Las alas del ángel Inazuma

Capítulo XV

Domo-mina-san! ^^

Bien, este es el capítulo final (?). No lo sabrán hasta leerlo ^^ Bien, espero que les guste y muchas gracias a todos aquellos que han seguido la historia y dejado reviews ^^

Inazuma Eleven no me pertenece, es propiedad de Level 5.

Capítulo 15: Me verás antes de lo que crees...

Se encontraba en su habitación haciendo el equipaje. Mañana por la mañana tendría que viajar, y dejar sus últimos dos meses enterrados en Japón. No quería volver, aún no se acostumbraba a la idea, pero sabía que era lo correcto. Debía volver con su familia. Tras terminar el equipaje de una maleta, revisó algunas de sus pertenencias, percatandose de que una no estaba junto a ella. El mazo de cartas que le había regalado Kido, y que ahora lo tenía Midorikawa. Salió de su habitación, camino por el pasillo, y tocó dos veces la puerta de al fondo.

-Adelante.

Mio entró y vio que Midorikawa se encontraba escuchando música con un solo audífono, mientras que Hiroto leía un libro. Ambos sonrieron con algo de pena al ver a la peli negro.

-Ah, eres tú, Mio.- dijo Hiroto.- ¿Sucede algo?

-Bueno, es que estaba haciendo el equipaje y he recordado que te he dejado el mazo de cartas el otro día, Mido-chan.- dijo Mio. Al oír que su compañera estaba haciendo el "equipaje" ambos asimilaron bien lo que quería decir. Midorikawa reaccionó al rato y empezó a revolver entre uno de los cajones que había, hasta encontrar el juego y entregárselo a Mio.

-Toma.- dijo el peli verde.- Gracias por prestármelo.

-No ha sido nada.- contestó Mio. Luego se volteó y se dirigió hasta la puerta. Midorikawa lo había pensado mucho, y la curiosidad lo mataba. Sin poder aguantar más, se atrevió a preguntar.

-Te irás, ¿cierto?- preguntó el moreno. Mio se detuvo en seco y se volteó a ver a Midorikawa.

-Me temo que sí.- contestó la peli negro. Ambos bajaron la mirada.- Lo siento, chicos...

-Te extrañaremos.- dijo Midorikawa intentando fingir una sonrisa. Mio fue hasta el moreno y lo abrazó.

-Y yo a ustedes. Han sido los mejores amigos que he tenido.- dijo la peli negro.- Recuerden llamarme.

-Claro que lo haremos.- dijo Hiroto uniéndose al abrazo. Luego de unos segundos, se separaron. Mio sonrió e hizo un gesto de despedida, mientras que salía de la habitación y cerraba la puerta. Antes de chocar, se detuvo justo a tiempo, encontrándose con Goenji. El delantero le sonrió de media luna.

-¿Haciendo el equipaje?- preguntó el chico. Mio sonrió algo triste.

-Sí.- contestó al fin.

-Has decidido irte... Los chicos te extrañaran.- dijo el peli crema.- Bueno, en verdad, todos te extrañaremos.

-Yo también los extrañaré.- dijo Mio sonriendo. Antes de entrar a su habitación se volteó.- ¡Goenji-kun!

-¿Hm?- el chico también se volteó y miró a Mio.

-Por favor... cuida a Cherryl.- dijo la peli negro.- Y asegúrate de ayudar a ganar la final.

-No tienes que decirlo.- dijo el delantero sonriendo y entrando a su habitación. Mio hizo lo mismo para luego encontrarse con Cherryl.

-Mio-chan.- dijo la rubia sonriendo. Luego miró las maletas.- Así que...

-Sí.- dijo Mio.- Volveré.

-Ya veo.- dijo la rubia algo triste.- Recuerda enviarme cartas, y llamarme, y venir siempre que puedas, y-

-Calma, Cherryl-chan, ya lo sé.- dijo la peli negro. Cherryl no pudo más y abrazó a Mio tras llorar.- No estés triste, dios...