—Quiero agradecer por todo, de verdad. Esta ha sido la mejor fiesta sorpresa que me han organizado —. Sonrió abrazando los regalos y animó más la fiesta bailando y cantando.
La fiesta transcurrió como cualquier otra, charlas, risas, diversión y mucha felicidad por parte de la cumpleañera. Para Crystal era hora de dejar su casa y continuar con lo que tenía planeado para esa misma noche. El verano ya se sentía y por lo tanto se podría decir que esos ventiladores, que prometió, estaban listos hace unos días.
Tomó el valor para despedirse de todos y continuó.
—Ehm, disculpen...—. Sonrió ante las cinco personas que la veían felices. —Es hora de...de que cite unas palabras.— sonrió. —Quiero que Chelleiar, mi buena amiga, pase un feliz feliz cumpleaños. Gracias por llegar a nosotras—. Acercó sus manos a su pecho con muestra de llevarla a su corazón.
—Gracias a ustedes, chicas, por recibirme.— sonrió.
—Sheebbazer, siempre fuiste una gran amiga y quiero agradecer por salvarme ese día cuando el balón de fútbol casi me mata.— los presentes rieron, y más Sheebbazer —Gracias, amiga, te quiero—.
—¡También te quiero, mi mechón!—. Sonrió al ver su mechón azul celeste, entre sus largos cabellos negros.
—Gina, Jorillen. Aunque he causado muchas travesuras quiero pedir disculpas por ello—. Sonrió apenada —Gracias por soportarnos y por ayudar a organizar esta hermosa fiesta—. Alzó los brazos mirando al techo por instante, luego los bajo y sonrió a la pareja.
—¡Gracias a ti, Crystal!—. Habló Gina mientras abrazaba a su esposo hada.
—Por último, gracias, Raphaelo por estar conmigo, por ser como un padre para nosotros, y más para mí.—. Sonrió y voló velozmente dándole un fuerte abrazo a Raphaelo. Este sin duda alguna correspondió de inmediato, soltando una sonrisa sincera y calidad.
—Gracias a ti, pequeña Lleder—. Sonrió y beso su frente, otra vez. Para Crystal sería la última vez que él haría algo así. Se acercó a cada uno dando un fuerte abrazo como lo hizo con el Jefe Hada.
—¿Ya te vas?—. Esta vez la voz de Jorillen le preguntó. Ella asintió firme.
—¡Debo estar lista, mañana será un gran día!—. Los presentes rieron sin saber a qué se refería Crystal. Ella se iría para siempre de la Tierra. —¡Adiós a todos!—. Se despidió con su mano derecha, sosteniendo una buena bolsa de polvillo en su mano izquierda.
A su paso, ya de noche , era un tanto difícil de ver. Agudizó la visión y sonrió al sentir el frío contacto del aire suave sobre su piel. Se alegro más al saber de qué ya estaba cerca.
.......
Y sin dudar, siguió recordando...
—Crystalleder, prometes ser fiel ante la ley de Londres, prometes ser fiel ante nosotros, las Geo Hadas. ¿Estás de acuerdo?—. Habló Raphaelo mientras aguantaba la risa, sosteniendo a las tres chicas luego de jugar con ellas........
Recordaba cada pequeño momento con Raphaelo, sus amigas y las pareja, juntos. Decidió sacar su mochila, el polvillo y el mapa. Echó en si misma una pequeña cantidad de polvillo ahorrado por ella. El resto lo guardo, seguro en la maleta. Empacó telas de colores, polvillo amarillo, un par de emparedados, un jugo, y algunas cosas más que me podrían ser útiles en el camino. En sus manos llevaba los planos y listo. Estaba lista para marcharse.
—Bueno. Hasta nunca Planeta Tierra, Hola tierra de Nunca Jamás—. Se dijo para ella misma y emprendió su viaje por el cielo oscuro de Londres, Inglaterra. —¡Esto es hermoso!—. Observó cada detalle, desde el cielo, a la tierra. Era una vista totalmente indescriptible. Las luces de cada casa, edificio o lugar, de la ciudad era maravillosamente elegante y muy llamativo.
Se acercó lo suficiente a las luces como para distinguir que necesitaba volar más rápido ya que el viento estaba algo brusco.
Estaba tan cerca de las estrellas pero una ráfaga de viento la impulso hacia un costado. Ella dió varios gritos por tal sorpresa y no pudo aguantar el fuerte viento. Cerró sus ojos con fuerza y se aferró a su bolso. Sintió como la luz de hago intensa y cegadoras, aún con los ojos cerrados, traspasando una fina capa de lo que serían polvo, o una nube, tal vez, para ella.
Cuando sintió que todo estaba tranquilo abrió sus ojos, encontrándose con una nueva tierra, un lugar nunca antes visto por sus ojos, la tierra de Nunca Jamás.
—Esto es...—. Una ráfaga de viento la impulso suavemente y ella continuó volando en dirección desconocida. —Que maravilloso es esto, nunca creí poder entrar—. Se dijo para ella misma. Dejo de volar posicionándose en un objeto muy grande, y de madera, el cual no había prestado atención a lo que era, o quiénes estaban en él.
Se fijó en el bello horizonte, un horizonte que pintaba su cielo naranja, ya justo para anochecer. Mientras en la tierra iba amaneciendo aquí iba anocheciendo.
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|1| Tinkerbell Y Las Geo Hadas «|Terminada|»
FantasiTinkerBell y sus amigas, junto a la Reina Clarion y el resto de las hadas acompañantes, tendrán que resolver el misterio de las nuevas hadas. Periwinkle y sus amigos, junto a Lord Milori y las lechuzas árticas, se unirán para buscarle una solución a...