XXXI

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Poco a poco Lauren fue abriendo los ojos, confundida.

- ¿Estás bien? –Mirándola preocupada-

- Si no sé que me pasó me quedé dormida

- Estás ardiendo en fiebre -Levantándose y buscando en el armario de Lauren- Y estás toda mojada, tienes que cambiarte

Lauren no contestó, casi no tenía voz. Camila encontró una camisa de tiros y un short.

-Venga -Se acercó otra vez a Lauren, con la ropa en la mano- Te tienes que cambiar -Levantándole la camisa-

Camila le sacó la camisa y seguidamente le puso la otra, después le quitó el pantalón y le puso el short. Todo eso lo hizo con ayuda de Lauren.

- Así vas a estar mejor

- Tengo frío

- Ya, pero no te puedes abrigar si no te sube la fiebre. Voy a buscar algo para bajarte la fiebre, acuéstate ya vengo -Antes de salir le dio un tierno beso en la frente-

Camila salió del cuarto, estaba nerviosa, no sabía que hacer así que fue al cuarto de Ally.

- Ally. –Le encendió la luz-

- ¿Qué pasa? –Media dormida.

- Lauren la encontré en su cama desmayada y ardiendo en fiebre

- ¿Qué? –Se levantó-

- Ya conseguí despertarla y le cambié la ropa, pero no sé que hacerle para la fiebre

- Le das una pastilla de esas que me tomo cuando tengo fiebre

- ¿Nada más?

- Si se pone peor hay que llevarla al hospital

- Vale, yo voy a hacer lo que me dijiste y si se pone peor te aviso

- Está bien, yo voy a estar en el salón

- ¿No te vas a dormir?

- Prefiero esperar a ver si se mejora o qué

- Vale... –Sonriendo-

Camila cogió el termómetro, la pastilla con un vaso de agua y volvió a entrar en el cuarto.

- ¿Cómo estás? –Dejando las cosas encima de la mesita-

- Tengo frío -Volvió a repetir Lauren, casi tiritando-

- Toma -Le dio el vaso de agua con la pastilla- Tómate esto, te vas a sentir mejor

Lauren agarró el vaso de agua, su mano le temblaba pero consiguió domársela sin problemas.

- Y ahora acuéstate, ya verás como se te pasa

- Camz -Acostándose- Acuéstate conmigo, por favor tengo frío

- No puedo te puede subir la fiebre

- Por favor

Lauren se lo pidió con una mirada a la que Camila no pudo negarse.

- Está bien -Suspiró-

Y, sorprendentemente, Camila empezó a desvestirse, quitándose el corto camisón que llevaba. Lauren observaba cada parte del cuerpo de Camila, como si fuera la primera vez Era impactante verla ahí, quitándose la ropa para meterse en su cama.

Ya en ropa interior se acostó al lado de Lauren, pasando su mano alrededor de la cintura de la Pelinegra y pegándola a ella, para darle calor.

- ¿Así estás mejor? –Susurrándoselo al oído-

- Si

- Te vas a poner bien -Le dio un tierno beso en la mejilla-

- Camz -De espaldas a ella-

- ¿Qué? –Acariciándole el cabello-

- Antes

- Shh -Sin dejarla acabar- Ahora no es el momento de hablar nada

- Gracias por cuidarme -Se volteó, quedando muy pegada a ella-

- No tienes que darlas -Susurró, ya que estaba muy cerca-

Lauren se acercó para besarla pero Camila se alejó.

- ¿Qué pasa? –Dijo Lauren, mirándola preocupada-

- Nada duérmete, tienes que descansar

- ¿Por qué no me besas?

- Lauren duérmete.

- Contéstame

- Tenemos que hablar –Lauren iba a hablar pero ella no la dejó- No, ahora no tienes que descansar, estás enferma.

- -Se incorporó, apoyando la cabeza en su mano para ver mejor a Camz- Sé que tenemos que hablar, pero más enferma me voy a poner si no me explicas porque no me quieres besar

- ¿Me quieres? –Preguntó de súbito Camila-

- Te amo. –Respondió sin dudarlo Lauren-

- Pues podrías haber dicho eso cuando Troy dijo que para ti solo fui sexo, ¿no?

- -Suspiró hondo- No tenía caso que lo dijera Camz las cosas se iban a poner peor, él se iba a poner peor No quería hacerle daño

- Pero es que me hiciste daño a mí

- Escúchame... -Le agarró ambas mejillas- No fuiste un juego sexual para mi, te amo No me voy a arrepentir de lo que pasó, no te utilicé, mientras hacíamos el amor pensaba en ti, no en él y si, tu lo haces mucho mejor que él. –Sonriendo- Camz te amo, no lo dudes por favor

Eso bastó para quitarle a Camila todas las dudas y en pocos segundos atrapó a Lauren en un tierno beso, corto, pero tierno. Lauren con eso no se conformó, así que la volvió a besar pero esta vez más profundamente.

Un Amor InevitableDonde viven las historias. Descúbrelo ahora