Durante los dos meses hubo ciertas cantidades de cambios, Launch, quien había sido mencionada por Lazuli ahora se encontraba trabajando para los padres de Bulma, pero no para malas intenciones, sino para dar un cambio a su vida, volvió a teñirse el cabello como un cambio físico también, tratando de decir que volvería a hacer la agradable niña que muy pocos conocieron. En cuanto a Krillin y Lazuli; como se había dicho, ambos trabajaban en la mansión que estaba escondida en el bosque. Todo este grupito se formo cuando de casualidad todos ellos estaban buscando trabajo, pero por partes separadas
Con el pasar de los días Krillin se dio cuenta de que Lazuli era una persona bastante agradable y simpática; ahora la veía con otros ojos, literalmente. Ya no era la niña débil que él creía
Goku volvió a buscar trabajo en donde lo aceptaron con poco de dudas, pero al fin y al cabo él trabajaba en algo que verdaderamente le gustaba. Vegeta y Bulma fueron al hospital ese dia en que Chichi no pudo salir del departamento, querían verificar que su bebe estaba sano y salvo. Para su suerte el estaba bastante bien, era un niño bastante fuerte
Chichi paso ese dia encerrada hablando con aquellas vocecitas, estuvieron horas y horas hablando hasta que ella se cansó, y sin darse cuenta, se desplomo sobre su cama entrando en un profundo sueño. no despertó hasta el siguiente dia, pero fue la primera en despertar, aprovecho esa oportunidad y salió casi corriendo del departamento
Al llegar a repostería de su madre ambas se abrazaron con tanta dulzura que hasta hubo algunas lágrimas de por medio, pero eso no era todo. En cuanto se dejaron de abrazar sintió un zumbido en su oído derecho, era extraño para ella
-Jefa los pastelillos ya están listos, ¿en dónde los pon? Chichi – Goku dejo caer la bandeja para luego correr a los brazos de susodicha – Volviste, Chichi
Para ella era extraño encontrarlo en la tienda, pero había algo mas extraño que llamo su atención: No estaba con ninguna de esas vocecitas acompañándola y, aun asi, aunque fuese lo el mas mínimo sonido, ella estaba escuchando
-Te extrañe mucho – un jadeo acompañado con algunas lagrimas al separarse de ella
Eso fue lo último que escucho cuando sintió nuevamente el zumbido. No quería decir nada sobre lo que le había sucedido, porque seguía pensando que podría ser aquel muchacho
-Gracias por la bienvenida Son-kun – contesto en señas dedicando una sonrisa para el – No sabia que habías vuelto a trabajar aquí Madre, ¿podría traducir lo que dije para él? Por favor
-No es necesario, Chichi – puso sus manos en frente de ella moviéndolas en forma de que ella entendiera – Recupere todas mis memorias – sonrió
-Eso es una grandiosa noticia, pero al parecer si se te olvido algo
-Eh, ¿Qué cosa? – pregunto dudoso
-Poner los pastelillos en la mesa – soltó una pequeña risita
-Haha ~ tienes razón – rasco su nuca algo avergonzado e intimidado por su jefa – ¿Me ayudarías a hacer unos nuevos? – ella solos asintio
Se llevaron toda la tarde cocinando los pedidos que le encargaba la madre Chichi, tenían que cocinar cientos de dulces para una fiesta de cumpleaños que había solicitado sus recetas. Para ningunos de los dos fue problema alguno; se llevan muy bien con la cocina y, por supuesto, uno del otro
Pero no todo era felicidad, para Chichi se le hacia complicado ocultar su oído derecho, este estaba sangrando, pensó que era causa de aquel zumbido de la mañana. Cuando terminaron todo, Goku se ofreció para llevarla devuelta a su casa, pero ella se negó; dijo que tenia algo importante que hacer, sola. El entendió y la dejo ir