|1| Tinkerbell Y Las Geo Hadas «|Terminada|»

Capítulo Mágico 20✨

Una vez todos listo, abrieron la pequeña puerta del palacio, viendo una hermosa noche, ni tan cálida pero tampoco tan fría, era una noche perfecta.

Todos emprendieron vuelo hacia el camino que marcaba uno de los mapas tachados, que había en el escritorio de Crys. Una vez todas las Geo Hadas se elevaron en el cielo, sonrieron, agarrándose de las manos, para así no perderse. No sabía que les esperaba este nuevo mundo así que debian estar unidos, ahora más que nunca.

-Será un viaje algo largo, ya saben... Geo Hadas en cielo...- habló en alto Jorillen.

-Y en tierra también- completaron las mujeres mirando hacia delante.

Volaron con la rapidez que sus alas les permitieron hacerlo, logrando así entrar poco a poco en las ráfagas algo fuertes de viento. Sin duda alguna no dudaron en unirse aún más y como la formación de las aves hicieron un espléndido volar, directo a la estrella con mayor brillo.

-¡Está muy fuerte!- gritó Sheebbazer, quien tenía sus ojos un poco entrecerrados por la fiereza del viento.

-¡Falta poco!- le respondió Gina.

Ninguno contuvo más y se dejaron llevar por la gran ráfaga de viento mientras gritaban, eran voleteados y golpeados levemente por el viento se dejaron llevar, llegando así a una calma total, aún unidos de la manos.

-¡Bienvenidos a Nunca Jamás!- gritó Jorillen, quien fue el primero en abrir los ojos.

-¡Aquí vamos, Crys y Jefe!- gritó Chelleiar, mientras todos le seguían.

Las Geo Hadas se caracterizaban por tener una alas grandes y alargadas, en cierto sentido, podían ajustar sus alas a la velocidad que necesitaban y para este caso pudieron ser sus alas finas, y delgadas para tener una mayor predicción y velocidad al volar.

-¡Miren!- señaló Sheebbazer.

Una vez ellos estuvieron cerca a la isla pararon en el cielo, viendo como pequeñas luces se movían de unos lados a otros.

-S-Son... más hadas. ¡Son hadas!- sonrió Gina y las chicas rieron al comentario.

-Si tenemos suerte Crys y Raphaelo estarán allá- comentó Chelleiar.

-Bien, vamos, estén al tanto de todo- y así emprendieron nuevamente rumbo hacia donde habían encontrado a las hadas.

......

-Es un gusto conocerlos a todos- sonrió Crys -Debo volver con Lord Milori- sonrió -¡Hasta pronto!- una vez se despidió de todos y todos de ella, se dio la vuelta elevándose en el cielo, cada vez alejándose más hacia el palacio de Lord Milori.

Sentía el frío calar un poco sus huesos, y no solo eso, si no también congelar su cuerpo. Sin el polvillo azul no podría volar en este frío invierno.

Por un instante le costó trabajo mantener sus alas abiertas... sus alas fallaban con cada revoleteo que daba.

-Alas, no me falles ahora, por favor- siguió unos metros más pero luego sus alas quedaron congeladas totalmente. Crystalleder cayó por aire gritando a todo pulmón. La altura era demasiado para una hada, incluso para un lechuza. -¡Ayuda, Lord Milori!- iba cayendo por el frío aire mientras que intentaba mover sus alas pero estás no respondían.

-¡Crystalleder!- a los lejos, el Jefe, quien ya había visto a Crys desde un punto lejano, voló demasiado rápido pero fue impactado por una lechuza ártica que lo detuvo, haciéndolo caer en la zona cálida antes de cruzar el puente.

Lord Milori, quien había visto todo con claridad, atrapo con ayuda de su lechuza a Crystalleder, en brazos.

-¡Déjala ir!- gritó esta vez Raphaelo, desde el otro lado del puente, en un estado de sorpresa.

-¡Lord Milori!- la voz de la Reina Clarion se hizo presente mientras que hadas calidad y frías llegaban al encuentro de lo dicho. Todos observaban con preocupados a Lord Milori quien llevaba al hada en brazos, con cuidado de no lastimar sus alas, las cuales estaban congeladas.

Una vez la lechuza aterrizó, las hadas frías estuvieron presentes y al igual que las cálidas, los paramedicos de las hadas del invierno llegaron junto con Lord Milori y Crystalleder.

-Crys...- Raphaelo intentó cruzar la frontera pero varias hadas se lo impidieron, Tink y sus amigas se sentían culpables, la Reina Clarion estaba preocupada y en el rostro de Raphaelo la tristeza se hacía visible.

Las hadas del frío invierno dieron paso a arriesgar sus alas en la zona cálida llevando a Crys a ese lado para que los paramedicos de la zona cálida se encargarán de la situación.

-Oh, no...- Tink, y sus amigas, se sorprendieron al ver las alas de Crystalleder congeladas, pero afortunadamente no quebradas.