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Ahn HyeJin, más peligrosa que el chita del video.

*

– Has silencio. – Susurró YongSun, abriendo lentamente la puerta. – Normalmente se van todos a dormir a las nueve. Pero mi madre tiene el sueño liviano, y si se entera que llegamos a esta hora y encima alcoholizadas, nos golpeará a ambas con una ojota. – Dejó pasar a ByulYi y cerró la puerta detrás de ella. – No le importará que tu no seas su hija, te dejará la suela marcada en el trasero igual. Luego llamará a tus padres.

– Ya te lo ha hecho? – Preguntó divertida ByulYi, observando de la casa lo que la luz mortecina de la luna que entraba por la ventana le permitía.

– Con Krys. – Dijo luego de asentir. – Varias veces.

Se quedó estática.

Y ahora?

Cada vez que SooJung iba a su casa, ésta se manejaba como si de su propia casa se tratase. Abría la heladera sin preguntar, subía a su habitación que se encontraba en el segundo piso y se echaba una siesta en su cama, e incluso ha habido veces que le ha dicho "mamá" a su madre.

Qué se supone que se hace cuando una persona que no es tu mejor amiga va a tu casa?

ByulYi se echó en el sofá de la sala de estar, despatarrada.

– Tengo sueño... – Susurró, cerrando sus ojos.

– Eh, sí. – Dijo YongSun con sarcasmo en su voz. – Siéntete como en tu casa, sí.

Suspiró.

Había olvidado que a ByulYi no le importaba nada.

– Este sofá es duro. – Se quejó ByulYi.

– Ve a la cama. – Soltó inconscientemente YongSun, acostumbrado a que SooJung le dijera eso cada vez que quería echarse una siesta en su colchón de dos plazas y rodeada de sus cuatro almohadas de pluma.

Se mordió la lengua tras decirlo.

– No vas a violarme, o sí? – Preguntó Byul.

– Depende, quieres que te viole?

– Depende, quieres que te deje otra voz en el hospital?

– Creo que tengo una bolsa más de doritos... – YongSun se volteó, y sintió su corazón dar un salto al oír la risa de Byul detrás de ella.

– De verdad puedo dormir en tu cama? – Preguntó.

– A mí no me supone ningún problema. – YongSun se encogió de hombros. – Pero quiero que sepas que yo también dormiré en mi cama. Es mía.

ByulYi se apeó de un salto.

– Entonces sí te supondrá un problema. – Dijo acercándose a ella. – Pateo cuando duermo.

YongSun sonrió.

– Yo violo cuando duermo. – Byul sonrió falsamente y pateó la pierna de YongSun. – Sígueme. – Dijo Solar con un hilo de voz, intentando no gritar de dolor pero sin quejarse de la patada. Después de todo, se la había buscado.

Una vez llegadas a la habitación, Byul se quitó las zapatillas pisándolas y sin molestarse en desatar los cordones. Cuando logró descalzarse saltó a la cama, rebotando y abarcando tanto largo y ancho del colchón como sus extremidades extendidas le permitiesen.

– Qué cómoda es tu cama, YongSun! – Exclamó ByulYi con el rostro hundido en la mullida almohada de plumas, boca abajo.

YongSun no prestó atención a lo que ella decía, pues se encontraba demasiado ocupada en intentar averiguar dónde acababa las piernas y dónde comenzaba la espalda. ¡Esta muchacha no tenía trasero!

Gender Bender ♤MoonSun♤Donde viven las historias. Descúbrelo ahora