Al dia siguiente Goku se levantó con todos los ánimos del mundo, estaba ansioso por el último examen que le haría, quería irse de ese feo lugar e ir al lugar donde se suponía que era su hogar. Paso a ver a su compañero de habitación, el seguía durmiendo y con mucha razón, era las 6 de la mañana
-Este tipo tiene el cabello más levantado que el mío – observo a un lao de la camilla soltando una pequeña risita – Da igual, con tal de que sea el único cabeza de palmera
Su recorrido comenzó en la cafetería; no había nadie y para él fue como un restaurant solo para él. Fue al jardín que tiene al otro lado del hospital, bastante floreado y tranquilo, hasta que sintió el llanto de una niña. Miro a su alrededor y en cuanto la vio
-No puede ser, otra palmera
Se acerco para ayudarla, estaba sentado en una banca, donde sus manos son tenían su cara. Goku se sentó a su lado, ella se calmó un poco, al parecer no quería que nadie la viera llorar
-Tu cabello se parece al mío – fue lo primero que le dijo, ella lo miro algo confundida, pero en cuanto vi a lo que se refería entendió un poco
-El mío es más bonito – contesto ella haciendo un puchero
-¿Por qué estabas llorando?
-Mi hermano – seco sus lágrimas – Lo mordió un perro con rabia en la pierna, no quiero que se la corten
-Eso no va a pasar, te lo aseguro niña – se levantó – Mírame, a mí me atropello una motocicleta y aquí estoy, vivito y coleando
-Eres un payaso – sonrió – Espero que sea como tú dices, aun que Renzou es bastante fuerte
-Señor Son Goku – se escuchó un grito a lo lejos, el mencionado se dio vuelta – Su sobrina lo vino a ver
-Voy – contesto igualmente gritando – Espero que tu hermano se recupere, Adiós – se despidió para luego salir corriendo
-Tonto, no debes de salir de tu habitación – Kale jalo de su mano – Chichi te estaba buscando, quiere pasar tiempo contigo -dijo emocionada dando gritos
-Eso es bueno – dijo igualmente emocionada, pero luego - Ah, pero tú vas a estar de metiche – se quejó rascando su nuca
-No exactamente – empujaba por la espalda a su tío- Solo trata de no arruinar nada
Kale lo empujo hasta que es estuviera en aquella habitación, sobre su camilla había algo de ropa; cerro las cortinas y se dedicó a vestirse; como Goku había olvidado como escribir y obviamente a leer se comunicaron por el celular de chichi, ella escribía y luego salía un audio, mientras que Goku lo hacía en viceversa
Chichi lo llego fuera del hospital, un lugar donde se desarrolló su primera cita, recordaba a la perfección donde se ocultaba aquel jardín secreto donde había un hermoso lago rodeado de pequeñas flores color rosa
-Tengo recuerdos de este lugar – Goku se acercó lentamente al lago y ver como su cara estaba reflejada, pero esta imagen se volvió un espejismo, su cabello tornaba un color dorado y sus ojos color esperanza - ¿Quién es el? ¿Por qué usa mi ropa? – miro a chichi algo asustado
-Ella se acercó y se inclinó borrando con su mano aquel espejismo que lo atormentaba – Tu eres tú, solo tienes que saber eso, no dejes que tu mente te engañe – dejo reproducir el audio
-Tengo miedo Chichi, ¿Qué tal si no vuelvo a recordar? ¿voy a estar asi el resto de mi vida? Sin saber quién soy realmente – su ojo derecho cambio a un color celeste, estaba triste- Quiero saber quién soy, no me gusta está viviendo asi, me da lo mismo saber si fui alguien malo o bueno, solo quiero saber quién soy
Su cuerpo no estaba a su favor ese dia, estaba temblando; se dejó caer sobre sus rodillas apoyando sus manos en la tierra. Simplemente dejo salir aquel dolor que tenía dentro. Chichi leyó lo más rápido que pudo, pero antes de leer ya estaba abrazando a Goku para consolar su dolor
Debe ser atormentante despertar un dia sin saber quién eres, sin saber si las personas que dicen conocerte en verdad lo hacen, sin saber quién fuiste. Lo único que podia recordar era lo del dia anterior, pero solo fueron malos recuerdos atormentando a una niña pequeña, haciéndola sufrir y que el mismo fuera quien dirá ordenes de golpear a una niña inocente
-Yo te lo contare todo Son-kun – se escuchó la voz de la grabadora- Solo cálmate un momento ¿está bien? – el asintió, se acomodó en el césped y miro al lago ya más calmado
-Puedes comenzar, prometo no interferir mientras me cuentas quien soy
Chichi comenzó a escribir lo más rápido que podia para no hacer esperar tanto a Goku, conto desde que era pequeños hasta cuando se volvieron a reencontrar, con mentiras, con cariño, con todo. No dejo nada que contar, conto absolutamente todo lo que ella sabía hasta el momento de el
-Y esa niña de quien hablas – la miro a los ojos - ¿Cómo se llamaba?
-El nombre no importa Son-kun
-Claro que importa – contesto rápidamente – Quiero disculparme por el daño que le hice, aunque no recuerde nada, quiero disculparme, por favor Chichi
-Chichi está en un apuro, temía que le diera uno de sus ataques, no quería que nada le pasase, pero prometió decirle todo – Esa niña soy yo Son-kun, no tienes por qué disculparte, yo te perdone desde hace mucho tiempo
En cuanto escucho el audio quedo impactado; ella se había convertido en su todo, podría jurar que jamas le habría hecho algo como eso, pero sabía que ella jamas le mentiría. Sus pupilas se achicaron y su boca quedo semi-abierta. Se lanzo a sus brazos hundiendo su cabeza en el hueco de su cuello lamentando una y mil veces lo ocurrido
Regresaron al hospital unas horas después, el alta se había adelantado; Goku ya no seguiría en el hospital lo cual lo puso muy feliz, pero su sonrisa se borró cuando salió del hospital, dio media vuelta y vio como chichi entraba a la habitación; desapareció de su vista y quizás, hasta cuando seria la próxima vez que se verían
