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vii. Vida Doméstica

Luna estaba durmiendo en su silla en el asiento de atrás mientras la radio pasaba una de esas canciones que suenan en todos lados hasta cansarte, los dos hermanos estaban en un silencio cómodo hasta que el mayor decidió romperlo.

"-¿Cómo estás con todo el asunto del tío/padre? ¿Eh?- Dijo en tono burlón, si Junior no hubiera estado tan tenso, capaz se hubiera reído.

"-Cagado encima"

"-Sabes que vamos a estar acá para lo que necesiten, ahora no va a ser fácil pero tengo toda la confianza del mundo en ustedes y sé que lo van a hacer bien con el tiempo. Aparte te va a gustar vivir con el chabón que te gusta, ¿O no?"-Junior miró a su hermano alarmado, Romeo se dió cuenta de cómo el menor lo miraba y se rió.-"Dale, es medio obvio que Blas te gusta desde hace tiempo, Junior, hasta me lo dijiste ¿Te acordás?"

"-Si pero eso fue hace un año, las cosas cambiaron, él nunca me dió bola y nos quedamos como amigos. No me jodas"

"-Perdón eu, no te enojes. Pero no sé, creí que te seguía gustando. Por como lo miras, con ese brillito en los ojos. Y como él también te mira a vos, como Dante miraba a Simona"

Un silencio se extendió en todo el auto, ninguno de los dos dijo nada después de eso. Cuando llegaron se despidieron con un abrazo, Junior sacó a Luna con la silla y entró a la casa. Se encontró con Blas revisando unos papeles del trabajo y sentado en la mesa del living.

"-Hola"

"-Hola"-El mayor dejó los papeles de lado y se acercó a saludar cuando se detuvo bruscamente.-"Junior, ¿No te diste cuenta que hay que cambiar a Luna?"

"- ¿Qué?"

"-No tenes nariz flaco, vamos arriba dale"-Los dos se fueron a la habitación de la bebé, sacándole la ropa y recostándola en un colchoncito.

"-Bueno, empezá"-El mayor le dió unas palmadas en la espalda, como incentivándolo.

"-Buena, ¿Por qué? ¿Porque soy el más chico?"

"-Dale, lo he estado haciendo siempre yo. Te toca, no voy a ser el único acá cambiando pañales"

Junior lo miró a Blas unos segundos, sabía que su amigo tenía razón pero él jamás en su vida lo había hecho, así que con cuidado se acercó, intentando desabrochar el pañal pero no teniendo ni idea de cómo hacerlo.

"-No hay mucha ciencia Ju, despega los adhesivos del costado, limpia con toallitas húmedas, echa talco y listo"-Le explicó mientras se reía mirando al menor. Toda esa escena y la cara de confundido de Junior, le provocó una ternura que hace tiempo no sentía.

Después de hacer todo lo necesario (a Junior le costó más de lo que le hubiera gustado admitir), comieron y Junior se fue a dar un baño mientras Blas decidió ponerse a ver televisión en el sillón con Luna al lado. Había puesto una película que le encantaba, cosa que no le duró mucho porque su ahijada empezó a llorar muy fuerte.

"-¿Qué pasa? ¿No te gusta?".-Le preguntó como si fuera a recibir una respuesta, suspiró y decidió cambiarla a ver si eso podría lograr calmarla. Terminó viendo Peppa Pig, con Luna sonriéndole al televisor. En esto se había convertido su vida.

Junior salió de la habitación ya cambiado, y se encontró a Blas hablando con su sobrina sobre lo que estaba sucediendo en el capítulo que los dos estaban viendo, como si de verdad ella le fuera a contestar. El menor no pudo evitar soltar una carcajada ante tremenda escena.

"-Blas, ¿Estás bien de la cabeza?"-Preguntó mientras se sentaba al lado de él.

"-Vos te reís pero el boludo del hermano perdió las llaves del auto, posta es un gil. ¿O no Luna? Espero que vos jamás nos hagas eso"

"-Ah listo, ya te pegó la edad veo"

Así se quedaron un rato más hasta que Luna por fin se durmió, Blas la llevó hasta su cuna y bajó nuevamente, encontrándose a Junior también dormido en el sillón. Sintió una sensación esparcirse por todo su pecho, algo que hace tiempo no sentía. Intentó con todas sus fuerzas ignorarlo pero le fue imposible.

Lo miró unos segundos hasta que decidió ponerle una sábana encima, le deseó buenas noches en apenas un susurro y se fue a dormir, con la imagen del chico en la cabeza y sentimientos que ni él entendía.