Lloyd's POV.
Lo he sentido más de una vez, pero ocurre lo mismo que con la tristeza: nunca te acostumbras. Puedes pasar por lo mismo, una y otra vez, no importa, el dolor siempre es el mismo. Claro, Lloyd Garmadon, el niño abandonado, el que ni siquiera el "monstruo" de su padre quería, debería estar acostumbrado a ése sentimiento de traición. El mismo que me abatió cuando esperé a que mis padres fuesen por mi al internado aunque fuera en vacaciones, para pasar tiempo conmigo, como todos los niños, y más adelante, cuando descubrí quién era mi padre y qué había hecho. Y está... está es la segunda vez que un amigo lo ocasiona.
Llevo todo el camino de regreso preguntándome cómo veré a Rune, lo incómodo que será para todos al saber la verdad. ¿Aún podré mirarla como mi amiga... o como mi familia? ¿O será que cuando vea sus ojos de tormenta veré a Cybermad reflejado... o aún peor, a Clouse?
Ella es su sobrina, por el Primer Maestro, debí suponerlo. ¡Era tan obvio! Había tantas pistas... Odio que el afecto que sientes por alguien... termine cegándote.
En cuanto llegamos al Monasterio, tanto Rune como Dracko y Mei están sentados en la sala, trazando algo en los planos que conseguimos de la ciudad. La canción Everybody's Changing suena de fondo. Los tres levantan la cabeza al vernos entrar. Están sonriendo, pero sus sonrisas se desvanecen al ver nuestras expresiones. Hago lo que puedo por evadir a Rune, pero ya no voy a correr. Antes, sólo me aislaba de la gente que me hacía daño, pero ahora me estoy obligando a mí mismo a enfrentar las cosas de cara, no importa qué tan doloroso sea.
-¿Es cierto? -dejo escapar, y siento que mi voz sale como un lúgubre reflejo del dolor en mi interior; cortante, fría... seca.
-Lloyd, lo mejor sería tratarlo con delicadeza... -sugiere Zane, detrás de mí.
-No.
Cierro los ojos y aprieto los puños. ¿Es posible tratar éstas cosas con delicadeza? Ella nos mintió, pudo habernos dicho la verdad, pero no lo hizo. Si Zane espera que las cosas sigan "delicadas" después de éso, entonces se equivoca.
-¿Es verdad? -repito, abriendo los ojos y fijándolos de inmediato en Rune. Ella tiene miedo, me mira como si suponiera de qué hablo-. ¿Eres la hija de Cybermad?
-¿Qué? -murmura Mei, viendo a Rune.
-Lloyd, yo... -su voz suena débil, como si no le perteneciera.
Su flequillo cubre sus ojos, pero puedo notarlo, las lágrimas que surcan sus mejillas como ríos. Está llorando. Siempre creí a Rune como alguien fuerte, jamás pensé verla de éste modo.
-¡Necesito escucharlo de tí! -exclamo.
Rune traga saliva.
-... es cierto...
Desvío la mirada, incapaz de seguir mirándola.
-Eso creí.
-¡Iba a decírselos! ¿¡Está bien!? -grita Rune, furiosa. Mei va a acercarse a ella, pero sale corriendo del monasterio hecha una furia.
Un temor distinto reemplaza el dolor. La veo cerrar la puerta tras de sí, y antes de notarlo ya he corrido hacía ella.
Está molesta. Está triste. ¿Y si se va?
Doy pasos más largos en su dirección. Cole, Jay, Kai y Zane se hacen a un lado, sin intenciones de estorbar. No me fijo en sus expresiones, no escucho lo que dicen. Sólo quiero llegar a la puerta cuanto antes, alcanzarla. Estaba molesto con Rune, sí. Pero me pasa exactamente lo mismo que con mis padres, hace tiempo, cuando me enojaba y los odiaba por no estar conmigo, pero también tenía miedo a que me abandonaran. Porque los quería. Me importaban.
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Ninjago 3: Bajo Amenaza (COMPLETA)
Fanfic>>¿Como puedes seguir adelante cuando crees haber perdido las fuerzas? ¿Cómo puedes hacerlo si las personas que te acompañaron todo el camino...se han alejado<< Cybermad ha tomado control de la ciudad, el equipo parece estar a punto de d...