XIX

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- ¿Y qué hago ahora Ally? La amo. ¡la amo!

- -Se separó de ella para mirarla- Por esto te dije que no te hicieras ilusiones Camz, ve como estás -Secándole las lágrimas- Llevas semanas llorando a diario, eso no es bueno amiga te vas a enfermar

- ¿Por qué siempre me salen mal las cosas? Da igual lo que sea hombre o mujer, ¡todos me utilizan!

- Amiga, ven -Sentándola en la cama, intentando calmarla- Realmente creo que Lauren no te utilizó en ningún momento tienes que te entenderla

- ¡Si yo la entiendo! Pero ¿y a mi? ¿¡Quien me entiende a mí!?! ¡Jo*der! Que también es mi amigo, yo también lo engañé esa parte también me duele a mi

- Si, pero mira tranquilízate y escúchame, ¿vale? Vamos a poner las cosas en su lugar y voy a intentar que entiendas a Lauren. –Suspiró- Tú, ahorita, solo por lo que sientes por Lauren estás muy mal, ¿verdad? –Camila asintió como si fuera obvio- Pues Lauren siente lo mismo, está igual de mal que tu pero a ello tienes que sumarle que también lo quiere a él y además, súmale que se siente culpable por ponerle el cuerno Es totalmente normal que Lauren esté así de confundida y te aseguro que ella está igual o peor que tu, lo que pasa es que tu eres más sensible que ella... ¿Me entiendes?

- Si Ally, te entiendo, sé que me pasé con ella pero estaba nerviosa

- Ya lo sé, pero ahora lo que tienes que hacer es tranquilizarte

- Si, me voy a tranquilizar pero ya está decido Ella ya me dijo que quería acabar con esto, pues así será no intentaré nada más. –Ally soltó una carcajada cosa que le molestó bastante a Camila- ¿Se puede saber de qué co*ño te ríes?

- Pues. De que eso no te lo crees ni tu. Las dos sois muy impulsivas. Y en menos de una semana estoy completamente de que ya os habréis vuelto a revolcar

- Ally tengo mi orgullo, y por muchas ganas que tenga de hacerlo me voy a aguantar, ¿vale? Soy fuerte y puedo hacerlo.

- Si tú lo dices

Lauren, por otro lado, salió del cuarto y se tiró en su cama, simplemente a llorar. No quería hacer nada más que eso. Su teléfono interrumpió el llanto:

- ¿¡Bueno!? –Contestó molesta por la interrupción-

- Valla ¿te molesta que te llame?

Lauren reconoció rápidamente la voz de Troy al otro lado de la línea.

- No no para nada perdóname.

- ¿Podemos hablar?

- Si, claro

- Por teléfono no

- Está bien

- ¿Puedes venir a mi casa?

- Claro, dame una hora y estoy allá.

- De acuerdo, acá te espero

Fue bastante corta y Lauren no tenía ganas de ir a su casa pero tenía que hacerlo. Por otro lado Camila y Ally estaban aún en el cuarto, hasta que el teléfono de Camila sonó.

- ¿Diga?

- Camz

- ¿Troy? –Sorprendida-

- Si, tengo que hablar contigo necesito un consejo

- ¿Un consejo? Dime a ver -Pidiendo en silencio a Dios que no tuviera nada que ver con Lauren-

- Llamé a Lauren para que viniera a mi casa y así hablar con ella -Una vez más, Dios le falló-

- Bien, ¿Y a mi que me importa? –Molesta-

- ¿Qué te pasa?

- Nada, nada perdóname. Dime, ¿qué tengo que ver yo en eso?

- Pues sé que tú estás mucho con ella, tal vez sabes que le pasa. ¿por qué está así conmigo?

Eso le dolió, le dolía saber que el motivo por el que Lauren estaba así con él era ella Incluso por un momento se le pasó por la cabeza contarlo, desahogarse de una vez pero no lo hizo.

- No lo sé Vas a hablar con ella, ¿no? Ella te explicara lo que le pasa.

- Vamos Camz, la conoces sé perfectamente que no me va a decir lo que realmente le pasa probablemente me pedirá perdón y ya no me contara nada. Solamente le dará vueltas al asunto.

- Pues si, parece que es un poco cobarde para decir lo que realmente pasa -No pudo frenar ese impulso y soltó esa rabiosa frase-

- ¿Cobarde? ¿Decir qué? Camz sé que tú lo sabes. Sea lo que sea no me mientas, por favor

Una vez más Camila pensó en decirlo todo, pero no podía por muy cobarde que fuera Lauren no podía traicionarla de esa manera y tampoco se veía capaz de decirle eso a su amigo. Aún así, dijo:

- Troy sea lo que sea no puedes preguntármelo a mi, si no a ella

- Pero

- Pero nada –Interrumpiéndolo- No insistas más, ¿vale? Si de verdad pasa algo te lo dirá

- Vale

- Por cierto ¿Lauren a qué hora iba a ir a tu casa?

- Ahora, me dijo que en una hora estaba aquí

- Ah vale, bueno te dejo que me voy a ir con Ally de de compras, Bye -Colgó-

- ¿Nos vamos de compras? –Preguntó feliz Ally-

- No –Le contestó Camila- Era una excusa para que no preguntara nada más

- Ah ¿y que te dijo?

- Nada, me preguntó si yo sabía lo que le pasaba a Lauren y de verdad, moría de ganas de contárselo

- Ni se te ocurra decirlo Camila.

- ¿Por qué?

- Porque no no puedes hacerlo Serías como -Buscando las palabras correctas- Las típicas mujeres celosas y rencorosas de las telenovelas -Riéndose-

- No, ¡que horror! –Riéndose- Ally -Poniéndose más sería- Lauren va a ir a casa de Troy

- ¿Y?

- ¿Tienes idea de lo que puede pasar?

- Camz ¿no que la ibas a olvidar?

- Si, pero que la olvide no significa que no me duela

- Ah, ¿no?

- No y punto. ­–Zanjando la conversación-

Camila se quedó pensando por un tiempo, hasta que se levantó:

- Ahora vengo

- ¿Qué? Pero ¿A dónde vas? –Viendo como Camila salía del cuarto-

Camila salió del cuarto y encontró a Lauren ya saliendo por la puerta.

- ¡Lauren!

Un Amor InevitableDonde viven las historias. Descúbrelo ahora