~¿A qué te refieres? Gritó Hugo con molestia.
~Awww, Mi pequeño. Contestó con hipocresía a lo que posteriormente gritó con fastidio. ~¡Mocoso! Sabes perfectamente de lo que hablo, ¡Anya no es hija tuya! Deja de ocultar esa mentira.
~Tal vez mi sangre no corra por sus venas, ¡Pero ella es lo más preciado en mi vida! Y para mí siempre será mi hija sin importar nada, aunque tú jamás podrás sentir ese amor... ¡Eres miserable!
Cedric ató aún más las cadenas de Hugo y acercó su varita al cuello del duque.
~¿Recuerdas algo similar? Solo que esta vez no estará Sofía para salvarte.
~¡Hazlo y te arrepentirás!
~Mmm, ¡no!, Puedo torturarte un poco más.
~¿Por qué volviste? No sabemos nada de Sofía... ¡Ella no me quiere! Y yo la dejé ir.
~¡Eres adorable! Pero no lo suficientemente inteligente. Todo se revelará poco a poco y yo me reire de ti. Por eso no puedo matarte todavía. ¡Necesito que se reencuentren! Para después tener la satisfacción de separarlos nuevamente. Por fin Sofía será mía cómo debió ser desde un inicio, ¡No debiste entrometerte! Ella era devota a mi, pero desobedecerme la llevó a la perdición ¡Que gran error cometió!
Volviendo a la narración del libro.
Sofía había dormido junto a la ventana. El señor Cedric era un hombre maduro que la ayudaría en cualquier problema ¿Por qué no seguir sus consejos y alejarse de Hugo?
A la mañana siguiente, Sofía asistió en compañía de su hermano James a un acto de beneficencia organizado por diversos reinos.
La princesa llevaba un vestido color Jade estilo Chanel, acompañado de unos guantes que se deslizaban suavemente por sus delicadas manos.
~Yo llevaré la caja de ropa ¿Por qué no llevas la de juguetes? Habló James señalando una caja con peluches.
~¡Claro! Estoy ansiosa por ver la cara de esos niños.
Sofía se acercó rápidamente e intentó levantar la caja, pero era extremadamente pesada para ella. Tal vez debería esperar a que James volviera para pedir su ayuda, sin embargo una voz la hizo temblar.
~Deja que yo te ayude. Susurró con delicadeza en su oído.
~Hugo...¿Qué haces aquí? Creí que no te gustaban este tipo de eventos.
~Me gustan, además sabía que me necesitarías. Sonrió con vivacidad.
Sofía se perdió en su mirada y Hugo se acercó lentamente a ella.
Sus respiraciones chocaron; cuando la princesa cerró los ojos, la risa de Hugo hizo que despertara de su sueño.~Te deje impactada, debes estar muy enamorada de mi como para caer de esa manera.
Sofía frunció el ceño y dió media vuelta.
~¡El señor Cedric tenía razón! Tu beso fue una mentira ¡Era demasiado bueno para ser verdad! Una persona como tú jamás se fijaría en alguien como yo.
~¿Quién es él para dictar lo que hay en mi corazón? Gritó acercándose a ella para tomarla de los brazos.
El corazón de Sofía comenzó a latir con fuerza y enseguida sintió que Hugo se encontraba de la misma manera. Había una gran tensión entre ambos que estaba lista para ser liberada.
El príncipe la envolvió en un abrazo mientras disfrutaba del suave aroma que despedía la cabellera rizada de Sofía.
~Hugo... Debes soltarme, si alguien nos viera. Habló con pena.
~Quedemonos así un poco más... Deja que te sienta. Incluso cuando no estoy a tu lado te pienso y sueño con tenerte entre mis brazos ¿Es eso malo?
~Hugo... Esto no puede seguir así... Tu y yo no somos y no seremos.
~Quedate conmigo, estoy dispuesto a todo por ti. Una respuesta tuya alentará o silenciará a mi corazón.
Sofía se estremeció en sus brazos y sintió como poco a poco el príncipe iba soltándola de su agarre.
~Esto no funcionará. Comentó antes de recibir un pequeño beso en los labios.
~Sé que sientes lo mismo que yo... ¡Puedo percibirlo! Contestó deslizando suavemente uno de los guantes de su mano.
Sofía sintió como acariciaba suavemente la palma de su mano ya expuesta, sintiendo de inmediato un cosquilleo extenderse por todo su cuerpo. Hugo comenzó a elevarla hasta tenerla justo frente a su cara.
Los nervios de Sofía explotaron cuando beso sus nudillos con amor.
~¡Debo irme! Dijo con la voz cortada.
~Te veré mañana junto a las cataratas del cielo. Sonrió haciéndole un guiño de ojos.
Sofía se recargó sobre un muro de piedra y se dejó caer lentamente. No comprendía todo lo que estaba ocurriendo, pero por alguna razón ¡No quería que dejara de pasar!
~¡Sofia! Te estaba buscando, desapareciste por más de media hora. Habló James acercándose a ella.
~¡Lo siento! Me sentí un poco mareada.
~¿No tienes fiebre? Tu cara está totalmente roja. Exclamó tocando su frente.
~No te preocupes, ya estoy mejor...ahora terminemos de acomodar las cosas para los niños.
A la mañana siguiente Sofía se despertó muy temprano y puso sobre sí un vestido ligero, su visita a las cataratas iba a ser sumamente especial y el sol no iba impedir que se divirtiera. Así que era mejor llevar ropa delgada.
~Princesita Sofía, ¿A dónde se dirige? Pregunto Cedric señalando su vestimenta.
~Visitaré las cataratas del cielo. Contestó con alegría.
~¿Será conveniente que lleve consigo un vestido tan... Tan liviano?
~¿Esta mal?
~Es solo que una princesa no puede hacerlo.
~No iré sola. Comentó siguiéndo su camino.
Cedric frunció el ceño y decidió seguirla sin que ella se diera cuenta.
Constantemente la princesa giraba su cara para asegurarse que nadie la siguiera, cosa que inquieto aun más al hechicero.
Cuando se encontraba segura, aceleró el paso encontrándose con la persona que la esperaba.
~¡Sabia que vendrías! Habló Hugo tomando sus manos.
~Me di cuenta que yo también sueño despierta contigo... Quiero estar a tu lado sin importar lo que la gente piense.
Hugo acomodó los mechones que cubrían su cara y comenzó a esparcir besos alrededor de ella hasta llegar finalmente a sus labios.
Cedric hizo una cara de molestia, pero decidió no intervenir, no hasta después de un tiempo.
Sofía tomo la mano del príncipe y sonrió feliz. Sentía que a su lado jamás podría correr peligro.

ESTÁS LEYENDO
La hija de mi verdadero amor (Sofia Y Hugo)
FanfictionLa princesa Anya encuentra un libro en la biblioteca de su castillo, su sorpresa es el contenido en él ¿Podrá descubrir quien es la protagonista?. Acompañen a Anya en cada paso de la historia y juntos descubran lo que se esconde detrás de la sonrisa...