacia esa parte que hace tiempo deseaba probar. Y así se quedaron por unos segundos, admirándose en secreto, hasta que sintieron el timbre de la puerta, lo que hizo que ambos se despertaran del trance al que se habían sumergido.  

Blas fue el primero que se separó de ese mínimo momento de intimidad, aunque le costó bastante, y al abrir la puerta se encontró con una mujer, alta, morocha y bastante joven. Se quedó viéndola hasta que ella decidió hablar.

"-Hola, me llamo Giuliana Navarro, soy de servicios sociales. LLevo el caso de ustedes"

 "-Ah, no nos avisaron nada"

"-Si, ese es el punto, ¿Puedo pasar?"

"-Si, si, perdón. Eh, voy a buscar a Junior y volvemos, se puede sentar si quiere, allá está el sillón"-El rizado se había puesto extremadamente nervioso, no quería hacer nada mal ni decir algo que pudiera causar algún tipo de problema. Rápidamente encontró al menor, le explicó todo y dejaron a Luna en el corralito que tenían en el living. Se sentaron enfrente de la mujer, que los miraba expectante, saludó a Junior y comenzó a preguntar lo que normalmente hacía en este tipo de visitas. 

"-A ver, hablemos un poco, quiero que me cuenten los planes que tengan, de qué trabajan ahora"

"-Yo trabajo en el bar de Dante, el que era de él. Actualmente soy el bartender de ahí pero ahora estoy haciendo los papeles con Johnny, el abogado, para ver si puedo ser el dueño"-Giuliana anotó lo que Blas había contestado en una pequeña libreta que traía con ella y miró a Junior, esperando su respuesta.

"-Yo trabajo en la clínica de mi tío, soy una especie de asistente. Hago los papeles y ordeno todo ese tipo de cosas. También ayudo en el bar de vez en cuando, aunque ahora con todo lo que está pasando, ninguno de los dos puede pensar mucho en el trabajo" 

"-¿Y por qué Blas es el que quiere ser el dueño del bar y no vos que sos el hermano?"-Dejó de escribir y levantó la vista de la libreta.

"-Ya hablamos de eso, y creemos que él sabe mucho más que yo o que mi otro hermano, Romeo. Mi tío claramente no se va a hacer cargo de un bar, y tenemos más amigos pero todos opinan que Blas haría funcionar el bar tan bien como Dante"

"-Bueno, ahora, la otra pregunta. Hablé con su abogado, y me dijo que están los dos solteros. ¿No pasa nada actualmente?"-Esperó unos segundos antes de proseguir-"Entre ustedes" 

"-No, no"-Respondieron al unísono.

"-Eso es bastante bueno, porque más allá de la sexualidad de cada uno, una situación como esta, de dos solteros viviendo juntos criando a una bebé que acaba de perder a ambos padres es bastante complicada como para complicarla más, ¿Se entiende?"

"-Si, no se tiene que preocupar por eso, no vamos a complicar nada"-Acotó el menor, de verdad esperaba que se cumpliera, porque él sentía que sus sentimientos ya estaban bastante complicados. 

Después de anotar un par de cosas más, Giuliana cerró la libreta y los miró fijamente.

"-Les voy a ser sincera, creo que son dos personas buenas que están a punto de vivir el año más difícil de sus vidas. El único problema que tengo es si están o no capacitados para ser padres, lo que queremos evitar acá es que Luna pierda a más personas cercanas. Simona y Dante creyeron que ustedes dos lo iban a poder hacer, pero sinceramente, yo no estoy tan segura"



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