-Yo...eh...pues...no...yo no ando de la mano con ella.-Dije al fin
-Pues segun dicen que las vieron y que no dejaban de hacer esas cosas en público... ¿por qué me haces esto Elizabeth, te he dado todo ¿por qué me haces esto?- dijo mi madre a punto de quebrarse en llanto.
-Pues es que yo... yo... ¡YA DEJAME EN PAZ!- Ya no sabia que más decir, diciendo eso me fui.
-Primero deja tu celular en la mesa- Dijo mi madre gritando
No dije nada y sabia que ya me lo habian revisado por eso sabian todo.
*Estúpida que fuiste ¿por qué no borraste todo?*
Pasaron meses antes de que yo supiera algo de Mariana. Yo seguia enamorandome más y más de ella, era algo que no podía controlar. Pero lo que yo nunca pensé es que ella se llegaría a enamorar de alguien mas. Tantas cosas que soñe, tantas cartas y poemas que le dedique. Todo lo llegue a superar hasta un año después cuando ya tenía 13 años y me encontraba en un colegio nuevo con personas nuevas y con un ambiente nuevo, me sentía mejor.
-Octubre del 2013-
Yo solo estaba en una de las muchas redes sociales que tengo, en este caso en una en donde te hacen preguntas de lo que sea. (Sí, ask.fm)
Tenía que buscar como fuera el tema para mi trabajo de sociales y no sabia que hacer.
Hasta que me llegó una pregunta de una chica diciendome que cual era mi lugar favorito, sucesivamente hablamos de todo tan solo en día y decidí preguntarle su celular su nombre era Valentina, una chica de 17 años muy baja para su edad, lentes y cabello negro, largo y de rizos con una gran obsesión con los libros.
Al cabo de una semana esta chica tan atractiva me estaba ¿coqueteando? y al final nos vimos, yo estaba demasiado nerviosa para la vida.
Yo solo me limite a llevar mi skateboard a ella también le gustaba el skate asi que decidimos andar en mi skate por toda la ciudad en donde ella vivía.
Nos llevo unas horas de bromas y abrazos un poco cursis hasta que empezó a llover y empezamos a buscar un buen lugar para esperar que pasara la lluvia.
-¡Agh! que frío- dije con una cara de puchero.
-No seas marica, ¡marica!-dijo Valentina riéndose de mi
-Pero...pero...-diciéndo eso decidí no decir nada más.
-¡JA! te callaste- empezó a reir.
-No, obligueme a callarme- la miré de arriba a abajo.
-Cállese.- dijo volviendose ya que nos encontrabamos sentadas en mi skate una al lado de la otra.
-Obligueme.- Dije mirandola a los ojos *por dios que ojos tan hermosos*
-Espera.- dijo quitandose los lentes
-¿Eh?- Dije algo confundida al ver lo que valentina había hecho
-Es más cómodo, aunque no veo esa casa a lo lejos- dijo sonriéndo haciendo visibles sus brackets *Por dios si ya era linda, ahora es preciosa*
-¿En que estábamos?- pregunto Valentina volviéndome a ver a los ojos
-Pu...pues... que yo no me callaré- dije perdiendome en su mirada
-¿Ah no?- dijo Valentina
-No- Dije en seco
-¿Segura?- dijo Valentina acercandose aún más
-S...sí...No podrás callarme- dije y sonreí
-Mmm... Yo creo que se como- Dijo Valentina acercandose a mí
-Co...- Valentina no me dejo terminar y me beso.
Jamás habrá otra chica que bese como ella, era una sensacion tan hermosa me gustaría haber congelado ese momento, sus labios tan suaves como algodon yo no sabía que hacer.
*Me...me esta mordiendo el labio. Demonios! es demasiado buena besadora*
-¡oye! no me muerdas- dije haciéndole pucheros
-¡Pues no seas marica!- dijo volviendose a su lugar
-Pues...pues ahora es mi turno- dije agarrando su delicado rostro y volviéndola a besar y esta vez yo la mordí.
Así pasamos al cabo de un tiempo y después solamente nos despedimos con un largo abrazo y cada quién por su lado.
Empezamos a hablar aún más; Valentina tenía una vida bastante difícil y yo solo llegué para distraerla un poco.
Nos vimos un par de veces más pero solo unas cuantas nos besámos pero nada más sucedió.
Al tiempo me empezó a gustar Valentina pero yo nunca le correspondí.
Tristemente la última vez que la vi fue para darle un poema que yo misma había escrito para ella, pero la verdad me la había pasado llorando porque siempre había algo que me arruinaba todo.
Recuerdo en Agosto cuando estaba intentandolo con una chica llamada Violeta, todo iba bien pero realmente todo terminó de la peor manera. Ella no me quería solo fui un juego para ella para tratar de olvidar a su ex.
Pero todo empezó a cambiar cuando la conocí a ella.
¿Quién era esa chica tan hermosa?
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Poeta Demente
No Ficción¿Podría ser todo mi imaginación? O tan solo producto de una serie de hechos que en realidad sucedieron pero son demasiado buenos para ser verdad. En busca del amor infinito en infinidad de mujeres. Producto de mi demencia sin cordura. Si eres homofó...