Ocho: La discusión.

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- Bueno, aquí estamos - anuncié cundo estábamos frente a mi casa.

- Esta es tu casa? - preguntó algo sorprendido

- Sí

- WOW! Es muy... Linda. - dijo mirando toda el área

- Gracias, por traerme, gracias por... Todo

- De que hablas? Tenía que sacarte de ahí

- de todas formas, gracias. ¿Quieres pasar?

- Claro

Entramos a casa y gracias a Dios no había nadie. Me gire a mirar a Levi y tenía la mirada clavada en mí mano derecha.

- ¿Que tanto ves? - pregunté levantando las manos.

- Oye tranquilo viejo! - exclamó haciendo la pose de Drake Bell - sólo miraba tus llaves

- ¿Que tienen mis llaves? - fruncí el celo y comence a revisar mis llaves algo extrañada

- Me gusta tu llavero - confesó señalando un llavero de la NASA que tenía colgando

"A mí me gustas tú"

- Acompañame a mi habitación

- Apenas si te conozco ¿Y ya me quieres llevar a la cama? - imitó una pose de chica - creí que al menos ibas a invitarme un café, un helado o algo - ahora fingió hacerce el ofendido - no soy tan fácil!

- Deja de estar de idiota y acompáñame por otro suéter y así pueda devolverte el tuyo..

- Ahh! - movió la cabeza afirmando, como procesando la información - prefiero quedarme - sonrió nervioso

- Okey, como quieras - alce los hombros - creí eras más buena onda

Subí las escaleras rápidamente, para al final entrar a mi habitación. Comence a buscar algo cómodo en mi armario, me quite la sudadera de Levi y me la puse sobre mi pecho, di la vuelta y cuando abrí la puerta para preguntarle algo él estaba afuera. Abrí los ojos como platos.

- Ehh.. hola - sonreí nerviosa

- ah hola? - hizo una mueca - solo vine para decirte que no era necesario que me la devuelvas, puedes entregarme mañana

- No, sólo deja me cambio y..

- ¿Que te parece si mejor me prestas una sudadera tuya, y así intercambiamos - me interrumpió

- Okey

- ¿Donde esta tu baño?- pregunto ladeando la cabeza.

- Jajaja por allá - señale afuera de mi cuarto hacia al fondo del pasillo

- Bien! Dejo que te cambies ¿te espero abajo?

- Okey - cerré la puerta y me puse algo más cómodo.
Baje con unos shorts grises de pijama y un suéter blanco a rayas grises, muy flojo casi cubría el short.

- Listo! - anuncie nerviosa cuando baje a la sala. Él estaba sentado haciendo algo en su celular.

- Oh hola! - apagó su celular y se levantó -

- Hola - salude nerviosa

- ¿Y mi sudadera? - frunció el seño

- ¿Tu sudadera? Pero tú dijiste que..

- Hablo de la sudadera que me vas a prestar

- Ah - afirme con la cabeza - oye! te gusta interrumpirme ¿verdad?

- ¿De que hablas?

- De nada, olvídalo - me gire sobre mis talones y me dirigí a mi habitación - acompáñame por "tu sudadera" - hice con millas con mis dedos y seguí caminando.

Maldita Sociedad. (CANCELADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora