Capítulo #5

520 14 1
                                    

-Siempre olvidándose de uno -se quejó Edward.

-¡EDWARD! -chillé, hacía mucho que no hablábamos- ¿Cómo estás? Te extraño, ¿Qué tal Londres?

-Oh basta, sé que no puedes vivir sin -rió- Estoy de maravilla, he avanzado con la chica que te comenté la vez pasada, pronto le pediré que sea mi novia.

-¡Me alegro tanto! Es muy bonita según las fotos que me has mandado -sonreí.

-Sí, bueno, la razón que te llamé fue para una sorpresa -habló él.

-¿De qué tipo? -fruncí mi ceño.

-He mandado un paquete y según el rastreador está por llegar a tu casa, cuando lo tengas me dices que tal.

-De acuerdo...

-Créeme, te encantará.

-Te creeré -afirmé.

-¿Con quién hablas? -Romeo entraba a la cocina para desayunar antes de irnos.

-¿Es Romeo? -preguntó Edward.

-Ajá.

-Pasamelo -sonreí y le acerqué el celular a Romeo.

-Es Edward -él sonrió y tomó el celular.

-¡Edward! -gritó.

Al parecer tendrían una buena conversación, mientras me encargué de limpiar lo poco que había usado para el desayuno de Romeo y mío, las niñas se habían quedado el resto del día con Ross y él me avisó que las llevaría al colegio, había decidido que Romeo no iría hoy al colegio por precaución a que se pueda desmayar otra vez, así que hablé con Stormie y dijo que estaría orgullosa de cuidarlo además que se ofreció a ir por las niñas al colegio y accedí.

Giré a ver a Romeo y vi que había terminado su desayuno, luego se levantó y salió de la cocina.

-¿A dónde vas? -le pregunté pero no me respondió.

Lo seguí hasta que vi que abría la puerta y luego de eso me quedé en shock.

-¿Qué no piensas abrazarme? -Edward me veía con una sonrisa burlona.

-Oh por Dios -corrí a abrazarlo- cuanto tiempo...-susurré.

-Desde el nacimiento de las gemelas -asentí.

-Yo también quiero un abrazó -se quejó Romeo y Edward me dejó para abrazarlo también.

-Pero mira que grande te pones cada vez que te veo, nada de lo que eras en Londres -reímos.

-¿Qué haces acá? -le pregunté.

-Si quieres me voy -señaló la puerta.

Reí y golpee su hombro- Sabes que no me refiero a eso, idiota.

-Lo sé y estoy por acá de vacaciones -sonrió- algo de sol me vendría bien, mucho frío en Londres -hizo una mueca graciosa.

-¿Dónde te quedarás? -le preguntó Romeo.

-Aún iré a buscar un hotel, primero decidí visitarlos -sonrió.

-¡Puedes quedarte acá! -gritó emocionado Romeo y me miró- ¿Verdad que sí, mamá?

¿Qué nos pasó? [Ross Lynch & Tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora