G A M E R . V-HOPE (YouTube #1) #Vopeawards2019

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    HoSeok esperó de alguna manera convencerle, pero no pudo, TaeHyung estaba terco con ese tema. Quería vivir solo un tiempo, y ni siquiera los besos de su novio lograron hacer que cambiara de opinión.

Por lo que, por primera vez en toda su vida, el youtuber gamer despertó en su departamento, estando completamente solo. La luz del día, la cual de momento no era bloqueada por ninguna cortina, provocó que no pudiese dormir más, así que terminó por levantarse. Tae se sintió extraño al no oír a alguien hacer el desayuno, y suspiró sabiendo que tendría que acostumbrarse a eso, también tendría que poner el despertador, y acomodar todos esos muebles que recién llegaron, ni hablar de lo que debían ser armados. V The Gamer tenía mucho que hacer, aunque igual sonrió ampliamente, sentado en la cama y tocando con suavidad sus sabanas.

—Buenos días. —se susurró, y tomó su celular de la mesita de noche improvisada (cajas sin abrir) y con emoción, mandó un mensaje deseándole lo mismo a su novio. Rió al ver que recibió una respuesta enseguida, y también rió cuando el mayor le pidió una fotografía para saber si seguía vivo.

TaeHyung rió enternecido, y eso hizo, se tomó una foto tierna con su cabello desordenado y su rostro hinchado, pero sonriendo. Pocos mensajes después, se levantó para ir al baño y comenzar su día oficialmente.

Cambiado ya, y en la cocina, se elaboró un delicioso plato de cereal con leche, el único platillo que podía hacerse de momento (sin mencionar que no sabía cocinar) por los materiales que tenía en su cocina. Desayunó entreteniéndose con su celular, y apenas finalizó, se retiró a cepillar sus dientes sin limpiar sus trastes.

Había tanto que hacer que no sabía por donde comenzar, sin embargo estaba contento. Ya había pintado las paredes junto a sus amigos, y le ayudaron con algunas cosas, pero decidió no pedir más ayuda. Ya le habían ayudado bastante.

Empezó a acomodar algunos muebles que ya estaban armados, colocándolos donde creía que se veían mejor, mientras de su celular sonaban canciones que le hacían cantar y querer bailar.

» Luego puedes bailar —se dijo a sí mismo después de poner una mesita pequeña frente al sillón de dos plazas que se compró—, ahora a trabajar Tae. —rió, yendo hasta una caja para abrirla rompiéndola, y de ahí sacó un centro de mesa que le encantó. Era una pequeña maceta con unas flores artificiales, junto a una pequeña figura de un personaje de acción que le encantaba, aparentando salir de entre las plantas.

Luego fue a la cocina, terminando de guardar los pocos platos que tendría y demás trates en la alacena, para luego lavar los que usó para su desayuno. De ahí se marchó un momento a su habitación, mirando con una media sonrisa el escritorio que finalmente pudo armar la noche anterior (luego de luchar en hacerlo por días). Satisfecho se acercó, apoyándose en él para confirmar que no se tambaleaba ni estaba frágil. Contento con eso fue a por sus herramientas de trabajo, por así llamarles, empezando a conectar su PC. Lo hacía con confianza, pues no era nuevo para él, pero aún así tenía cuidado en cuanto al cableado era. Sin darse cuenta ya estaba cantando, y aquello le ayudó a terminar pronto. La idea de comenzar a grabar le llenó de emoción, extrañaba muchísimo a sus suscriptores, también el jugar hablándole a la cámara y también editar. Lo anhelaba.

Sin embargo, no solo hacía falta el volver a instalar todo su material de trabajo (teclado, micrófono y cámara), quería comprar otros elementos para mejorar la calidad de sus videos, y sin mencionar que el Internet aún no había sido instalado en su hogar. Suspiró, para luego forzar su boca a que permaneciese en una línea recta, y miró a su alrededor. También debía arreglar la pared, decorarla para que al grabarse hubiese algo lindo que ver detrás, tal vez una repisa con los botones de YouTube y unos adornos estarían perfectos.