Dia 31

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¿Culpa?

Eso es algo que tenemos todos

Pero...

No todos sabemos aceptarla

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       Hace dos días que Alejandro se fue y las cosas han transcurrido más normales de lo que me esperaba, por lo visto si es verdad lo que dicen, las cosas no duelen tanto como la primera vez...

         Hoy me encontraba en el liceo, como siempre... No sé qué hora era pero ya la clase de química me estaba aburriendo, muchas veces por más que nos guste una materia, nunca estará ese momento en que esta nos va aburrir.

       Desde que abrí mis ojos, he tenido una rara sensación, no sé por qué, pero siento que algo se me está olvidando, algo muy importante...

           Bueno, no me quedara más que esperar hasta poder averiguarlo, porque si me desconcentro en esta clase el profesor se dará cuenta y tendré que sobrevivir a su espantosa mirada, enserio, algunas veces da miedo, otras tan solo da risa.

....

           Al fin, no sé cuánto espere, pero, ya llegue a la hora del receso, saben me parece algo gracioso mi desesperación en momentos así, suelo ser muy fastidiosa, tanto que pregunto la hora cada dos minutos, hasta Miguel lo dice solo que con diferentes palabras...

-Naguara Vanessa que ladillosa- dice miguel en tono frustrado.

-Bueno, Lo siento... pero, ¿Si me vas a decir la hora?- pregunte sonriendo de la forma más adorable que podía.

- Nojoda son las 9:59 am, falta un puto minuto para ir al receso – Dijo suspirando... ven eso es en un modo muy diferente...

     Después de que miguel me insultara por un rato más, busque a la única persona con la que me la pasaba en los recesos... Adriana...

         No sé cuánto pase buscándola, pero no la encontré...

        Resulta que ella se encontraba en dirección o algo así resolviendo un problema en el que se había metido Keiver, mi futuro decía que no la vería hasta el segundo receso...

         Ahora me encontraba caminando por los pasillos de mi colegio como toda chica antisocial, no le prestaba mucha importancia a nada solo podía ver a las personas hablar... Tengo que decir que solo me detuve cuando vi a Yorsue casi besarse con una chica menor que el...

    Díganme como quieran, pero solo me dio curiosidad, no fue tanto por husmear lo que hacía el, si no, que esa imagen logro que nuevamente me viniera la sensación de que olvidaba algo...

       Cuando me di cuenta de que los dos me miraban, corrí lo más rápido a mi salón, después de todo la vergüenza abundaba en mi...

    No hice nada en la segunda clase, los profesores estaban ocupados, por lo tanto me toco hacerme cargo de mi salón... Mala idea para mi...

  Todo parecía una jungla, solo que más evolucionada, por un lado estaban los idiotas que rayaban penes por todas las paredes... En otra parte estaban los amorosos que se tragaban a besos, y bueno, el resto se los dejare a su imaginación.

Nuestro Tiempo Juntos Antes De MarcharnosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora