027.

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― Tyler, aguanta un poco más ―gemí haciendo fuerza.

― No p-puedo más... Josh, me duele.

― ¡Tú puedes! ―lo alenté a que aguantara un poco más.

― Es e-enorme...

Una voz nos interrumpió, era mamá quién bajaba de las escaleras con una maleta, Chris venía detrás de ella, con una maleta también.

― ¿Que hacen chicos?

― Sólo tratamos de mover este mueble, queremos llevarlo a la habitación. ―dije apoyándome en este, no pensamos que iba a ser tan pesado.

― Cielo, es muy pesado. ¡Mira a Tyler está rojo!

― Estoy bien ―dijo él, respirando algo agitado.

― ¿Que son esas maletas, ya se van? ―señalé las maletas de ambos con una sonrisa, eso significaba nada más y nada menos que habrá una gran fiesta.

― Si, de hecho nuestro vuelo sale en una hora. ¡El taxi estará por llegar! ―exclamó mamá empujando a Chris hacia el sofá. Solía ponerse tan nerviosa cada vez que viajaba.

En menos de veinte minutos el taxi ya estaba en la puerta de casa. Chris se despidió de Tyler, ambos se dieron un abrazo y luego el señor Joseph me dio la mano, susurrando un "cuídense mucho" asentí con una pequeña sonrisa. Mamá por su lado me dijo que no hiciera fiestas, que sepa controlar el dinero que nos dejó, que nos encargáramos del perro sin nombre y que no llevara chicas a casa, me dio un gran abrazo y un beso, también se despidió de Tyler, finalmente se marcharon.

― Creí que no se irían más ―murmuré limpiando mis manos con un trapo de cocina y se lo lancé a Tyler―. Presiento que estas dos semanas serán... interesantes.

― ¿Que quieres decir con eso?

― Oh pequeño Tyler, ya lo verás.

― Aún debemos hacer algo que te gusta a ti... ―dijo sin mirarme.

― ¿Crees que lo he olvidado? Ven, terminemos de correr el maldito mueble, ya habrá tiempo para hacer cosas que me gusten a mí ―mordí mi labio inferior para no sonreír, probablemente Tyler ni siquiera se imaginaría lo que le tenía preparado.

No pudimos mover el puto mueble, era muy pesado, y Tyler no ayudaba mucho que digamos, decidimos tomarnos un descanso en el sofá mientras en la televisión pasaban Friends, la noche estaba cayendo y yo aún no había organizado la casa. Suspiré cerrando los ojos, las palabras de ahora mi ex novia me dejaron pensativo, a parte de gritarme de que me vaya a la mierda, y de que siempre fui un terrible novio, sus palabras fueron "No creas que no me he dado cuenta de lo que está sucediendo" ¿Acaso era obvio que me gustaba Tyler? ¿O sólo dijo eso para confundirme?! ¡Ni siquiera le dije que me gustaba otra persona! En fin, no debería estar haciéndome problema por eso, que se vaya al demonio.

― ¿Cómo quieres llamarlo? ―la voz de Tyler interrumpió la guerra de preocupaciones de mi linda cabecita, tenía al perro sin nombre en sus piernas mientras le sonreía con ternura.

― Mmm... ―toqué mi mentón―. ¿Que tal Josh? Un perro bonito necesita un nombre bonito, como el mío e igual que yo, obviamente.

― No creo que "Josh" sea un bonito nombre para el perro... ―rascó su cabeza nervioso, tal vez le daba pena porque no quería llamarlo así.

― ¿Cuestionas mi belleza? ―bromeé.

― N-No para nada ―evitó mirarme y sus mejillas no tardaron en enrojecer.

― ¿Ah no? ―me mordí el labio, sacando al perro de sus piernas y me acerqué a él―. ¿Eso quiere decir que soy lindo para ti?

― Josh... n-no me hagas esto, m-me da mucha vergüenza.

― Eres tan tierno cuando te pones así. ―toqué su barbilla con mi dedo índice. Él me sonrió tímidamente.

Lo que sentía por Tyler no se comparaba con lo que sentí por otras personas en el pasado, claro que no, lo sentía más especial, como si lo quisiera proteger de toda la mierda de afuera, iba más allá de lo físico, centrándose más en lo emocional. Me gustaba Tyler, enserio me gustaba mucho pero aún tenía ese miedo de sentir lo que sentía, y odiaba que no me dejara ser yo mismo, le hubiera comido esos encantadores labios que tenía, si no fuera por Brendon quién entró a la casa sin tocar.

― ¡No empiecen el trío sin mi! ―gritó lanzándose arriba de nosotros. Le di un golpe en la cabeza y lo tiré al suelo.

― ¿Que es un trío? ―preguntó Tyler frunciendo el ceño.

― ¿Quieres que te enseñe...?

― Brendon ―le advertí mirándolo mal. Él sólo soltó una carcajada haciéndolo ver más estúpido de lo normal.

― Yah, era broma, aunque si quisieran hacer uno a mi no me dejen afuera eh.

― Mejor cierra la puta boca. ¿Que quieres?

― ¡Vine a ayudarte con la fiesta! No vas a creer lo que traje, esperame ―Brendon se levantó del suelo y se fue corriendo como Naruto a la salida, Tyler y yo nos miramos algo confundidos. Al rato, entró a la casa con una caja, llevaba una peluca de colores y unos lentes en forma de estrellas.

Entonces caí en la cuenta de que algo no andaba bien en él.

― ¿Pero que....? ¿Que mierda estuviste fumando ahora?

― Nada, solo un poco de marihuana ―se encogió de hombros y comenzó a sacar las cosas de la caja. Tyler nos miraba atentamente sin decir nada.

― Brendon...

― Espera, mira esto, una pipa en forma de pene ¿no es genial? Pensé en ti cuando la vi, ya sabes, ahora que aceptaste que te encantan las pollas.

― Guarda eso, da miedo ―metí la pipa en la caja y lo empujé a la cocina―. ¿Eres idiota o que? Tyler no debe enterarse de que fumamos esta mierda. ―susurré.

― ¿Que? ¡Deja de tratarlo como un niño! Él entenderá.

― Podría decírselo a mi madre, y ahí si nos cortaran los huevos en trocitos.

― Josh, habla con él, y si no lo entiende lo castigas. Traje un par de arneses si quieres usarlos hoy.

Resoplé cansado, odiaba cuando Brendon no se tomaba nada en serio, y peor si estaba drogado, empecé a arrancarme los pelos de la cabeza.

― Bien, escucha. Quiero lejos a esta pipa, mientras Tyler no te vea, puedes fumar lo que se te de la gana.

― Gracias Josh, sabía que lo entenderías. ―sonrió y se acercó para abrazarme pero lo aparté rápidamente.

― Dime que solo trajiste marihuana, no quiero meterme en problemas y mucho menos que venga la policía. ¿Oíste?

― Ehm si claro, no te preocupes. El que trae la cocaína es Ryan. ―me dió unos golpecitos en la espalda y salió de la cocina.

• i hate you • [joshler] pt. 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora