Hermosa Resaca

Capítulo 13

POV JULIE

—Lo siento, pero ya no trabaja aquí. 

Seungri y yo intercambiamos una mirada inquieta. 

—Por supuesto que no—Seungri asintió—Gracias señor. 

—De nada, señorita—El hombre mayor le sonrió, antes de volverse hacia mí—¡Hey! ¿No eres de Big Bang? 

—No... —Empecé a sacudir la cabeza—Espera... no, si. Sí, lo soy. 

—¿Esta chica es tu novia? 

—Oh Dios, no, tengo mejores opciones—Respondió Seungri—Me siento enferma. Nos encontraremos en el coche, voy al baño. 

El hombre y yo lo vimos a caminar hacia los baños en la esquina de la barra. Sin pensarlo, entró en el baño de hombres. 

—¿Su amiga se siente bien?

Corrí detrás de Seungri, que dio cuenta de su error, segundos más tarde. Respiró hondo y cerró la puerta tras de sí. El camarero nos estaba mirando a los dos, con cara de confusión. 

—Sólo quería comprobar algo allá dentro—Seungri guiñó un ojo. 

—Detente—Moví mi dedo en su cara—Me estás haciendo quedar como una puta. 

—Me va a tomar algún tiempo acostumbrarme a esto. 

—No digas eso, tal vez esto acabe pronto. 

—Ese es el espíritu—Sonrió.

Le sonreí de vuelta: —Cruza los dedos. 

Permanecimos sentados en su casa por un buen rato. Esperando que todo volviese a la normalidad por sí mismo. O esperando despertar del trance en el que estábamos atrapados.

—¿Te das cuenta de que vamos a tener que seguir con nuestra vida normal, ¿no? 

—¿Que tal si esperamos un poco más? 

—Nada ha sucedido en las últimas cinco horas, y no creo que vaya a suceder a corto plazo—Seungri miró su reloj—Tengo una agenda muy apretada, ¿te das cuenta? 

—¿No estarás sugiriendo que vivamos la vida del otro? 

—¿Qué más podríamos hacer? Obviamente hemos perdido nuestras mentes... y el mundo no ha dado señales de detenerse para nosotros. No podemos sentarnos a esperar por siempre. 

—No puedes estar hablando en serio... 

—¿Qué alternativa nos queda? Mi carrera no se puede pausar. Big Bang está por regresar con un gran comeback... 

—Hablas en serio.

Enarcó una ceja: —¿Vas a decirme que vas a pausar tu carrera para ver si cambiamos de nuevo? ¿Vas a dejar que tu padre te despida? El resto de nuestras vidas es lo que está en juego. 

—Vale, vale, lo entiendo. ¿Pero realmente crees que podemos lograrlo? 

No podía imaginarme viviendo la vida de un ídol. Diablos, no. Yo no podría cantar o bailar ni aunque me fuera la vida en ello. Francamente, tanto como Seungri estaba ganándose mi confianza, no estaba segura de que pudiese convertirse en maquillista durante la noche. 

—Julie... Sé que no te gusto mucho, y que ha sido difícil para tí estar conmigo, pero por favor, por favor, ¿Puedes tener un poco de fe en mí? Yo tengo fe en que puedes hacerlo sin meter la pata.—Buscó "su" mano con la "mía".

—Por favor, prométeme que vas a poner en todo tu esfuerzo en mi vida. Sé que piensas que mi trabajo es fácil, y es posible que no signifique mucho para ti, pero por favor no lo tires a la basura—Le supliqué—Si puedes prometerme eso, daré lo mejor de mi.

—Voy a dejar  mi carrera en tus manos, creo que si puedo fiarme de ti, tu puedes confiar en mí.

Sacudí la cabeza:  —Bien. Vamos a hacerlo.

—Genial. Voy a explicarte cómo funciona mi agenda. Esta información es de vital importancia, si no quieres que YG te mate—Seungri agarró su teléfono—Todo lo que necesitas está aquí. No lo pierdas. He organizado todo en el calendario con las fechas y los lugares en los que necesitas estar. Intenta ser inmensamente puntual, y con esto quiero decir, que te presentes treinta minutos antes de lo programado. Si tienes alguna duda, llámame.

Tomé la información con cuidado, esperando que continuase. 

—¿Y bien? ¿Qué hay de tí? Tienes que decirme qué hacer tambien—Cruzó las piernas. 

—Uhhhhhhhhhh, sí. Yo no soy tan organizada como tú. Solo trato de recordar las cosas y espero no estar equivocada—Me estremecí. 

—¿Cómo has estado demostrando en nuestras borracheras? ¿¡En que planeta has estado viviendo tu vida!?

—Aquí... Simplemente puedo escribirlas para ti. Por lo general, mi padre me lo recuerda—Sonreí—Él te echará una mano. 

—Mira, yo no sé cuánto tiempo vamos a estar así...  tal vez un día más... tal vez el resto de nuestras vidas, pero tenemos que aprender todo sobre el otro. No podemos dejar que nadie se entere de lo que está pasando. O nos mandaran a un Psiquiátrico. 

—Eso significa que vas a tener que aprender todo sobre mí. 

—Y tu sobre mí. 

—Oooooh, ¿Podré aprender sobre Jiyong?—Me mordí el labio. 

—Por favor, no pongas esa cara cuando lo veas. 

—Lo siento, trataré de mantener mis hormonas bajo control. Pero eso también significa que tendrás que aprender sobre Brian y Jeremy—Le advertí. 

—¿Los dos chicos con los que te vi?

—Si... ellos. 

—Nunca tuviste relaciones sexuales con ellos ¿Verdad?—Murmuró con cautela. 

—¿Qué clase de chica crees que soy? 

Se rascó la nuca: —¿Qué otra cosa se ​​supone que debo pensar cuando veo a una chica saliendo del baño con dos chicos? 

Reflexioné por un momento, todo lo que pude, por demostrar que estaba equivocado.

—Entiendo tu punto de vista, pero eso no te da el derecho de pensar lo peor de mí. 

—Sí, porque tu no piensas que soy un idiota todo el tiempo. 

—Siempre me da más que suficientes razones para pensar que sí, que no son suposiciones estúpidas—Escupí. 

—¿Sabes qué? Vas a ver cómo la gente reacciona ante mí, porque vas a tener que caminar kilómetros en mis zapatos—Amenazó 

—Ahora mismo, no es el mejor momento para discutir. Sólo... mira. Brian y Jeremy son mis mejores amigos. Los conozco desde hace años, y significan para mí lo que el resto de Big Bang significa para tí.

—Entonces espero que trates a Big Bang como lo harías con ellos. 

—Por supuesto. 

—Seungri...—Me miró fijamente. 

—¿Sí? 

—Trata de no jugar tanto con mis pechos, y si lo haces, que sea cuando estés solo.

Sus manos cayeron de "mis pechos". Había estado buscándolos a tientas de manera intermitente durante las últimas cinco horas, y parecía que no iba a aburrirse de ellos pronto. 

—Puedes jugar con mi paquete si hace las cosa más...

—Por muy tentador que parezca, no, gracias.

Él frunció el ceño: —Tú te lo pierdes. 

Me reí: —Vamos, tenemos mucho que estudiar. Más adelante podremos jugar con nosotros mismos.