Capítulo 15

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15: ¿Donde estás?, ¡Qué te he venido a buscar!.

--Creo que tengo que ir al baño-- se excusó Miguel para salir de la oficina sorprendiendo a todos.

--Eh... ¿y sí le decimos que no hay baños en la Tierra de los Muertos?-- recordó el oficinista.

...

Él bajo corriendo tratando de esconderse de su familia, sin embargo, ya ellos empezaban a avisar a la policía lo que estaba ocurriendo.

Miguel se puso el gorro de su sueta y empezó a caminar tratando de encontrar la salida.

--Sí quiero ser un músico, debo ir con la bendición de un músico, voy a encontrar a mi tatara abuelo-- comento Miguel.

--¡Quieto ahí!-- en ese momento a Miguel se le congelo la sangre al sentir la mano del policía en su hombro.

El policía se exalto al verlo buscando rápidamente su comunicador.

--¡Estoy viendo al niño vivo!-- empezó a decir.

Sin embargo, empezó a pasar mucha gente entre el policía y Miguel, así que le dio chance a desaparecer.

El policía pedía el permiso para pasar, pero al final vio que el niño desapareció.

Miguel fue a esconderse en una de las oficinas donde tenían a un muchacho revisando su caso.

--¡Te llevo al backstage!-- trato de persuadir.

--Debería arrestarte por el resto de la noche, pero mi turno casi termina y quiero ir a visitar a mi familia viva-- comento el oficial terminando la nota y entregandosela-- te voy a dejar ir, pero con una condición--

El joven cambio su rostro, tomó la orden y su sombrero.

--¿Me devuelves el disfraz?-- pregunto indignado.

--Eh... no-- respondió el oficial.

Salió molesto murmurando un par de cosas, chocando su brazo con el marco de la puerta.

--¡Oye!, ¿conoces al DeLa Cruz?-- le pregunto llendo detrás de él.

--¿Quién quiere sab... ¡AY, estás vivo!-- se sobresalto al ver a Miguel.

Miguel, al ver el escándalo que iba a provocar, lo metió a una de las cabinas telefónicas.

--Sí, estoy vivo-- afirmo-- y solo puedo volver si DeLa Cruz me bendice--

--Extrañamente especifico-- comento tratando de recuperar el aliento.

--Él es mi tatara-abuelo-- le explico.

--¿Es tu... qué?-- exclamo algo asombrando haciendo que sus ojos cayeran en su boca.

Miguel, solo se limito a hacer una mueca de asco.

--Espera...-- empezó a hablar solo tratando de ver los beneficios de ellos-- ¡Sí!, ¡Irás a la tierra de los vivos!--

--Aunque tal vez busque...-- salió Miguel de la cabina.

--Chamaco, espera, tu me ayudas y yo te ayudo, nos ayudamos el uno al otro-- comento, Miguel volvió a ver hacia otro lado y vio a su familia-- soy Héctor--

--Miguel-- se presento, jalo el brazo de Héctor para poder escapar de su familia.

Cuando Miguel salió, se dio cuenta que solo llevaba el brazo de Héctor, que este a su vez, le indico que su dueño aun estaba adentro.

Cuando el salió, ambos empezaron a correr.

--¡Me lo van a matar aquí!--comento Imelda al salir-- quiero a mi guía espiritual, Pepita--

No pude olvidarte...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora