Capítulo 18

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Cindy:
Ya habían pasado dos semanas desde que Cornelio y yo estabamos saliendo. Los de la agencia de modelaje nunca se aparecieron y aún seguía en conctato con Axel y Erick.

Ahorita me encontraba en descanso de la Prepa, yo estaba sentada en una mesa, estaba con seis amigos hombres, ellos estaban sentados en las bancas alrededor de la mesa. Muchos decían que andaba tirando placa por juntarme con puros hombres en los descansos. Claro que yo tenía a mis amigas mujeres pero mis amigos me agarraban y me sentaban con ellos y pues ¿qué podía hacer?

Cornelio:
Salí de la auxiliaria junto con mis amigos. Estabamos en la Prepa de Cindy, toda esta semana 7 amigos y yo vendríamos a jugar Futbol por la semana deportiva de las dos preparatorias. Comencé a buscar a Cindy con ayuda de mis amigos. Realmente no la encontraba.

-Chica -le hablé a una que iba pasando con dos más.

Ella nos miro sorprendida.

-¿Conoces a Cindy? -le pregunte- Cindy Kimberly, una de ojos verdes y...

-Ah -me interrumpió ella- ¿La que se cree la reyna? ¿La güerita que es bien mamona?

Fruncí el ceño.

-Le decimos así todos porque se cree la mera verga de la Preparatoria y así.

Explicó.

-No la puedes ni mirar porque ya te anda diciendo de cosas con todos sus amigos -dijo molesta- Y si la conozco, toda la Prepa la conoce. No te conviene estar con ella, es muy zorra.

-¿Ah, okey? -dije un poco confundido- ¿Sabes dónde esta?

-Ven -dijo ella.

Caminé detrás de ella hasta que llegamos a un lugar donde estaba lleno de mesas y bancas.

-Esta allá tirando placazo con todos sus amigos -apuntó con la cabeza a una mesa.

Había alrededor de ocho chicos sentados en unas bancas y en medio de ellos había una mesa, ahí estaba Cindy, era la única mujer. Estaba sentada cruzada de piernas, parecía una señorita de esas que según son bien finas. Llevaba la falda corta haciendo que se le vieran las piernas, tenía unas calcetas blancas hasta un poco más abajo de las rodillas, llevaba unas botas de tacón negro y bajo, a comparación de otras que llevaban zapatos escolares. Iba con la blusa blanca fajada haciendo que se le notara su cinturita y llevaba una coleta con cabellos sueltos haciendo que se viera hermosa. Ella estaba riendo hasta que volteo hacía donde yo estaba. Me miro y luego miro a la chica. Se bajo de la mesa y casi corriendo vino hacía aca. Todos sus amigos se le quedaron viendo confundidos y molestos.

-Que chica.. -susurró mi amigo Tony y le di un fuerte codazo.

-Ay no -dijo la otra chica.

-¡Hola, mi amor! -exclamó Cindy con una sonrisa.

Se lanzo a mis brazos pero antes rápido y con un brazo ella empujo a la chica fuertemente casi tumbandola. Me besó la mejilla.

-Cindy, fíjate.

Ella lanzó una carcajada.

-¿Por qué le hablas a ella? -me pregunte molesta.

-Le pregunte que donde estabas, que si te conocía

-¿Y por qué de las cientos que hay justamente a ella? -me pregunto.

-Fue la primera que paso -respondí.

-¿Y qué te platico de mí? -me pregunto Cindy molesta- ¿Que soy una zorra? ¿Una mamona? ¿Que me creo demasiado?

-Solo le dije la verdad -dijo la chica.

-Cállate -le dijo Cindy molesta- Y largate de aquí antes de que vuelva a pasar lo mismo de hace 1 mes.

En eso la chica en un movimiento realmente muy rápido me tómo de la cara y me beso con fuerza, me besó por unos diez segundos, claro que no le seguí el beso, estaba en shock.

Cindy la traía del cabello y la empujo al suelo tirandola de rodillas. Todos alrededor miraban asombrados. La chica solo se levanto y se fue corriendo apenada con sus amigas.

-¡Esa es, hermosa! -gritó un chavo con los que estaba ella ahorita y todos los demás comenzaron a gritar.

Cindy les sonrió y después me miro seria.

-¿Por qué demonios la besaste? -me gritó mientras me empujaba.

-Nosotros nos vamos -dijo Tony- Vamos a estar en la cancha.

Se fueron.

-¡Contestame! -exclamo molesta.

-Tranquilizate, preciosa -la trate de abrazar pero me volvió a empujar.

-¿Cuál mi preciosa, idiota? -exclamo y sentí como todos se nos quedaban viendo.

Tomé a Cindy de la mano y me sente con ella en una mesa.

-Ni siquiera le seguí el beso -le dije- Estaba en shock.

Ella seguia con su cara molesta.

-No me haces tonta -me dijo molesta.

-No quiero a nadie que no sea a ti, entiende, tú eres la dueña de mi corazón, Cindy.

Ella sonrió y me besó en la mejilla.

-¡Ay, te quiero! -exclamo y le sonreí.

-Yo te amo pero bueno.

Entrelace nuestras manos y le besé los nudillos.

-¿Qué haces aquí con los otros? -me pregunto sorprendida.

La miré.

-¿No quieres que venga o qué? -le pregunte molesto- ¿Si andas de chiflada como dice la otra chica?

Le solté la mano.

-¡No! -exclamó ella y me volvió a tomar la mano- Solo quiero saber porque estás aquí.

-Recuerda que es la Semana Deportiva, nos toca venir para aca a competir.

-Ah si -dijo ella- Yo estoy en el equipo femenino, ojála y la otra semana vayamos a tu Prepa toda la semana para verte.

Hizo un puchero, le hice a un lado el cabello y le di un pequeño beso en el cuello.

-No me beses ahí -dijo ella riendo- Me da cosquillas.

Le dí un beso húmedo por último y me alejé de ella. Pase mi brazo por sus hombros y ella recargó su cabeza en mi y comencé pasar las llemas de mis dedos por su pierna derecha.

-Siempre me dan demasiadas ganas de quitarte toda la ropa y hacerte mía todo el día -le dije.

-Pervertido -me dijo riendo.

-Tengo necesidades ¿qué quieres?

Ella rió.  Dejé de acariciarle las piernas y mi mano se fue a los tres botones de su blusa de la Prepa y comencé a desabrocharselos y cuando terminé me le quedé viendo los pechos. Me mordí el labio.

-¡Tonto! -exclamo ella riendo y se los abrocho.

-Ah, tan hermosa vista que tenía -dije y volvió a reir.

-Cornelio -una voz chillona se escucho.

Deje de ver a Cindy y vi a una chica, ay no mames, mi ex novia Fernanda. Ella se subio a la banca y avento sobre mi haciendo que cayera acostado en la mesa con ella arriba. Derrepente ella se quitó de golpe, Cindy la había empujado, me levante y la mire molesto.

Como tú || Cornelio VegaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora