Capítulo 25 || El juicio 2/2

16 0 0
                                    

Un hombre puede marcar la diferencia entre la victoria y el fracaso.

X.

Ojalá la tierra formara un agujero de la nada y me succionara en cuanto antes, quería desaparecer de ese lugar a como sea

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Ojalá la tierra formara un agujero de la nada y me succionara en cuanto antes, quería desaparecer de ese lugar a como sea. Saber que la decisión que iba tomar la jueza sobre todo esto dependía de mí era abrumador para mi cuerpo, no sé si podría cargar con tanto.

Me senté sobre el estrado y limpié mis manos sudorosas sobre los jeans más formales que pude encontrar en mi armario. La verdad es que vivía una vida demasiado informal que nunca me había preocupado por comprar ropa adecuada para este tipo de situaciones. Casi me da un ataque de pánico en cuanto saqué toda mi ropa y me percaté que no tenía nada adecuado para la ocación. Si no hubiera sido por Mangel que llegó al rescate, probablemente hubiera venido sin una buena presentación.

—Joven Doblas —la jueza a mi lado alzó la voz, llamándome casi como regaño. Salté sobre mi lugar y me giré a verle, la cual me miraba a la espera de una respuesta. ¿Acaso ya había preguntado algo?—. Veo que está nervioso.

—Un poco —admtí—, nunca he estado en un juicio.

—Me imagino —observó unos papeles que tenía en mano y habló sin siquiera dirigirme la mirada—. No tiene antecedentes pero su historial me dice que es una persona con demasiada libertad. ¿Va mucho a fiestas?

—Constantemente —al ver el rostro de pánico que Kya había puesto al escucharme decir aquello, carraspeé y me corregí—, quiero decir, tengo muchos eventos. El ser YouTuber me hace salir de casa cuando me invitan a una celebración sobre algo o esas cosas, pero no las llamamos fiestas.

—¿O sea que sus salidas son por las invitaciones de ciertas personas?

—Sí, son personas importantes que quieren que patrocine algo o que asista a su evento para más publicidad.

—Entiendo.

El silencio gobernó el lugar y no pude evitar sentirme incómodo. ¿Había dicho algo mal? Porque si era así golpearía mi cabeza sobre la fría madera del estrado.

La jueza hizo un sonido casi imperceptible en cuanto movió los papeles, dejándolos debajo de sus brazos entrelazados. Quitó sus lentes del puente de su nariz y me miró atenta.

—¿Cómo tomó la noticia sobre Maddie Doblas Baker?

Escuchar decir el nombre completo de aquella pequeña en voz alta me hacía sentir una sensación de felicidad. Seguía sin poder creérmelo, haber tenido una hija todo este tiempo y que tú no hayas tenido ni puta idea sorprende pero no evita sentir la impotencia por el «qué hubiera pasado si yo...», pero dejé de pensar en cuanto me percaté que estaba demorándome y que el juicio no iba a durar toda la vida a la espera de mi respuesta.

—Me sentí sorprendido, era algo que no me esperaba. Nunca me enteré por Kya y la verdad es que tampoco llegué a saber por qué jamás se atrevió a decirme. Entiendo que quería protegerme, pero esa pequeña también es mi hija y tengo derecho a saberlo —relamí mis labios, pausando unos segundos—. Me interesé mucho en su vida después de que me pidió el tiempo en nuestra relación, supuse que había algo que no me estaba diciendo, así que decidí abrir una investigación y fue que me enteré hace exactamente seis meses que era papá de esa pequeña.

La pequeña de ojos color leopardo (elrubiusOMG) || #Goldenlipsawards2018Donde viven las historias. Descúbrelo ahora