Gunpowder. (Pólvora)

Capítulo 15.

La bala impactó justo en el dedo gordo del pie derecho de Justin. Eso no se lo esperaba. Ronnie, atendiendo a las señales que Zayn le había mandado segundos antes, había levantado el pie, apartándolo del peligro. El chico soltó a Ronnie por culpa del dolor y esta echó a correr hacia Zayn, que le dio una mano y la ordenó esconderse tras el sofá. Ahora Justin estaba solo y herido. Eran cuatro contra uno. Zayn miró hacia atrás y comprobó que en vez de cuatro, eran tres. Niall estaba herido en un hombro y sangraba bastante. ¿Cómo había pasado aquello? ¿Y cuándo? Negó levemente con la cabeza y dirigió la vista hacia Liam y Harry.

-¿Listos?

Ambos asintieron.

-Ronnie, cuida de Louis y de Niall, por favor.

La chica asintió a la petición de Harry, y luego les vió desaparecer. Cerró los ojos un instante, escuchando detenidamente los miles de disparos y los quejidos. Se preguntaba si alguno de sus amigos saldría herido, si volvería a ver a Zayn con vida, cómo estaría Effy y si podría hacer algo por Louis, que era el que más grave parecía estar. 

Lo que le pareció ser una eternidad más tarde, notó una mano en su hombro. Sintió un escalofrío al imaginarse la mugrienta mano de Justin recorriendo su hombro de arriba a abajo. Se giró suavemente y chocó con unos ojos color miel que la miraban derrotados. Zayn cayó de rodillas a su lado y la chica pudo observar su expresión de cerca. Tenía una pequeña herida en el brazo y varios cortes en la cara. Además estaba empapado en sudor y parecía no poder más. A pesar de eso, el chico le sonrió y, agarrándola de la nuca, juntó sus labios con los de ella. Esta vez, sí disfrutaron del beso. Sabía a victoria, a venganza, a reencuentro. Ronnie llevó su mano hasta el pelo del chico y paseó sus dedos entre sus negros cabellos. Se separaron para coger aire y mostraron sus sonrisas, mirándose a los ojos. Se levantaron y vieron a Liam haciéndole un torniquete a Niall. De Harry se sabía que había echado a correr hacia la habitación donde se encontraba Effy. Y Louis... Louis no había podido soportarlo. Cuando todos se percataron, se hizo un gran silencio en toda la estancia. Solo se oían las violentas respiraciones de los chicos y las palabras lejanas de Harry y Effy. La rubia había enredado sus piernas alrededor de la cintura de Harry. Caminaban por el camino dándose besos y caricias. Cuando llegaron al salón, la chica bajó del cuello de su novio y se dieron la mano. Todos se miraron a los ojos durante unos segundos, hasta que Harry rompió el silencio.

-¿Qué... Qué pasa?-preguntó aún sonriente.

-Harry, eh... Esto... Es Louis...

Niall hablaba indeciso, temeroso de hacerle daño a su amigo.

-¿Qué le pasa? -Harry soltó la mano de Effy y corrió hacia detrás del sofá- ¡Louis!

Se arrodilló a su lado, meciéndole entre sus brazos, intentando algo imposible. El resto de chicos contenía las lágrimas a duras penas e intentaban mirar para otro lado. Zayn rodeaba con un brazo la cintura de Ronnie, que se mordía el labio horrorizada. Effy se había acercado a Niall y se abrazaban mutuamente. Fue Liam quien se acercó a Harry, pasándole una mano por la espalda, intentando calmarle.

-Harry... Ya no puedes hacer nada.

-¡No, joder, tenemos que llevarle al hospital!

Harry apretaba con fuerza la mano de su amigo muerto. Se negaba a dejarle allí.

-Harry -dijo Zayn con la voz dulce- , déjalo, por favor. Ya no podemos hacer nada por Louis, pero Niall está herido, y tú, y todos. Tenemos que ocuparnos de nosotros mismos. 

Soltó a Ronnie y se acercó a su amigo. Le hizo soltar la mano de Louis y, junto a Liam, le ayudó a levantarse. Cuando se giró, todos pudieron contemplar a un nuevo Harry que nunca antes se había mostrado. Tenía los rizos alborotados, echados hacia atrás, dejando su frente descubierta. Sus ojos rojos de llorar hacían juego con su nariz. Tenía la cara un poco hinchada y aspecto infantil. Effy soltó a Niall y corrió hacia él, que ni siquiera se movió del sitio. Solo se limitó a abrir los brazos para acoger a la chica y a hundir la cabeza en su cuello, a pesar de ser más alto que ella. Los demás chicos dejaron que la pareja estuviese sola unos instantes mientras comenzaron a recogerlo todo. Zayn y Liam cargaron los cuerpos de todos los chicos en un coche, excepto el de Louis. El suyo merecía algo más especial. Tenían que preparar una ceremonia.