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Tyler:

Tyler: Compré algunas cosas hoy, ¿qué te parece?

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Tyler: Compré algunas cosas hoy, ¿qué te parece?

Josh: Maldición, Tyler.

Tyler: Esperaba tener una mejor reacción, pero está bien.

Josh: Quiero cogerte.

Josh: ¿Está mejor?

Tyler: Oh, sí, mucho mejor.

Josh: Ven a la casa.

Tyler: Mm... No.

Josh: ¿Qué mierda significa eso?

Tyler: Estoy cómodo y no quiero tener que levantarme y ponerme ropa :(

Josh: ¿Puedo ir a la tuya entonces?

Tyler: Sí, por favor :)

Tyler: Está abierto. Me da mucha pereza bajar las escaleras y abrir la puerta, sólo ven a mi habitación.

Tyler escuchó un golpe en la puerta de su habitación y su atención pasó de su celular hacia Josh. Vio al pelirrojo e hizo espacio en su cama para él. Rió al notar cómo Josh trataba de ver su ropa interior por debajo de las sábanas.

—Estás algo acelerado, ¿no?

—Me enviaste una foto de tu trasero en pantis, así que sí, estoy acelerado —habló Josh metiendo su mano bajo las sábanas y dándole un apretón a la nalga del menor, causando que suspirara.

Tyler sacó su cuerpo de las sábanas y cambió su posición, para quedar sobre Josh, soltó una risita al ver cómo Josh escaneaba su semidesnudo cuerpo.

—Nunca pensé que ver a un chico en pantis me calentaría tanto —susurró Josh tomando las caderas de Tyler, juntando sus labios; él beso era necesitado, como ningún beso que hubieran compartido antes.

—Nunca pensé que me sentiría tan caliente usando pantis —dijo Tyler en lo que se separaron, pasaba sus manos por el abdomen de Josh bajo su camisa, quitándosela. Los dedos de Tyler bajaron y empezaron a desabrochar sus pantalones y los quitó. Ambos quedaron sólo en ropa interior.

Tyler comenzó a toquetear el borde de los bóxers de Josh, quitándolos por completo y soltando un gemido cuando Josh presionó sus caderas y lo inclinó más hacia él, provocando que se frotaran contra el otro. Sus manos apretaban con fuerza el trasero del castaño, acercándolos cada vez más.

—Te necesito —murmuró Tyler con placer.

—¿Qué necesitas, bebé?

—Te necesito, por favor cógeme.

Josh jadeó y se sentó, quitando a Tyler de su regazo y buscando lubricante en la mesa de noche, aplicándolo en sus dedos. Tyler yacía sobre su espalda con las piernas separadas y sin nada que cubriera su cuerpo esta vez.

—Eres tan bueno —habló Josh metiendo un dedo dentro de Tyler, penetrándolo con él varias veces, sin querer hacerle daño al menor. La respiración de Tyler se volvió rápida y el dolor se transformó en placer, gimió al sentir otro inesperado dedo de Josh dentro de él.

Tyler gemía mientras Josh hacía movimientos de tijera dentro de él, sentía una ardiente sensación gracias a su estrechez. Josh sacó sus dedos cuando estuvo satisfecho, Tyler jadeó cuando dejó de sentirlo dentro de él. Encaró a Josh y lo vio colocándose un condón por toda su longitud, poniéndole también lubricante.

—Tyler, ¿estás seguro de que quieres hacer esto?

—Por favor.

Con eso, Josh asintió y se colocó sobre Tyler, su punta presionando su entrada, introduciéndose lentamente. Tyler empezó a soltar lágrimas por la incómoda sensación.

—Iré despacio, ¿ok, bebé? Sólo dime cuando me pueda mover.

Tyler asintió y levantó su quijada, respiraba acelerado mientras esperaba que el dolor se convirtiera en placer, pasaron varios segundos así, pero pasó.

—Mu-muévete —susurró Tyler, puso sus piernas alrededor de la cadera de Josh, acercándose.

Josh obedeció y empezó a tomar velocidad, siendo aún gentil para no lastimar a Tyler.

—Más rápido, mierda —jadeó el menor, sus manos arañaban la espalda de Josh, trataba de contener sus obscenos sonidos sellando sus labios, pero no podía. Un largo gemido soltó cuando Josh golpeó su punto dulce.

—Justo a-ahí —lloriqueó Tyler, sus ojos permanecían cerrados mientras Josh embestía el mismo punto, su cabeza se volvió borrosa y todo lo demás fue aplacado por lujuria.

—Eres tan bueno —gruñó Josh comenzando a masturbar el pene de Tyler, que sólo soltaba pequeños "oh" y "mierda". Su cuerpo temblaba por todo lo placer que corría por sus venas.

—Voy a correrme —jadeó Tyler, su voz se convirtió en un gemido.

Las embestidas de Josh aumentaron y su mano incrementó su velocidad, ayudando a Tyler a llegar. Cuando la respiración del menor se volvió errática y sus gemidos más altos, Josh sabía que estaba cerca.

—Oh, mierda, por favor, papi —Gritó Tyler manchando el abdomen de Josh con líneas blancas.

Todo lo que Josh necesitaba para terminar junto a Tyler era escuchar cómo lo llamaba papi. El mayor lo siguió embistiendo unos momentos más rápidamente hasta ambos estuvieron satisfechos. Salió de Tyler y se tiró a su lado, ambos cuerpos estaban sudorosos y respiraban anormalmente mientras dejaban de sentir tanta euforia.

—¿Así que papi, ah?

Pool ; joshlerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora