Capítulo 28: "¿Quieres qué me quede?

89 5 0
                                    

Llegar al búnker jamás había sido tan relajante para ellos, el camino había sido tranquilo y sus corazones tenían ese brillo de nuevo, al fin se sentían como una familia de nuevo, tal vez no estaban completos, pero eso era algo de lo que se preocuparían después. Los cuatro decidieron que la fiesta no se había terminado aún, por lo que Dean sacó algunas cervezas y todos fueron a la única habitación que disponía de una televisión por el momento. Castiel se sentó sobre la cama, con su espalda sobre el respaldo de la misma, Dean puso un cojín sobre las piernas de Castiel y se recostó ahí, Gabriel se sentó a un lado de Castiel y Sam puso una silla a un lado de la cama, en la que se sentó. Disfrutaron de una película de terror, debatiendo sobre como Dean hubiese terminado con todos los monstruos él solo, claro que esas eran palabras que habían salido desde su propia boca. Las cervezas se terminaron y Dean y Cas salieron de la habitación, deseándoles buenas noches a Gabriel y Sam. Aunque en ese momento no habían pensado en qué pasaría al momento de ir a dormir, un silencio incómodo se hizo presente mientras caminaban por los pasillos.
─ ¿Te quedarás conmigo está noche? ─ preguntó Dean por lo bajo sin mirar a Cas, estaba nervioso por el simple hecho de recordar la última noche que pasaron juntos, no había sido una de las mejores sin duda.
─ ¿Quieres qué me quedé? ─ preguntó está vez Castiel, Dean lo miró con vergüenza mientras pensaba en que decir. "Si" pudo haber sido lo que respondería, pero esa pregunta ya la había escuchado antes.

//-//-//-//-//-//-//-//-
─ ¡Castiel, ya no quiero seguir peleando contigo! ¡Solo cierra tu boca unos minutos, no tienes que discutir por cada palabra que te digo! ─ dijo Dean molesto mientras caminaba hacia la cama y se sentaba en la orilla. Se tambaleaba un poco por los efectos del alcohol.
─No trato de discutir por cada palabra que dices, es solo que no entiendo cuál es tu maldito problema─ dijo molesto sin moverse de un lado de la puerta. ─ ¿Qué harías tú si cada vez que tu pareja llega a casa tiene ese olor a cerveza en su boca y en su ropa? ¿Si yo voy a un bar y regreso de la misma forma en la que tú lo haces no te molestarías? ─ le reclamó.
─Si yo me embriago no es tu problema, al igual que si tú lo haces no es el mío─ dijo recostándose. ─Cas puedes hacer lo que quieras, no tienes que molestarte por mí al igual que yo no me debo de hacerlo por ti─ cerró sus ojos con pesadez.
─ ¡Claro que es mi problema! ¡Yo soy el que tiene que soportarte cuando estás ebrio! Y ni siquiera me estoy preocupando por lo que pudiste haber hecho en aquel bar en el que estabas, sabes que soy un ser celestial y tu más que nadie debería saber que si quiero ver y escuchar todo lo que haces lo podría hacer─ dijo más fuerte de lo necesario.
─ ¿Ahora me estás amenazando? ─ preguntó poniéndose de pie. ─Si quieres ver y escuchar todo lo que hago, hazlo, no te estoy engañando con nadie, solo voy a un estúpido bar a beber, por qué según tus palabras "es en lo único en lo que soy bueno" ─ dijo molesto mientras se acercaba a Castiel aferrándose de las paredes.
─Dean, sólo mírate─ dijo acercándose a él para ayudarlo a regresar a la cama. ─solo quiero protegerte, eso es lo que hago y lo que siempre he hecho─ dijo más suave.
─No tienes que protegerme Cas, no tienes que hacerlo si no quieres─ dijo Dean al borde de las lágrimas.
─Yo quiero hacerlo, eres lo más importante para mí, y siempre te voy a querer proteger─ dijo al mismo tiempo que acariciaba su mejilla con dulzura. ─Siempre haré lo que sea mejor para ti, porque es lo único que me importa─
─Así no es como quiero que sean las cosas, Cas─ alejó la mano de Castiel y se recostó dándole la espalda. Castiel camino al otro lado de la cama y se recostó mirando a Dean.
─ ¿Cómo quieres que sean entonces? ─ preguntó inocente.
─Quiero que las cosas sean también como tú quieras, no quiero sentirme como que solo estás aquí porque yo quiero que estés... te revelaste contra el cielo por mí, y has hecho todas las cosas que has hecho solo por mi... y eso no es lo que quiero─ dijo suavemente. ─Solo quiero un descanso de todo eso─ se giró y le dio la espalda a Castiel. Después se puso de pie y tomo su almohada.
─ ¿Te quedarás conmigo está noche? ─ preguntó serió mientras miraba sus acciones.
─ ¿Quieres que me quede contigo está noche? ─ preguntó de regreso Dean, pero no hubo respuesta, porque para ese momento, Castiel, ya había desaparecido. Esa fue la última noche antes de que tomaran la decisión de separarse, Castiel había aparecido en un bar en el que pasó toda la noche y Dean solo se recostó tratando de pensar en lo que había pasado.
//-//-//-//-//-//-//-//

Libres para ser Tu y YoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora