Nuestro Tiempo Juntos Antes De Marcharnos

Dia 39

Sabiendo las consecuencias, caminamos adelante

Sabiendo lo que nos podrá pasar, sin importar lo hacemos

Solo con tal de sentir una gota de vida en nosotros...

Hacemos las cosas sin pensar en lo que puede venir después

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       ¿Alguno de ustedes sabrá, lo que es despertar con el miedo de tener miedo de ti mismo?, porque sabes lo que llevas por dentro y eso no lo puedes cambiar.

      Muy pocos entenderán lo que quiero decir, otros simplemente estarán confundidos y deducirán que ya me he vuelto loca. Mejor dejare que ustedes lo entiendan con el transcurso de este día...

    De pequeña siempre tuve días como estos, y como siempre, las personas a mí alrededor me decían que eso pasaría al tener más edad... Ahora que han pasado años y sigo con lo mismo, no me queda más que tener miedo de mi misma.

       En un día tan lindo mi cuerpo me traiciono, no había nada de molestias y tuve que amanecer así sinceramente muchas veces me odiaba y esta de una de las muchas razones por lo cual lo hacía.

     Eran las 3 am, si las idiota tres am y me desperté por el gran frio que estaba haciendo, lo peor del caso es que ni siquiera estaba haciendo frio tan solo había un calor que hasta a un helado derretía. Tenía tanto sueño que me arrope bien y lo ignore, pensando que la razón de mi frio era que estaba lloviendo, pero todo se fue al carrizo cuando un dolor de cabeza me ataco.

    Dure así dos horas, despierta por esas razones y cuando por fin logre quedarme dormida, mi papa llego y abrió la puerta haciendo el mayor sonido irritante que podría haber escuchado.

Coño, sé que en esta vida tengo mala suerte pero esto definitivamente tenia que ser una joda.

--Buenos días bebe ya es hora de levantarse—Dijo entregándome el desayuno.

     Con cara de muerta me levante y lo mire implorando a todo el universo que notara que hoy no estaba ni para bromas.

--¿Te sientes mal?—pregunto de forma inocente, si yo fuera alguien que no le tuviese respeto su padre ya le hubiese respondido con "No pendejo simplemente estoy fingiendo" menos mal que no lo soy, si no que sería de mí y como soy venezolana, sería peor.

          Para evitar todo eso solo asentí con mi cabeza, mi padre al ver que no dije ni una palabra simplemente me dejo.

      Maldecí mil veces cuando se fue porque me había despertado, pero no me quedo otra opción más volver a intentar dormirme, hoy definitivamente no era mi día.

       Después de muchos intentos de dormirme, al fin lo logre, pero termine despertándome a las 2 pm... Me sentía de lo peor, no podía mover ni un musculo, tanto así que al intentar pararme sentí como si me hubiesen golpeado por una de mis costillas y me quitaran el poco oxigeno que respiraba.

   Solo fue hasta que tosí cuando logre entender lo que me estaba pasando.

        Camine de forma lenta buscando algún familiar en mi casa, después de tanto buscar, me digne a rendirme por completo ya que para ese entonces comprendí otra vez que nadie estaba allí.